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“La bondad de la Logse es que a los 14 años no se decida”

Entrevista en exclusiva para MAGISTERIO con Marta Mata, presidenta del Consejo Escolar del Estado.
Miércoles, 9 de junio de 2004
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Autor: Marta SERRANO

Residente en Cataluña, Marta Mata pasa al menos tres días de la semana en Madrid para hacerse cargo de la presidencia del Consejo Escolar del Estado (CEE). Se resarce así de su dimisión de este organismo hace dos años por desavenencias con el anterior equipo ministerial. A día de hoy la defensa acérrima de la Logse sigue siendo su bandera.

—La ministra ha hablado de diálogo abierto, pero, al mismo tiempo, ha fijado el final de la reforma antes de empezar a debatir, ¿le parece que los plazos están siendo los adecuados?
—Hay momentos en los que la urgencia es necesaria, y yo los he vivido siempre en circunstancias especiales y ligados a decretos. Mi gran aprendizaje de lo que es participación en la elaboración de las leyes fue en un proceso que no tuvo nada de urgencia. Recuerdo los debates en el CEE durante tres años, entre 1987 y 1990, con un mismo proyecto de ley, conociendo las respuestas de la sociedad publicadas por el MEC al igual que los libros blancos. No hubo urgencia. Sin embargo, la LOCE sí fue tramitada a mi entender por un proceso de urgencia y esto ha sido fatal. Un decreto como el que estamos haciendo es natural que sea con urgencia. Que en primavera de 2004 se diga que habrá un proyecto en 2005 para una ley, que no será una gran ley sino una ley de modificación de una vieja ley, empieza a ser un plazo razonable. Hay momentos en los que la urgencia es necesaria.

—¿Cómo tendrían que ser los centros para que la Logse hubiera funcionado correctamente?
—El centro ideal para que la Logse funcione correctamente es un centro pequeño y cuanto más participativo mejor. Muy ligado al municipio, que conoce muy bien qué pasa en cada centro.

—¿Podría darme ejemplos concretos?
—En Cataluña, que es lo que yo conozco más. En la misma ciudad de Barcelona donde yo apliqué la Logse siendo concejala de Educación entre 1987 y 1995. Allí nosotros teníamos 14 escuelas de Primaria municipales y 7 centros de Secundaria inicialmente de FP. Allí, las reuniones entre padres de alumnos de Primaria y Secundaria de una misma línea fueron extraordinarias y divertidas. No quiero decir que estuviera exento de dificultades. Centros como el “Badalona 9”, que fue el noveno IES de una ciudad del cinturón industrial de Barcelona, vivieron conflictos de los propios profesores enfrentados a una Administración, en este caso la catalana, que no ayudó lo suficiente para poder aplicar la Logse con los recursos suficientes.

—¿Cree usted que si la Logse no funcionó es sólo a causa de la falta de recursos?
—No. La Logse funcionó en muchos casos y no funcionó por la Aministración uniformista que copiamos de la España tradicional y que ha pasado a muchas CCAA. Allí donde ha habido buena relación entre Administración educativa y municipio los problemas se han solventado y han funcionado las escuelas taller y todos los centros en los que se ha dado continuidad entre Primaria y Secundaria.

—Pero los datos de fracaso escolar en Cataluña precisamente, junto a los de Andalucía, se sitúan en más del 30% de media, doblándose en la pública. ¿Por qué seguir insistiendo en las bondades de una Logse que hasta el PSOE quería reformar?
—Creo que en la aplicación de la Logse hubo improvisación. Yo dije que el nuevo IES iba a ser la prueba de fuego porque consistía en tener en un mismo centro profesorado de tres situaciones: de la segunda etapa de EGB, de FP y del Bachillerato. Además venían niños que eran los mayores de la EGB y entraban a ser los pequeños. La bondad básica de la Logse era que los niños de 14 años no tenían que decidir entre Bachillerato o FP, seguían todos juntos. ¿Es una utopía? Pues es una utopía a la que me apunto. Y que ha funcionado salvo en los grandes centros que estaban muy clasificados. Ha faltado formación con mayúsculas para los docentes y eficacia en la aplicación.

—La enseñanza Privada tampoco quiere ni oír hablar de la Logse…
—Para ellos sí. Todos los centros de Privada Concertada que conozco están aplicando la Logse en todo lo que les ha beneficiado. Lo que no pueden es aplicarla hasta el Bachillerato, que es lo que pretenden.

—No puedo creerlo.
—La Logse ha supuesto un aumento de la concertación. Además la Privada, ya aplicando la Logse, ha hecho cuatro líneas dentro de un mismo colegio. Hay muchas maneras de aplicar la Logse. Basta con dejar a un centro y a un equipo de profesores que trabajen con autonomía real, porque ellos conocen el centro, su entorno y los recursos que tienen.

—La Permanente del CEE dio el visto bueno al decreto de paralización de la LOCE, ¿Cuál es su postura al respecto?
—Es un decreto con un preámbulo en el que se dice que en el futuro hay que preparar una ley de modificación de la LOCE. Pero paralización de la LOCE no es el término con el que nos ha llegado, sino modificación del calendario. En el Consejo Escolar del Estado nosotros tenemos que mirar lo que ya está mirado y remirado desde el Ministerio sobre la técnica y la jurídica del decreto y, además, se hace el dictamen desde un punto de vista plural, el de las organizaciones representadas en él.

—¿Qué destacaría del paso del decreto por el CEE?
—Se ha visto cómo hay organizaciones que no comparten la necesidad de un retraso en el calendario y otras que han admitido los argumentos del MEC para este retraso. Se están tomando las medidas para que las cosas se hagan bien desde el punto de vista jurídico y político y, al final, se verá.

—No obstante, las personas que votaron a favor del cambio como los representantes de FETE-UGT o Ceapa, quizá lo hicieron más por conviccion política que pedagógica, ¿no se está ideologizando demasiado la Educación y polarizando la opinión en torno a dos posturas, la del PP y la del PSOE?
—Desde un principio la Educación tiene que ver con las ideologías. Hemos pasado 40 años en que la Educación ha estado sometida única y exclusivamente a una ideología. Por mi edad puedo recordarlo muy bien, y puedo recordarlo como un gran mal. Y desde la democracia hay contraste de ideologías porque en el CEE pueden participar los sectores interesados y afectados por la Educación (padres, profesores, alumnos, empresas, sindicatos). Hay un margen para representar todos los idearios. No obstante, hemos vivido un último periodo de la democracia donde la polarización fue terrible, sobre todo por la mayoría absoluta del PP. Fue muy difícil vivirla. Si yo he aceptado el cargo como presidenta del CEE ha sido precisamente para para desmontar esta polarización.

—Usted protagonizó la etapa anterior por dimitir del CEE. ¿Cómo ha vivido su elección como presidenta?
—Pues muy bien. Yo presenté mi dimisión del CEE, no por el Consejo Escolar ni por la actuación del organismo, que hacía lo que podía hacer, sino por el poco papel que el MECD le dejaba hacer. No fue una protesta al CEE, sino al MECD. El hecho de volver al CEE pretende, sobre todo, restablecer el protagonismo del CEE con toda su capacidad de dar Consejo.

La Logse no ha fracasado

“La implantación de la ESO de la Logse se hizo en un periodo en el que gobernaba el PP, que había votado en contra de la Ley y, por tanto, que no quería implantarla. Se hizo además cuando las competencias estaban en manos ya de las CCAA. Por eso, yo pongo en duda la justificación de la LOCE en base al argumento del fracaso de la Logse en Secundaria, porque a mi entender la Logse no ha fracasado”.

Mata afirmó además que “conozco situaciones muy positivas de aplicación de la Logse y situaciones muy negativas también en una misma comunidad. Depende de si se trata de un IES con 100 años de historia o de un centro nuevo, de si el centro es grande o pequeño, etc. En concreto, la frase de la Logse reventó en el momento de aplicarla a la ESO no es una frase válida, y menos en boca de un Ministerio que ya estaba alejado de la aplicación real. Esta frase tenía que estar acompañada de un estudio territorializado y profundizado en cuanto a causas, porque se hubieran visto los remedios sin necesidad de apelar a un cambio total de perspectiva como ocurrió con la LOCE”.

Explica también que “en municipios pequeños como Anglés, Matadepera, etc; la Logse significó tener por primera vez una Secundaria de valor, que cumplía con unas aspiraciones. La Logse tenía que aplicarse con una microadministración y con la colaboración de la Comunidad Autónoma”.

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