Nos invaden los dinosaurios

El primer parque paleontológico del mundo, Dinópolis, ha puesto en marcha una nueva campaña que ofrece a los centros educativos la posibilidad de realizar un viaje para conocer de una forma divertida, fácil y económica todos los secretos de la evolución de la vida de nuestro planeta.

Dinópolis ha fijado precios especiales para escolares y colaborará en la organización de los viajes para aquellos grupos que quieran pasar la noche en Teruel. Y es que es mucho lo que hay que ver: uno de los mejores museos paleontológicos de Europa, además de espectáculos y atracciones repletas de emociones es lo que espera a estos pequeños visitantes que podrán explorar, aprender, inventar y divertirse con la amena compañía de una gran variedad de animales extinguidos.

Además, no hay que olvidar la ubicación de este parque, la ciudad de Teruel. Por ello, se ofrece a los escolares la posibilidad de realizar una visita guiada que, entre otros atractivos, cuenta con un conjunto mudéjar declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1986.

La oferta de Dinópolis se concreta en Dinocole, un paquete especial que incluye la entrada al parque, la comida y un cuaderno didáctico para que los alumnos, después de ver el parque, puedan seguir trabajando en clase sobre lo que han aprendido en su recorrido por el mismo.

12.000 m2 de emoción

Para los que crean que los dinosaurios se extinguieron hace 65 millones de años, no estaría de más recorrer estos 12.000 m2 situados en Teruel capital, próximos a la carretera de Valencia. De ellos, 9.000 m2 pertenecen a la exposición paleontológica, la mayor de Europa y una de las mayores del mundo, y la única en los cinco continentes en la que se pueden ver al mismo tiempo los esqueletos de un Tyrannosaurus rex y un Bachiosaurus.

Entre las interesantes posibilidades de Dinópolis se encuentra el Viaje en el Tiempo, un recorrido especialmente ambientado con locuciones, luz, sonidos, música y efectos especiales realizado en un vehículo que se mueve sobre raíles. En él, el visitante hace un viaje de millones de años, desde el Bing-Bang hasta el final del período Cretácico, momento de la extinción de los dinosaurios.
El otro gran espectáculo de Dinópolis se llama T-Rex. Gracias a la tecnología japonesa más avanzada y a muchos años de investigación científica se ha creado el animatrónico más sofisticado del mundo, un Tyrannosaurus rex que vive en el siglo XXI y únicamente en Teruel.

Pero, además de la parte dedicada al ocio-espectáculo, también destaca el área dedicada a la exposición museística, donde los visitantes pueden contemplar in situ el trabajo de restauradores y paleontólogos en el Laboratorio de Restauración, en el que proyecciones audiovisuales relatan los detalles sobre los procesos de fosilización y recuperación de los huesos.

Por otro lado, a través de la Rampa del Tiempo Geológico, en la que se explica de una manera visual y didáctica las dimensiones del tiempo geológico, se accede a la Sala del Mundo Acuático. En ella, entre otros fósiles de dimensiones gigantescas, se puede contemplar la réplica de una mandíbula de Cacharodon Megalodón, un tiburón que podía llegar a medir entre 18 y 20 metros de longitud y que hoy por hoy se conoce como el pez carnívoro más grande que ha existido.

Dinosaurios de cine

Durante la visita a Dinópolis se pueden ver varias proyecciones, entre ellas, la primera proyección estereoscópica comercial realizada en España, es decir, una película en tres dimensiones que muestra cómo era un día en la vida de una familia de dinosaurios.

Por último, cabe mencionar una zona de recreo al aire libre dotada de 3.000 m2. Se trata del Sauriopark, un espacio pensado para que los niños de entre 4 y 10 años se diviertan y sus padres descansen mientras les acompañan.
De este modo, los más pequeños pueden disfrutar del Rocajuegos, donde las atracciones del Troncomóvil, el Brincosaurio, el Dinovivo o el Iguanadon son sólo algunas de las opciones para pasárselo en grande.