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“No hablo con la ministra, el PP jamás recoge nuestras propuestas”

Entrevista en exclusiva para MAGISTERIO con la consejera de Educación de Cataluña, Carmen Laura Gil.
Miércoles, 29 de octubre de 2003
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Cataluña ha interpuesto cinco recursos de inconstitucionalidad a los Reales Decretos de la LOCE por considerar que vulnera sus competencias. La consejera de Educación de la Generalitat, Carmen Laura Gil, se queja del poco margen que deja la ley para que las autonomías desarrollen sus propios decretos y del ataque a la cohesión social de Cataluña en temas como las horas de lengua en Primaria.

—En general, ¿qué opina de la LOCE?
—Creo que se ha perdido la ocasión de hacer una ley de mínimos que lleve al Estado español al siglo XXI. Todas las leyes de los países de la OCDE van en dirección contraria a la LOCE. Aquellas van hacia adelante y la LOCE hacia atrás.

—Antes de que fuera aprobada, ¿no ha faltado más diálogo con la ministra?
—Yo no hablo con Pilar del Castillo. Jamás recogen nuestras peticiones. Es imposible llegar a ningún tipo de acuerdo cuando se nos está atacando en nuestra propia cohesión social. Con el gobierno socialista estuvimos dialogando durante dos años, con el Partido Popular ha sido imposible. Nosotros defendemos los intereses de Catalunya y de nuestros alumnos por encima de todo. Habrá que ver qué dice el Tribunal Constitucional de nuestros recursos. Confío en la justícia, saben que tenemos razón, que el PP ha vaciado de competencias las comunidades autónomas.

—En su propuesta sobre las horas de Lengua en Primaria (dos de castellano, dos de catalán y dos de estructuras comunes) no hay ningún resquicio legal. ¿No es una postura de insumisión?
—No creo que sea de insumisión, pero si es necesaria la habrá. Aunque estoy segura que no lo será, porque es evidente que son dos lenguas muy próximas. Nosotros buscamos el dominio de las dos lenguas y nos indigna profundamente que se diga que estamos en contra del castellano, porque a los 16 años nuestros alumnos dominan tanto el catalán como el castellano. Todas las evaluaciones que hace el mismo Ministerio de Educación han visto que el dominio del casellano es igual y en algunos casos superior al de otras comunidades monolingües. Nuestro sistema educativo linguístico es muy sólido.

—Uno de los decretos que ha de desarrollar es el de la función directiva. Algunos partidos y asociaciones de directivos, como AXIA, reclaman más profesionalización y autonomía, ¿en qué línea irán?
—Tenemos un decreto que ya hemos pasado a los centros y conocen ya todos nuestros directores, que nos han aportado observaciones. Somos los primeros que estamos dando más autonomía, como a los directores, aunque tímidamente, para que puedan escoger a su profesorado de manera legal con respecto a la normativa básica. Y lo hacen sabiendo que los sindicatos no están de acuerdo. La LOCE ya deja claro que la dirección no es un cuerpo aparte, pero consideramos que un buen director debe permanecer todos los años que el claustro y el Consejo Escolar quieran.

—¿Les subirán el sueldo?
—En esta legislatura ya hemos aumentado los complementos y, dentro de nuestras limitaciones y de las prioridades que tengamos en el presupuesto, lo haremos.

—Los socialistas contemplan la posibilidad de crear la figura de un administrador en los centros docentes para ocuparse de todas las tareas administrativas, ¿su gobierno también?
—Es algo que ya lo establecía la Logse, y supongo que también la LOCE. En centros muy grandes –ya lo hemos hablado con los directores– creemos que si que ha de haber un administrador, pero no en todos, porque también tenemos centros públicos muy pequeños. Probablemente no debería ser un profesor, sino una persona que conozca la Administración. Esta propuesta no es ninguna novedad.

—En general, toda la profesión se queja de que cobra sueldos más bajos que en otras comunidades.
—No es cierto, lo podían decir a principios de legislatura, pero firmamos un acuerdo con los sindicatos y yo diría que están como prácticamente en todas las comunidades y en el momento en que lo firmamos estábamos a la cabecera. Si los sindicatos no estuvieran de acuerdo no lo hubieran firmado.

—Una de las cuestiones que centran el debate electoral es el bajo PIB que tiene Cataluña en Educación, alrededor del 2%, cuando en España es del 4,5% y en Europa supera el 5%.
—No conozco las cifras, pero es igual. No se puede hablar de Cataluña como si fuera un Estado. Parte de nuestra renta va a otras comunidades y la damos de forma solidaria, por eso nuestro PIB es inferior a nuestra producción de riqueza. Es diferente a la situación del País Vasco, donde todo se queda allí. Además, cuando se dan estas cifras tampoco se habla de que los ayuntamientos mantienen el funcionamiento ordinario de los centros públicos.

—De todas maneras, ¿no sería necesario aumentar el presupuesto del Departamento de Educación?
—Yo no me peleo para conseguir parte del presupuesto de otras consejerías. La Generalitat prioriza lo que beneficia más a la sociedad catalana. El Departamento de Educación tampoco engloba toda la formación.

—Cierto, ¿por qué su consejería no se ocupa de la formación de adultos?
—La enseñanza de adultos repara déficits. Nosotros ya nos ocupamos de más de un millón de alumnos y es una tarea muy grande. Es verdad que la formación de adultos podría pasar al Departamento de Educación, pero en Bienestar y Familia está dando muy buenos resultados.

—A pesar del Plan de choque, todavía quedan barracones.
—Habrá siempre, aunque ahora los hacemos con una filosofía diferente. Es una forma digna de escolarizar de forma temporal. Ahora encargamos el proyecto de obra en cuanto tenemos el solar y podemos tardar en construir el edificio definitivo dos o tres cursos. Las aulas lo tienen todo y también hacemos el comedor, las aulas de informática y de tecnología, la biblioteca e incluso unos porches para ir de unas a otras.

—¿No hay una falta de planificación?
—Con más planificación tampoco puedes preveerlo todo. Hemos construido 85 escuelas este año, 200.000 personas han cambiado de domicilio. Las escuelas no tienen ruedas. Podemos hacer una planificación sobre el número de nacimientos. La inmigración no la podemos saber de forma exacta. Para la próxima legislatura nos hemos marcado construir 90 nuevos centros docentes.

—También son provisionales las nuevas escuelas oficiales de idiomas.
—Sí son provisionales, aunque la vida de una EOI temporal puede ser muy larga. Queremos rehabilitar edificios y dinamizar barrios en declive. Nuestro objetivo es que haya un EOI en cada ciudad o pueblo con un peso específico.

—Todavía no han cumplido el objetivo de crear 30.000 nuevas plazas de guardería.
—Lo prometimos en 2001 y ya hemos creando 5.000 nuevas plazas cada año. Nos faltan por cumplir dos para conseguirlas en el plazo que nos marcamos, cinco años. Y estamos llegando a acuerdos con los ayuntamientos de la Federación de Municipios de Cataluña.

Interinos, sustitutos y nuevas plazas fijas

––Los sindicatos se quejan repetidamente del alto número de interinos.
––Desconozco que sea más alto. Además, ponen en el mismo saco a interinos y sustitutos. Un sustituto que ha trabajado 15 días no es un interino, y cuando un interino se pone enfermo también tiene sustituto.

––Se habla de 15.000 interinos y sustitutos.
––No es ese número, en absoluto, porque a 1 de septiembre los interinos ya estaban todos colocados. Cada año entra gente nueva, y cuanto más profesorado tienes, más sustitutos hay.

––Recientemente han negociado con los sindicatos las plazas para la próxima convocatoria de oposiciones, ¿finalmente serán 800 ?
––No lo sé. Creo que la directora general de Recursos Humanos se estaba planteando incrementarlas en un determinado número.

––Se les ha acusado de tacañería.
––La negociación no se ha acabado, supongo que lo decidiremos esta semana.

––Y de falta de diálogo con algunos colectivos, como los maestros de ESO.
––Con los directores y directoras hay un diálogo y un clima excelente, para los sindicatos tenemos la Mesa de Negociación. Todo el profesorado está representado por los sindicatos y los centros por los directores, por tanto estamos hablando constantemente con ellos mediante las juntas y las comisiones que estudian nuestros decretos. Con los sindicatos sólo tratamos temas laborales. 

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