Un 44% de los menores se siente acosado en internet
Autor: M. S.
Sólo uno de cada tres de los menores que utilizan habitualmente internet tiene como objetivo principal la búsqueda de información según un estudio realizado por las ONGs Acción Contra la Pornografía Infantil y la Asociación Protégeles para el Defensor del Menor.
De ellos, la mayor parte, un 66%, lo concibe como una herramienta de ocio: un 36% se conecta fundamentalmente para chatear, otro 17% para jugar y, finalmente, otro 13% para buscar música (27,5%). Como motivaciones secundarias la búsqueda de información (24%) o jugar a través de la red, que aparece con un porcentaje del 22,5%, quedan relegadas de puesto.
Se conectan en casa
El estudio destaca además que la gran mayoría de los adolescentes entre 10 y 17 años que utiliza internet de forma habitual se conecta normalmente desde sus hogares: (84 %) y sólo un 2,5% de los encuestados reconoce conectarse desde su colegio. Entre los hábitos que hacen los menores de Internet, el 16% afirma que ha facilitado su dirección a través de internet. Un 9% señala incluso haberlo hecho en varias ocasiones. Además, el 14,5% de los chicos encuestados ha concertado una cita con un desconocido a través de internet y otro 8% lo ha hecho en más de una ocasión.
El 86% de losencuestados accede a los contenidos que circulan por internet desde ordenadores que no disponen de sistemas de filtrado, por lo que hasta un 44% de los menores que navega con regularidad se ha sentido acosado sexualmente en la Red en alguna ocasión.
Llegan a sentir miedo
En este sentido un 11% de los jóvenes entre 10 y 17 años que habitualmente navegan por distintas webs ha sido víctima de insultos, un 4% ha recibido correos no solicitados con contenidos desagradables y otro 2% afirma incluso haber sentido miedo en alguna ocasión.
No obstante y a pesar de estos datos, un 37% de los menores que se conecta habitualmente a internet reconoce “sentir la necesidad de conectarse con frecuencia”, aunque no se califican de “adictos” en ningún momento. Centrándonos en la conducta delictiva más generalizada y cuya ilegalidad suele ser también desconocida por la mayoría de los menores debemos referirnos a las descargas de música, vídeos o textos protegidos por los derechos de autor.
