El programa BIP cántabro da inicio con 181 becas entre críticas
Al programa de Becas de Iniciación a la Profesión docente (BIP) se han acogido 181 becarios que comienzan su formación en los centros educativos públicos y concertados de Cantabria para su formación práctica durante cuatro meses–hasta el final del curso 2014-15–, bajo la tutela de tutores con experiencia docente. Se han adjudicado 114 becas para Infantil y 67 para Secundaria.
En la jornada de orientación, que se celebró la semana pasada en la UNED, dirigida a estos becarios BIP, el consejero, Miguel Ángel Serna, insistió en que “se trata de un programa piloto que servirá de experiencia para mejorar el programa en el futuro”. Para el curso escolar 2015-16 anunció que también se dará dicha convocatoria basada en las mismas premisas –titulación y nivel B2 de inglés–, pero cuya duración se prolongará todo el curso académico. En esta ocasión, la convocatoria, que saldrá el 10 de julio, supondrá 300 becas, de las cuales 180 serán para Infantil y Primaria y 120 para Secundaria. Además, se han registrado solicitudes de 100 centros y 412 tutores interesados en supervisar a los becarios. De ellas, 60 corresponden a centros públicos –con 223 tutores– y otras 40 son de centros concertados –con 179 tutores–.
El titular de Educación, que estuvo acompañado por los directores generales de Universidades y de Ordenación e Innovación Académica, Marta Guijarro y José Luis Blanco respectivamente, así como por la directora de la Unidad Técnica que coordina el programa BIP, Tatiana Álvarez, explicó en la jornada que “Cantabria está a la cabeza en ámbitos como la inclusión, la ratio de alumnos por profesor, el gasto por alumno o en el bajo porcentaje de abandono escolar con un 10%, pero los informes y evaluaciones reflejan algunas carencias que es preciso subsanar en matemáticas, ciencias o idiomas de los alumnos de 9 años”.
La implantación del programa de becas BIP justifica el consejero que “se debe enmarcar en las necesidades de formación del profesorado para hacer frente a algunos retos del sistema educativo, como la bajada de alumnos repetidores”. Además, está convencido de que “la calidad de la Educación en Cantabria y en España pasa por la mejor preparación posible de nuestros profesores”.
Rechazo de los sindicatos
Los representantes de los sindicatos CCOO, UGT, STEC y ANPE y de FAPA acusaron al presidente del Consejo Escolar de Cantabria, Raúl Fernández, de la mala decisión tomada sobre la enseñanza en la región con la implantación de estas becas docentes. Además, UGT insistió en el fracaso del Consejo “con solo 180 solicitudes, un 36% de las 500 previstas”.
ANPE ha rechazado que el programa de becas BIP contribuya a mejorar la calidad de la enseñanza, como sostiene Serna, y ha criticado que “supone la precarización del empleo entre el profesorado”. ANPE, que ha recurrido la orden por la que se convocaron estas becas, ha pedido al consejero que, “si de verdad quiere mejorar la enseñanza, invierta en la Educación pública el dinero consignado para estas becas”. También le ha animado a mejorar la formación pedagógica de los futuros docentes en vez de plantear unas becas que, en opinión del sindicato, “desprecian las prácticas que ya hacen los futuros profesores durante su paso por la universidad”.
CCOO ha acusado al Ministerio de Educación de utilizar a Cantabria como “avanzadilla para precarizar el trabajo docente, sustituyendo profesores fijos por becarios”. El sindicato se refiere así al anuncio del Ministerio de que destinará el próximo curso 22 millones de euros para copiar el modelo que planteó la Consejería de Educación de Cantabria de las becas BIP y contratar así a 2.000 titulados universitarios por 1.000 euros al mes.