Crean un decreto para regular la Educación Infantil

Autor: Sonia BARRADO

Es gratuito y voluntario. El currículo regulado en la nueva norma está orientado a lograr un desarrollo integral del niño y a procurar los aprendizajes que lo hacen posible. Como objetivos, incorpora el conocimiento de las manifestaciones culturales y artísticas propias de La Rioja y del conjunto de España y la primera toma de contacto con las Tecnologías de la Información y la Comunicación.
Los contenidos educativos se presentan en tres áreas: Conocimiento de sí mismo y autonomía personal; Conocimiento del entorno; y Lenguajes: Comunicación y Representación. En cuanto al método de trabajo propuesto, se basa en las experiencias, las actividades y el juego, ya que la Consejería riojana de Educación estima que un ambiente de afecto y confianza es “imprescindible a estas edades para el desarrollo del proceso de enseñanza y para potenciar la autoestima y la integración social del niño”.
Además, se considera fundamental la colaboración de las familias en la Educación Infantil y, por ello, el centro ayudará a los padres en su tarea de educadores. Esta colaboración “contribuirá a plantear una relación continuada entre el centro y la familia para establecer criterios comunes y pautas homogéneas de actuación”, afirma la Consejería. También, por ser importante en el segundo ciclo de Educación Infantil el inicio de la lectura y de la escritura, ambas se introducirán de forma progresiva “teniendo en cuenta que la estimulación, en unas condiciones determinadas, favorece el desarrollo de capacidades”.
Asimismo, se ha dado relevancia a la importancia que tiene en los niños la adquisición de los valores que se generan en la relación con los otros y con el medio en el proceso educativo. Respecto al profesorado, en el Decreto se establece que los maestros de este ciclo educativo realizarán tareas de manera coordinada y, para asegurar mecanismos de continuidad en el proceso educativo de los alumnos, se coordinarán también con los docentes del primer ciclo de Infantil y con los de Educación Primaria, “de forma que la adaptación del alumnado en la transición de un ciclo a otro y de una etapa educativa a otra se realice asegurando los procesos educativos iniciados”.
Por otra parte, contempla como principio la diversidad del alumnado, adaptando la práctica educativa a las características personales, necesidades, intereses y estilo cognitivo de los niños. Así los centros “adoptarán las medidas oportunas dirigidas al alumnado que presente necesidad específica de apoyo educativo”. Otras de las cuestiones que se refuerzan en la nueva norma regional son “la consideración, el trato y el respeto hacía el profesorado”, acordes “con la importancia social de su tarea”. El currículo establecido en el Decreto se implantará en el curso 2008-09.

Jornadas de evaluación

Durante dos sesiones de evaluación, los días 26 y 27 de abril, los alumnos tuvieron que realizar una serie de actividades en las que pusieron en práctica una serie de competencias de ámbito lingüístico y matemático. Con esta medida, implantada por primera vez durante el pasado curso, se pretende detectar las carencias educativas desde una edad temprana para poder corregirlas desde la base.
Junto al grado de conocimiento de los alumnos de 4º en las materias de Lenguaje y Matemáticas, la prueba permite, así, conocer también el rendimiento del sistema educativo riojano. En la primera evaluación, los resultados fueron más que satisfactorios, pues la mayoría del alumnado riojano de entre nueve y diez años alcanzó una puntuación media superior a los ocho puntos en conocimientos de Matemáticas y Lengua.
Pese a estas puntuaciones, también se detectaron cuatro aspectos en los que debían mejorar: la expresión escrita, la lectura, el cálculo y la resolución de problemas matemáticos.
De los 2.628 matriculados el pasado año en 4º de Primaria, se evaluó en total a 2.582 alumnos (el 98%, 1.686 de centros públicos y 912 de concertados). En este curso la evaluación se extiende a 2.759 alumnos, pertenecientes a los 79 colegios de La Rioja con este nivel educativo, distribuidos en 157 grupos diferentes.

La aplicación de la prueba ha corrido a cargo de maestros en activo destinados en centros distintos del que se ha realizado la evaluación. Los cuadernillos de respuestas, codificados de manera que se mantenga el anonimato del alumnado, serán corregidos por personal docente que no haya participado en la aplicación. En todo el proceso intervienen cerca de 500 profesionales (directores, tutores, aplicadores, correctores, inspectores y otros funcionarios de la Administración Educativa).
Al comienzo del curso 2007-08 se darán a conocer los resultados de esta evaluación. Los datos globales serán publicados por la Consejería y cada centro conocerá los suyos propios, ya que no se trata de hacer un ranking, sino que cada centro conozca el rendimiento de sus alumnos. Desde ese momento, y a tenor de los resultados, se elaborarán planes de mejora que se pondrán en marcha a lo largo del curso.
Ante las carencias detectadas en 2005-06, la Consejería consideró necesario desarrollar un plan de mejora, al menos en los apartados que más dificultades presentaron para los alumnos.
Además, se planteó la necesidad de planificar y desarrollar actuaciones que apoyen a la comunidad educativa en proyectos de lectura mediante las bibliotecas escolares, en actividades de formación del profesorado en relación con las competencias básicas y en proyectos de innovación en las cuatro áreas de mejora y en procesos de autoevaluación de los centros educativos.