La LOCE dejará paso a una Logse que se ha revelado como generadora de fracaso

Autor: J.M.LACASA

De seguir con esta progresión –que podría aumentar en los próximos años, al mantener una evaluación LOCE más exigente sin las medidas correctoras que proponía y que están paralizadas por el MEC– el fracaso escolar podría situarse en 29% antes de que el Ministerio tome una sola medida que lo palie.

El problema que se pueden encontrar las comunidades con un sistema de evaluación más duro –sólo se admiten dos suspensos, los cuales no pueden ser Matemáticas y Lengua conjuntamente– es que, al haberse “paralizado” las medidas previstas para corregir la desviación y aplicarse sobre un sistema Logse que no se ha distinguido precisamente por su exigencia, el fracaso escolar se dispare entre uno y cinco puntos más, según la región (añadidos al aumento progresivo ya reseñado).

Trasladando a números esta situación, estaríamos hablando de 135.000 alumnos condenados a abandonar el sistema educativo sin título anualmente (actualmente estamos entre 120.000-130.000 al año), es decir, 400.000 alumnos que se irán a engrosar el número de jóvenes sin titulación en los próximos tres años, con lo que de fractura social supone en la sociedad española.

Se da la circunstancia, como desde este periódico hemos venido denunciando reiteradamente, que la distribución del fracaso escolar no es homogénea, sino que se ceba en las clases menos pudientes escolarizadas en institutos –especialmente en los centros de extrarradio de las grandes ciudades y en las zonas rurales. Por comunidades, la pública catalana se sitúa cerca del 40%, seguida de la andaluza (35%) y madrileña (32%), es decir, el fracaso es muy alto en las tres comunidades que tienen más alumnos escolarizados en ESO.

Sin embargo, el Ministerio no tiene previsto aplicar ninguna medida hasta que se llegue a un consenso dentro de dos años. Tampoco ha expresado que disminuir el fracaso escolar sea una de sus prioridades, ni ha hecho mención de este problema hasta el momento.