Escasos cambios en las elecciones sindicales con respecto a 1998
Aunque la mayor subida registrada ha sido la de la confederación STES, con 13 delegados más, no les ha bastado para alcanzar a CCOO, que continúa en el primer puesto con 367 delegados.
Los resultados de los sindicatos con representación nacional han sido: CCOO, los ya mencionados 367 delegados, perdiendo uno con respecto a 1998; STES en segundo lugar, con 361 delegados, se queda a muy poca distancia y podría remontar tras las elecciones en las dos provincias que faltan, Badajoz y Segovia; ANPE conserva el tercer lugar, con 238 delegados, a pesar de haber bajado nada menos que 48; UGT pierde 29, y se queda en cuarto lugar con 224; y cierra la lista CSI-CSIF, que con 166 delegados pierde 21 con respecto a 1998.
Sindicatos locales
Los sindicatos que han dado la sorpresa han sido los locales: en Andalucía el sindicato SADI ha conseguido el segundo puesto, con 58 delegados, a 8 de CCOO, el sindicato mayoritario; en Canarias, la sorpresa la ha dado Insucan, el sindicato de interinos y sustitutos, situandose en tercer lugar tras CCOO y STES; en Galicia, CIG repitió victoria.
El único que no se han visto perjudicado por el crecimiento de los sindicatos locales han sido STES, que gana en nada menos que ocho comunidades –CCOO sólo alcanza la mayoría en cuatro–, pero que sufre su escasa implantación en dos grandes autonomías, Madrid y Andalucía, donde pierde toda su ventaja.
CCOO se mantiene en el primer puesto perdiendo tan sólo un representante, logra representación en todas las comunidades y gana en cuatro:Andalucía, Madrid, Asturias y Ceuta.
Los más perjudicados por la subida de las organizaciones locales han sido los sindicatos profesionales: ANPE mantiene la tercera posición pese a perder 48 delegados, y gana en Murcia y Castilla-La Mancha; y CSI-CSIF pierde 21, situándose en el quinto puesto, consiguiendo mayoría en Cáceres y Aragón.
UGT mantiene el cuarto puesto, pierde 29 representantes y no consigue la mayoría en ninguna Autonomía.
La repetición de los resultados de 1998 indica la escasa influencia que ha tenido el posicionamiento ante la LOCE, primando en la decisión de los docentes las cuestiones laborales.