La evaluación docente, de nuevo en el debate

Se trata de un tema Guadiana, pero nadie se ha atrevido a llevarse el gato al agua. Un 36% de los profesores en España nunca ha sido sometido a una evaluación formal, cuatro veces más que la media de la OCDE. Y, para el presidente del PP, Pablo Casado, esto propicia que “los mejores cobren lo mismo que los pocos que son peores”. En la cuenta atrás para las elecciones del 28 de abril ha propuesto pluses por desempeño. Pese a que los expertos coinciden en la necesidad de la evaluación para la mejora, esta idea se ha topado una y otra vez con la oposición de los sindicatos, que proclaman que la evaluación se ha de negociar e incluir en el Estatuto Docente. Tanto la ministra Celaá como su predecesor han comprobado cómo cualquier anuncio en esta línea debe estar muy perfilado para que no se les acuse de demonizar al docente. Solo con iniciativas reflexionadas y consensuadas se logrará que este sienta que están pensadas para prestigiar la función docente y mejorar el desarrollo profesional dentro de esta.