Un vía directa al empleo y un empleo eficiente

Hoy en día parece imperar una obligación tácita en cuanto a qué estudiar. Es decir, el mundo actual y, por tanto, la coyuntura que se desprende de él comporta una infinidad de titulados universitarios, quedándose rezagados, en una posición menos ventajosa, estudios tan importantes como los de Formación Profesional. Esta etapa deben modernizarse, adaptarse y optimizarse para que tanto sus alumnos como sus titulaciones se adapten a los requerimientos actuales y futuros del mundo laboral. España no debe obsesionarse con generar titulados universitarios, algo positivo, sin duda, por otro lado. Pero la FP no debe caer en el olvido, una formación que realmente es una vía directa al trabajo, sin ambages. La Educación se debe mimar, cuidar, verter toda la atención como si de un bebé se tratase, porque será ella la que sustentará la economía, los avances o los descubrimientos y, en este caso en concreto, el empleo. Un empleo más eficiente con trabajadores mejor preparados.