Todo el centro, un gran escaparate para aprender
La forma de trabajo de esta actividad ha sido siempre la misma: primero se trata de establecer un método de trabajo y luego una temporalización de todo el proceso. Se eligen una serie de aspectos sobre los que vamos a trabajar. En el caso de la Constitución, se escogen unos artículos concretos y representativos y, respecto a la Copa Davis, nos fijamos en detalles como el trofeo, los países participantes, etc. Por otra parte, como la campaña se dirigen a las etapas de Infantil y Primaria se consideran los diferentes grados de aprendizaje.
La campaña debe tener una duración determinada en función de lo objetivos que se desean alcanzar. Esta competencia es exclusiva del profesor que dirige el taller, aunque en permanente diálogo con los alumnos. En el caso de la Constitución, fueron tres semanas, y en el de la Copa Davis, un mes entero. Lo importante es que todo debe culminar en la semana en la que tiene lugar el acontecimiento.
En la campaña usamos todo el centro como escaparate para los carteles y acciones, para que así llegue un mensaje claro y unificador. En los dos casos se prefirió ir por partes, lanzando ideas un poco desconcertantes que crearan debate en todo el centro, luego dando más pistas y, finalmente, creando un gran mural que recogiera todo en un mensaje claro y directo sobre los temas.
Este taller es uno de los medios más eficaces para implicar tanto a los creadores del taller como al resto del centro, es decir, tanto a los profesores como a los alumnos para así conseguir los objetivos marcados.
Horacio MANGAS
