Algunas EOI se movilizan contra la "devaluación" de su nivel de enseñanza

Un curso más para obtener un nivel menos. Ésta es la principal crítica que Escuelas Oficiales de Idiomas y el sindicato CSI-CSIF hacen al Real Decreto 1629/2006, de 29 de diciembre (BOE de 4 de enero de 2007) por el que se fijan los aspectos básicos del currículo de las enseñanzas de idiomas y que entrará en vigor el próximo curso.

El objetivo de esta norma es fijar las exigencias mínimas del nivel básico de cada idioma a efectos de certificación, así como  las enseñanzas mínimas de los niveles intermedio y avanzado.

Pero el Real Decreto también añade otras reformas, entre las que se encuentran la no obligatoriedad de las EOI de impartir los niveles básicos que sí lo será para el resto de niveles y la ampliación de un curso académico a los cinco que hasta ahora se impartían para la mayoría de idiomas. Además, los niveles se repartirán desde el A1 al B2 en esos seis cursos excepto para algunas lenguas concretas, como ocurre con el chino, para las que el aumento será a ocho cursos lectivos.

Las EOI se consideran “afectadas muy negativamente” por este Decreto al considerar que desde su creación hace casi un siglo  habían podido certificar el nivel más alto de competencia lingüística al completarse sus estudios, y que ahora sólo podrán certificar como máximo un nivel B2,  nivel que la portavoz de los profesores de la EOI “Jesús Maestro” de Madrid, Carmen Morales, traduce como  “intermedio-alto”.

La portavoz añadió que esta reforma tiene dos repercusiones directas: en primer lugar, para los alumnos que ya poseen certificados de una EOI, supone la degradación de su título con efecto retroactivo, ya que hasta ahora su nivel era considerado “el mayor en lenguas extranjeras”; y para los alumnos futuros, implica que tengan que recurrir a instituciones privadas para obtener los niveles superiores C1 y C2.

La portavoz de alumnos del Consejo Escolar de la EOI “Jesús Maestro” de Madrid, Marta Torres, fue más allá y confesó a MAGISTERIO su temor por “una huida masiva” de los  alumnos de EOI a academias privadas y que “en unos años se reduzcan a 0 los 23 idiomas” que imparten actualmente en el centro. Otro de los temores que expresó la portavoz es a “la desaparición de los nieveles  iniciales A1 y A2” de las Escuelas Oficiales. Problema que desde el CSI-CSIF ya ven solucionado tras las conversaciones mantenidas en los últimos días con la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid.

Este sindicato, calificó en un comunicado de “situación alarmante” la reforma de las EOI y  exigió a la Comunidad de Madrid una serie de revindicaciones el pasado 31 de enero, entre las que se encuentran rebaremar y establecer los niveles C1 y C2 e implantarlos en las EOI, no aceptar la baremación de los niveles superiores que ya han sido obtenidos en escuelas no oficiales, ampliar las plantillas de las EOI y apoyar la unificación y homologación de todos los niveles, del A1 al C2.

Anselmo Gómez, responsable del informe elaborado por CSI-CSIF sobre EOI añadió que la máxima preocupación reside en “la calidad de la enseñanza” y para ello es necesaria una baremación de los niveles de todos los centros. En este punto también coincidieron las Escuelas Oficiales que exigen que “sea una institución nacional  la que evalúe los niveles globales”.

A la espera de que se escuchen sus revindicaciones, la EOI “Jesús Maestro” de Madrid comenzó una recogida de firmas que enviará al Ministerio de Educación y Ciencia, al Defensor del Pueblo y a la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid, con el objetivo de que se revise una reforma que sólo entienden, en palabras de Marta Torres, como “un reajuste presupuestario”. Para las Escuelas Oficiales de Idiomas los primeros afectados de esta reforma  serán los candidatos a oposiciones oficiales de Estado, que se preparaban los niveles C1 y C2 de un segundo idioma para obtener una puntuación máxima en las oposiciones y ahora, si quieren hacerlo, tendrán que dirigirse a una academia privada, donde el coste se triplica.