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5.000 niños mueren cada día por agua contaminada

Con motivo del Día Internacional del Agua, Unicef y Manos Unidas han dado la voz de alarma: 1.100 millones de personas no tienen acceso al agua potable. Además, el agua contaminada y la falta de saneamiento causan la muerte de 5.000 niños cada día.
Miércoles, 31 de marzo de 2004
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Autor: Zaida PÉREZ DE ARANDA

El pasado 22 de marzo se celebraba el Día Internacional del Agua, centrado este año en los desastres naturales porque cuando éstos “destruyen o contaminan los suministros de agua, las vidas de los niños y niñas corren grave peligro”, ha declarado Carol Bellamy, directora ejecutiva de Unicef.

No en vano, en la actualidad mueren más pequeños por enfermedades relacionadas con la falta de agua y saneamiento que por cualquier otra afección, como la neumonía o el sarampión. Y es que las enfermedades diarréicas se han convertido en la causa número uno de las muertes de niños menores de cinco años, cobrándose la vida de más de dos millones de niños cada año, apróximadamente unos 5.000 al día.

Además, los niños que viven en condiciones insalubres y beben agua no segura enferman más a menudo y de forma más grave y sufren retrasos en su crecimiento y desarrollo.

El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia coordina habitualmente la respuesta de emergencia en materia de agua y saneamiento. El compromiso de Unicef en esta materia no es otro que asegurar el suministro de agua potable y el acceso a un saneamiento adecuado en las 72 horas siguientes al comienzo de una emergencia, habida cuenta de que los más jóvenes son particularmente vulnerables a los peligros del agua contaminada. Como parte de la respuesta inmediata en las situaciones de emergencia, Unicef distribuye equipos básicos de agua compuestos por cubos plegables, pastillas de jabón, tabletas purificadoras e instrucciones de uso en la lengua local.

Carol Bellamy ha recomendado encarecidamente a los gobiernos que continúen su inversión en agua potable y servicios sanitarios. Se trata de seguir bajando una cifra, la de niños muertos al año por diarrea, que desde los años 80 ha disminuido en casi un millón.

Por su parte, Manos Unidas denuncia que un sexto de la población mundial y el 20 por ciento de los niños carece de acceso al agua potable, un bien común que, esgún esta organización, ha de ser considerado como un derecho público. 

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