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El fantasma del envejecimiento de los docentes amenaza a Europa

El Informe Eurydice 2002 pone de manifiesto el paulatino envejecimiento de los docentes europeos, lo que hace peligrar el relevo generacional en un futuro próximo.
Miércoles, 10 de septiembre de 2003
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Claro, que hay países y países. Por ejemplo, Italia y Austria deberían empezar a preocuparse: no sólo no llegan al 1% de docentes de Secundaria por debajo de los 30 años, sino que Italia tiene casi el 90% por encima de los 40 años.

Aunque ambos países son casos extremos, que pueden poner en peligro su sistema educativo por falta de relevos –el Reino Unido o Finlandia, con unas cifras bastante mejores, están teniendo muchos problemas para renovar los claustros–, la media de la Unión Europea (que coincide bastante con la española) no deja de preocupar.

Poca juventud

El país ideal, aquel que tiene una media de edad equilibrada y renueva sus claustros sin traumas, sería aquel cuyos porcentajes por tramos de edad oscilan entre el 20 y el 30%, situación que sólo se cumple en Eslovaquia y en el Reino Unido. Las situaciones de peligro, aquellas en las que los mayores de 50 años pasan del 35%: los países nórdicos –agravado porque tienen el mayor porcentaje de docentes sobre la población activa, y por tanto la renovación necesita más profesores–, Italia, Holanda. Claro, que la media de la UE se sitúa en un peligroso el 34%.

La situación es, evidentemente, mejor en Primaria que en Secundaria, lo que agrava el problema: los maestros son “más encajables”, mientras que la compartimentación del profesorado de Secundaria hace muy difícil la movilidad. De hecho, el primer síntoma de alarma es que quedan vacantes algunas especialidades menores. El caso alemán es bastante significativo: tan sólo el 17% de los docentes de Secundaria es menor de 40 años, y tienen más de 800.000 docentes.

España

Nuestro país, sin dormirse, puede respirar con cierta tranquilidad, pues aunque la curva sube entre los 30 y los 50 años considerablemente, el relevo parece asegurado. De momento, el envejecimiento se ceba sólo en algunas comunidades (las grandes urbes, que son destino preferente y donde por tanto son necesarios muchos puntos para acceder a una plaza), que son los que tendrán que aplicar medidas. Esperemos que los demás no tengan que copiarlos pronto.

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