El cuerpo educativo sabe cómo mover el esqueleto

“Ahora toca unir el cúbito y el radio al húmero para que el brazo quede en perfectas condiciones…”, dice el profesor a los alumnos de 2º de Primaria del Colegio “Aitana”, de Alicante. Pero, no hay que asustarse. No es que el centro haya improvisado un quirófano para que los chicos operen como si de expertos cirujanos se tratase. Simplemente están construyendo –dentro de la unidad didáctica El cuerpo humano– unos esqueletos con corcho blanco, palillos y papel para aprender cómo es su cuerpo y conocer la utilidad de algunos de sus órganos. El material necesario para llevar a cabo esta humana tarea ha sido elaborado por los profesores Juan José Aranda, Caprasio Martínez y Jesús Alonso con la ayuda de unas plantillas de madera y una máquina que han preparado para facilitar el trabajo. Ahora sólo hay que seguir un orden de operaciones lógico:

1. Unimos el fémur a la tibia y al peroné utilizando medio palillo; luego le ponemos cola de carpintero.

2. Acoplamos la cabeza del fémur a la cadera, empleando palillos a modo de clavo y un pequeño martillo de madera; después le aplicamos la cola.

3. Pinchamos pequeños cuadraditos de corcho (vértebras) en un palillo largo de madera y ya tenemos la columna vertebral, a la que clavamos medios palillos en las vértebras a modo de costillas. Después, se inserta el cráneo en un extremo, la cadera en otro y se encola.

4. Fijamos los esqueletos a la base mediante trocitos de palillo, con lo que ya tenemos el brazo y la mano. Acoplamos los húmeros a una de las vértebras mediante dos palillos (clavícula), pegamos los omoplatos y elaboramos el esternón con sus costillas atravesando palillos en un trocito de corcho.

5. Pintamos los órganos en un dibujo, los recortamos y los unimos con pegamento al esqueleto.

6. Pegamos trocitos de palillos en la base para confeccionar los huesos de los pies.
De esta forma sencilla y entretenida se pueden conocer las partes del cuerpo y aprender a mover el esqueleto.