Los sindicatos piden un impulso a la negociación del Estatuto docente

Tras casi diez meses desde la publicación por parte del MEC del borrador del Estatuto docente los avances en el documento siguen sin producirse. Aunque ha habido recientes reuniones entre Ministerio y sindicatos, este hecho no se ha visto reflejado en el progreso y desarrollo de un texto que todavía dista mucho de mejorar las condiciones laborales del profesorado.
Para los sindicatos, su sentimiento de llegar a un acuerdo queda frustrado por la escasa voluntad y la falta de compromiso que muestra el Ministerio. Señalan como carencias del texto el acceso a la función pública, la promoción profesional por méritos, las retribuciones, la jornada de trabajo y las jubilaciones anticipadas permanentes.

Carrera profesional

El único aspecto novedoso que CSI-CSIF encuentra en el borrador es la “carrera profesional”, planteada como un sistema de grados que sustituirían a los actuales sexenios, aunque el sindicato es contrario a la regulación poco concreta de este punto. Desde UGT señalan que el texto recoge esos grados de un modo tan ambiguo que el resultado podría significar tanto un avance en positivo como una política de personal regresiva, por lo que este sindicato sí que está a favor de los sexenios.
STES, que se ha mantenido un tanto alejado de los demás sindicatos, considera que “esta medida pone a los profesores bajo sospecha, ya que se duda de que realicen bien su trabajo y se les evalúa para ver quién tiene derecho a que le paguen lo que hasta ahora cobran cumpliendo unos requisitos fáciles de superar”.
CSI-CSIF califica, además, de incumplida la promesa del MEC de pagar 60 euros a los docentes que demostraran una mayor dedicación a las tareas del centro. STES lo considera otra forma de evaluación del cuerpo docente y, por tanto, “otro ataque a la profesionalidad de los maestros”.

Promoción vertical

Para ANPE y CSI-CSIF es fundamental un Estatuto que contemple la promoción vertical por méritos, que permita la movilidad desde cualquier cuerpo docente hasta la Universidad. UGT no acepta tampoco el sistema de promoción que recoge el texto si no se cambia el sistema de evaluación por el de acreditación del trabajo realizado.
El Ministerio, por su parte, asegura que “se está intentando llegar a un acuerdo con las CCAA y con los sindicatos, y que tratarán de alcanzar el consenso más amplio”. Precisamente ANPE cree que la causa de que el MEC retrase la negociación del Estatuto es que el borrador inicial contaba con el consenso de las CCAA, por lo que cualquier cambio que se produzca puede producir un rechazo por parte de los gobiernos regionales.

STES reclama “la unión de los cinco sindicatos con el fin de presionar al MEC para que cambie las bases del Estatuto”. Asimismo, rechaza “un documento que pretende introducir la gestión de empresas privadas en las escuelas públicas”. Agusto Serrano opina que “el cambio del actual cobro de sexenios por el de grados conduce a una evaluación del profesorado, y se le pone bajo sospecha”. De esta forma, STES va a proponer al cuerpo docente que se movilice para detener el ataque que está recibiendo por parte del MEC.

Para CSI-CSIF, el Estatuto debería ser “el instrumento principal para la mejora de las condiciones laborales de los profesores, sin embargo, no cumple unos mínimos sobre reivindicaciones históricas ni da respuestas a las exigencias del profesorado”. Este sindicato, por tanto, no va a suscribir un borrador “que no aporta nada nuevo a la profesión”.
La opción más rentable y digna, según Eliseo Moreno, “es retirar el borrador actual y esperar ya a la próxima legislatura y a que el MEC la inicie con más ganas de negociación”.

ANPE cree que el Ministerio se muestre tan reticente para negociar porque “quizá teme que cualquier cambio que se pueda realizar en el Estatuto produzca el rechazo de las CCAA, ya que el borrador inicial contaba con el consenso de las autonomías”.
ANPE demanda una norma que incentive la función pública docente y que sea vertebradora del carácter estatal de este cuerpo y no quiere un Estatuto que esté vinculado a la LOE ni una recopilación de las reglas que ya existen.

“El MEC está totalmente cerrado a cualquier negociación del Estatuto y no plantea nada adecuado a una norma tan importante”, afirma Luis Castillejo. Según CCOO, “el documento debe recoger competencias estatales y la promoción de los maestros de un cuerpo a otro en un sistema moderno y no jerarquizante”.
Desde el sindicato ya se ha iniciado una recogida de firmas entre el profesorado a través de internet y por escrito para forzar al Ministerio a un cambio de actitud.

UGT ha dejado claro al MEC y al profesorado que el Estatuto es de interés para el sistema educativo y en él han de reflejarse la jubilación indefinida, que los grados mantengan los sexenios, que en lugar de la evaluación al profesor se le acredite el trabajo realizado y la promoción a través del concurso de méritos.
UGT considera importante tener Estatuto docente, “pero no a cualquier precio”. Además, cree que “es muy importante que cuente con el consenso de las CCAA”