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Niños a la carta

Aprovechar las ventajas del progreso y la investigación
científica con fines terapeúticos ha supuesto la curación de numerosas
patologías que hasta hace poco eran mortales. Sin embargo, en el caso de las
nuevas técnicas de reproducción asistida, donde los protagonistas son los no
natos, la ciencia y la medicina chocan con planteamientos éticos.
Miércoles, 14 de julio de 2004
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Autor: Marta SERRANO

Todos guapos, todos sanos, todos perfectos… ¿Es posible? El Instituto
Valenciano de Infertilidad (IVI) ha consultado a la Comisión de
Reproducción Asistida sobre la posible aplicación de las técnicas de
diagnóstico preimplantacional y estudio de los antígenos del sistema de
histocompatibilidad para permitir una selección de embriones con fines
terapéuticos para terceras personas. En la práctica, se trata de permitir la
selección de los embriones sanos con el fin de crear una especie de bebé a
la carta que posibilite los transplantes de órganos sanos a otros hermanos
o familiares. Pero, ¿hasta que punto se trata de un proceso ético?

Crear un ser humano determinado para un fin de terceros sólo con la
intención de mejorar la especie encuentra tantos adeptos como contrarios.

La Comisión de Reproducción Asistida apoya en principio la petición, pero
entiende que en este momento no es posible autorizar la solicitud del IVI,
ya que el artículo 12 de la Ley de Reproducción Asistida impone limitaciones
expresas a las finalidades y usos del diagnóstico preimplantacional. No
obstante, la Comisión ha acordado reunirse esta primera quincena del mes de
julio para elevar al Ministerio de Sanidad y Consumo una propuesta concreta
que permita dar viabilidad jurídica o una solución concreta a esta demanda.

Por su parte, el Ministerio de Sanidad y Consumo ha manifestado ya su
propósito de plantear una reforma de la Ley de Reproducción Asistida en el
plazo más breve posible, contando con el máximo consenso social y con la
opinión cualificada de los especialistas y de los comités éticos y
científicos competentes en esta materia. La Comisión Nacional ha instado al
Ministerio a presentar este proyecto de reforma a la mayor brevedad.

Asimismo, la Comisión ha informado también favorablemente sobre los
proyectos de experiencias controladas de fecundación de ovocitos previamente
congelados, y el proyecto de investigación sobre ³diploidifación de cigotos
humanos triploides como fuente legal de embriones para obtener células madre
embrionarias², remitido por el IVI, así como un nuevo proyecto de uso de
óvulos congelados para reproducción asistida en experiencia controlada.
Proyectos todos ellos caros, polémicos y que han suscitado recelos que
afectan tanto a intereses comerciales como a familias en apuros.

Ayudar a las familias

En concreto, cinco familias con hijos enfermos esperan una solución
favorable y argumentan que más allá de condicionantes morales, religiosos o
éticos, si la Ciencia ha permitido que sus hijos, portadores de
enfermedades consideradas raras, puedan vivir gracias a medicinas y
distintas operaciones, la sociedad debe dejarles curar a sus hijos enfermos
definitivamente cuando la Ciencia así lo permite en el siglo XXI. Así lo
explican unos padres desesperados y optimistas a la vez.

Eugenia y Salvador, padres de Virginia, enferma de anemia de Fanconi,
reclaman su derecho como padres a salvar a su hija porque, hasta ahora, el
marco legal español no les ha permitido someterse a un procedimiento de
selección genética de un embrión sano, sin una enfermedad hereditaria, que
tras su nacimiento pueda salvar la vida de su hermana enferma mediante un
transplante de médula de un donante que sería compatible.

Pero estos padres no son los únicos que quieren elegir esta opción. No se
trata de modificación genética o clonación, sino de un procedimiento que
permite seleccionar un embrión compatible con el hermano mayor para poder
llevar a cabo un trasplante de células madre procedentes del cordón
umbilical y asegurar además que el segundo hijo no va a tener la enfermedad
del primero.

Sí y no

Los padres se muestran a menudo desconcertados por la falta de normativa.
Es absurdo que técnicas que están autorizadas en algunos países, en otros
como España no lo estén². No obstante, la reforma que pretende el gobierno
les ha devuelto la esperanza. Pero no hay unanimidad de opiniones. Desde la
Plataforma Hayalternativas.com se aboga por el desarrollo científico al
servicio del ser humano y se denuncia la campaña promovida por un sector de
la industria biotecnológica.

Hayalternativas.com es una plataforma de investigadores, científicos,
profesionales de la sanidad, expertos en bioética, juristas, y ciudadanos
interesados en general en impulsar la investigación científica y desarrollar
terapias y tratamientos médicos que no impliquen la destrucción de embriones
humanos, así como informar a la opinión pública de los avances médicos
alcanzados mediante la investigación basada en la utilización de células
madre procedentes de tejidos adultos, del cordón umbilical y de la placenta.
Desde Hayalternativas.com señalan que los embriones son seres humanos vivos
en constante desarrollo, sujetos distintos de la madre y de sus
progenitores, poseedores desde su concepción de identidad genética propia y
permanente. Por lo tanto, y al igual que los nacidos, son dignos de un
sincero respeto, independientemente de su etapa de desarrollo, forma o
tamaño, merecedores de que no se les use como materia prima en procesos
industriales o de investigación.

En España son varios miles los embriones humanos crioconservados que yacen
abandonados en los frigoríficos de las clínicas de reproducción asistida,
olvidados de sus progenitores. (Está por decidir que se hará con los
embriones que tienen más de cinco años).

Según distintos expertos de la Plataforma citada, un sector de la industria
biotecnológica está promoviendo una campaña de opinión a favor de la
clonación denominada terapéutica y la derogación de las trabas para
investigar con células madre a partir de embriones humanos sobrantes.

Además, hay que tener en cuenta que a día de hoy pueden obtenerse las
células madre, núcleo de los posibles usos terapéuticos, a partir de tejidos
de adultos o del cordón umbilical, sin necesidad de destruir embriones. Las
células madre adultas pueden constituir una muy válida alternativa a las
células madre embrionarias con vista a la medicina regenerativa y
reparadora.

Por su parte, diversos expertos que han participado en el curso Dilema de
la Ciencia: Confrontación antropológica y bioética organizado la semana
pasada por la Universidad San Pablo-CEU, coincidieron en señalar la
necesidad de que la ciencia se replantee de tal modo que esté centrada en la
persona humana y su dignidad. El Presidente del Comité Nacional de Bioética
de Italia, Francesco DAgostino, afirmó que las cuestiones bioéticas hacen
necesario un replanteamiento científico y la vuelta a la persona.

Experimentos sí, pero sólo en las comunidades del PSOE

El Consejo de Ministros del pasado viernes 9 de julio autorizó la
suscripción de dos convenios, con Andalucía y con Cataluña, dotados con
nueve millones de euros cada uno, para la investigación con células madre
hasta 2007. Se da la circunstancia que, mientras ambas CCAA son gobernadas
por el PSOE, otras gobernadas por el PP y pioneras en este tipo de
investigaciones, como la Comunidad Valenciana, se han visto marginadas por
el Ministerio de Sanidad y Consumo del que es titular Elena Salgado.

No obstante, y a pesar de no haber novedades respecto a la consulta del
Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI), a la Comisión de Reproducción
Asistida dependiente del Ministerio de Sanidad y Consumo, a propósito de las
investigaciones con células madre embrionarias, Carlos Simón, responsable de
la investigación valenciana que ha conseguido por primera vez en España la
derivación de dos líneas celulares a partir de células madre embrionarias
cree que la investigación con células madre embrionarias es imparable y se
muestra optimista al respecto ya que afirma que los límites legales cambian
cada año en este campo y las investigaciones son importantes para todos.

Gracias a la utilización de los avances logrados en medicina regenerativa
derivados de las investigaciones con células madre se están produciendo
éxitos en el tratamiento de enfermedades como la diabetes, el alzheimer, el
parkinson, la esclerosis múltiple o las cardiopatías, además de la
regeneración de tejidos y la curación de determinados tipos de leucemia
mediante el trasplante de médula ósea.

Las células madre adultas se reproducen menos que las embrionarias, pero la
ventaja es que se pueden utilizar de forma autóloga (del propio paciente),
lo que evita el rechazo. Además, la investigación con células madre adultas
no plantea los problemas éticos que genera el estudio con embriones.
Actualmente se investiga con células madre de médula ósea, de sangre
periférica, de músculo esquelético o de cordón umbilical y se manipulan en
el laboratorio para diferenciarlas de otras células especializadas.

En este sentido, el Gobierno francés acaba de aprobar un Proyecto de Ley de
Bioética, que prohibe la clonación humana (tanto con fines reproductivos
como con fines terapeúticos), calificando estas prácticas como crímenes
contra la especie humana y tipificándolas como delitos con penas de cárcel
de hasta 30 años y multas.

No obstante, en el país galo sí se ha autorizado la investigación con
embriones sobrantes que no sean útiles para parejas que recurren a la
fecundación ³in vitro².

El proyecto de Ley también permite el nacimiento de un bebé medicamento,
al permitir la selección de un embrión inmune a una enfermedad genética
incurable. Este punto cuenta con el rechazo del Partido Socialista en
Francia, contrario a la trasposición de la Directiva europea sobre la
protección jurídica de la invenciones biotecnológicas al considerar que
podría conducir a una comercialización del ser humano.

El ministro de Sanidad francés, Philippe Douste Blazy, ha afirmado por su
parte que ³Francia debe adecuarse al Derecho comunitario y que se dan con
este proyecto de Ley todas las garantías necesarias².

Desde el punto de vista biológico el embrión es individuo

Entrevista con Manuel de Santiago, director de la Asociación Española de
Bioética.

¿Qué argumentos justificarían una postura en contra del uso de células
embrionarias?
por tanto, utilizar células embrionarias implica utilizar vidas humanas. Es
un tema muy manipulado por los medios de comunicación. No se debate con
calma.

humana…
es que es un individuo desde el punto de vista biológico, y quien diga lo
contrario, miente. Por eso, aunque se trate de utilizar células embrionarias
con un fin noble, como la curación de un familiar, nos parece rechazable
desde el punto de vista ético. En el mundo médico se han dado muchos abusos
y este sería uno más.

la posible solución de muchas enfermedades?
permitan atisbar una utilidad a corto plazo, y me estoy refiriendo a unos
10 años. Todos los países como Estados Unidos, donde empresas importantes
llevan años invirtiendo grandes sumas de dinero en investigaciones con
células embrionarias, están empezando a abandonar estos estudios que hasta
ahora han sido costosos y estériles. De hecho, la célula madre embrionaria
es peligrosa, tiene una gran capacidad de transformarse en tumores y
promueve el rechazo.

¿Qué decirles a las familias que ven la única esperanza de curación para un
familiar en las terapias con células embrionarias?
significa que hay que hacer un esfuerzo importante para encontrar
soluciones. Pero de ahí a que una familia decida tener un hijo sólo y
exclusivamente para que facilite células para un hermano no nos parece el
camino adecuado porque se destruyen los niños enfermos para implantar a la
madre sólo los niños sanos. No nos parece ético destruir embriones.

de la grasa de las propia persona que las necesite, o la célula MAPS, que
está en la médula y se puede utilizar en todos los tejidos. No decimos que
se cierre la puerta a la investigación con células embrionarias, pero
tampoco que sólo fluya el dinero y la inversión en esa dirección por
distintos intereses empresariales, etc. Hay que buscar el fundamento
racional y hay otras líneas de investigación más baratas y menos elitistas.

¿Se abre así la puerta a la clonación?
demostrado de un modo fehaciente y dudo que se pueda hacer en 20 ó 30 años.
Además, que una abrumadora mayoría de países están en contra. Todos salvo
Gran Bretaña y otros pocos.
 

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