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La poesía y la narrativa, "por amor a Rodari"

Esta recopilación de ejercicios pretende trabajar de forma profunda tanto la poesía como la narrativa, así como también el vocabulario y la ortografía, pilares básicos del lenguaje.
Miércoles, 22 de noviembre de 2006
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En la década de los 80 se percibía y trasmitía una ilusión creciente por nuestro trabajo. Éramos profesores de Lengua y Literatura y acabábamos de estrenar la democracia. Todo nos parecía poco para nuestros alumnos, teníamos esperanzas y nos preparábamos aquí y allá, con diversos cursos para ser mejores profesionales, siempre fuera de nuestro horario laboral y sobre todo a partir de varios movimientos de renovación pedagógica que iban surgiendo, escuelas de verano, visitas a otros países para recabar y compartir experiencias, publicaciones, etc.
Acabábamos de conocer a Gianni Rodari, el pedagogo de lo lúdico y lo sorpresivo. Con sus enseñanzas, sobre todo a través del libro mágico La gramática de la fantasía, empezamos a soñar en enseñar Lengua y contagiar la Literatura de una manera asombrosa, alegre y divertida. Llevaba por subtítulo Introducción al arte de inventar historias. Rodari, discípulo en parte de Novalis y del surrealismo, fue recopilando como maestro, no las historias que contaba, sino cómo nacían, los trucos para poner en movimiento palabras e imágenes.
Después de muchos esfuerzos y algunos cursillos, sobre todo el de Anunciación Albella, hoy editora de estupendos cuadernos de redacción, se me ha ocurrido recuperar para el profesorado que imparte 3º y 4º de Primaria o ESPA en adultos algunas de esas experiencias de Rodari, así como alguna de Miguel Muñoz en un libro ya descatalogado que editó la Comunidad de Madrid titulado La poesía y el cuento en el Ciclo Medio de EGB.

Poesía

Las actividades enmarcadas dentro del apartado de poesía trabajan, entre otros objetivos:
–Analizar los elementos sensoriales y organizativos de un poema y crear otro como respuesta.
–Aumentar y enriquecer el léxico personal de los alumnos.
–Desarrollar al capacidad creadora.
Para lograr dichos objetivos, algunas de las actividades consistirán en completar un poema con tantas estrofas como alumnos hay en clase (deberán tener la misma estructura formal) o componer una poesía a partir de la lluvia de palabras en torno a un tema. Se propone un tema y se van escribiendo todas las palabras en la pizarra, se construyen oraciones con ellas, se eligen las que estén mejor construidas y sean más bonitas y, finalmente, con ellas se compone una poesía.

Narrativa

Muy variadas son las actividades creadas para trabajar la narrativa con los alumnos. Un ejemplo es El error creativo, que consiste en inventar una historia a partir de un error, para lo cual se recogen titulares de periódicos, se divide la clase en dos grupos y a su vez por parejas. Cada pareja del otro grupo desarrolla la noticia según el nuevo titular surgido por un error. Por ejemplo: “Hoy sale una nueva emisión de bonos” por “Hoy sale una nueva emisión de monos”. Reirse de los errores es una manera de desprenderse de ellos.
Otro ejemplo es la actividad Narración colectiva, en la que se dan tres frases (cada una corresponde a una parte de la narración) y, por grupos, los chicos han de hacer una breve historia incluyendo esas frases, que luego leerán en alto.


La ortografía y el vocabulario no pueden faltar en clase

Los ejercicios que trabajan el vocabulario y la ortografía son muy completos y extensos. Por ejemplo, hay uno en el que se aborda la polisemia y que consiste en buscar el sustantivo que falta:
—Un ………… de mar.
—Unas …………. de burro, etc.
Otra actividad, denominada El prefijo arbitrario, tiene como objetivo deformar las palabras para hacerlas más productivas (en sentido fantástico). Para ello se van anotando en dos columnas paralelas prefijos y sustantivos respectivamente, se les asigna un número y, por sorteo, se van uniendo. Aparecerán palabras de lo más locas, como “desreloj” o “prerrelámpago” o “rebote”. “Noventa y nueve matrimonios celebrados por este rito fracasan antes de acabar el pastel de bodas. El número cien resulta ser una unión feliz y fecunda” (G. Rodari).
Otro ejemplo de trabajo con vocabulario es una actividad en la que a partir de una palabra dada, por ejemplo “pie”, deben designar objetos o significados diferentes, asociándole otras palabras complementarias:
–A pie de página.
–A pie de la letra.
–A pie juntillas, etc.

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