“Somos un sindicato negociador, que consigue cosas paso a paso”

Cuando faltan a penas dos semanas para la cita con las urnas, MAGISTERIO se reúne con Francisco Melcón, el nuevo presidente de ANPE Madrid. Desde su sede de la calle O´Donnell repasamos su trayectoria en estos cuatro años, haciendo especial hincapié en la Ley de Autoridad Docente, “un gran hito para nosotros”.

¿Cómo valora el trabajo desarrollado por ANPE durante este tiempo?
El trabajo de ANPE, si hay que hacer una valoración de los últimos cuatro años, ha sido positivo. Esto es así porque hemos conseguido una cuestión genérica muy importante: haber situado en el centro del debate social y de la atención mediática a la Educación. Y lo hemos logrado porque en el año 2006 ANPE propició la aparición de un servicio, el Defensor del Profesor, con el que nosotros hemos podido denunciar la situación de los centros, las condiciones en las que el profesor imparte la docencia, y, sobre todo, los casos más graves de indisciplina y de actos antisociales en el seno de los colegios e institutos madrileños.
Además, ANPE Madrid se tiene que felicitar por su actuación en estos cuatro años, porque ha conseguido que se le reconozca al profesor la categoría de autoridad pública en el ejercicio de su función, que es una reivindicación pionera en el panorama educativo  español, y que fue nuestro sindicato, en el año 2006, el primero que la planteó oficialmente.

No son el único sindicato que lo reclama.
Sí, lo sabemos, pero el reconocimiento de la autoridad del profesor es un hito para nosotros y creemos que es una de las revindicaciones históricas que hemos puesto sobre la mesa. Otras organizaciones sociales, con un descaro moral impresionante, quieren apropiarse de esta idea de una forma fraudulenta, por eso queremos resaltar que esta iniciativa surgió en ANPE y estamos muy satisfechos de ella. También quiero decir que el balance es positivo ya que hemos firmado dos acuerdos en solitario, que mejoran de alguna manera el catálogo de permisos y licencias, así como otras cuestiones que reconocía el acuerdo sectorial.

¿Qué ha cambiado en el sistema educativo madrileño en estos cuatro años?
La Educación madrileña en todo este tiempo ha tenido luces y sombras, tanto en lo que respecta al profesorado, como lo que afecta a la Educación en general. En relación a los docentes ha habido aspectos positivos, como la aprobación del Decreto de Convivencia en el año 2007 o el reconocimiento de la figura del profesor como autoridad pública y los acuerdos firmados. Eso sí, la situación de crisis económica ha hecho que haya habido recortes importantes en derechos sociales del colectivo docente y disminuciones salariales para los funcionarios públicos, entre ellos los profesores, lo que nos deja en una situación bastante sombría.

Otros sindicatos han presentado una situación más negativa, haciendo hincapié en los recortes.
Vamos a ver, la situación de crisis económica que atraviesa el país es preocupante. A nivel general, los presupuestos destinados para Educación no sólo han disminuido en Madrid sino en el resto del Estado; cuando hay recortes el servicio educativo tiene que resentirse necesariamente. No obstante, hemos de decir que si bien nos llegan las quejas de los directores y profesores de los centros al haberse reducido los recursos para las aulas de compensatoria y de enlace; disminuido el número de orientadores; aumentado las horas lectivas para los docentes en algunos centros o incrementado el número de interinos que este curso no van a cubrir ninguna vacante –recortes que vemos muy negativos y, por supuesto, rechazamos–, también es cierto que vivimos una coyuntura económica singular y delicada en todo el país, y en esto tenemos una cierta comprensión.

¿Ven posible que, una vez solventada la crisis, se recupere la situación anterior?
Nosotros vamos a trabajar por ello. Si mira nuestro programa, verá que el primer punto es un no a los recortes en Educación; el segundo es no a los recortes salariales, pedimos que la Administración cumpla con los acuerdos que firma, y el cuarto punto revindica que los profesores recuperen el poder adquisitivo. Evidentemente, en cuanto la situación mejore, ANPE va a seguir insistiendo y luchando, como siempre, con la mayor fuerza posible, porque la situación de los docentes mejore. En cuanto a la voluntad existente por parte de la Administración… imagino que la Consejería tratará de paliar estos recortes, que han sido totalmente desproporcionados y que no tienen parangón en otros sectores funcionariales.

¿La Ley de Autoridad Docente habrá supuesto un espaldarazo a su gestión?
Estamos muy satisfechos de que se haya reconocido la autoridad pública del profesor y que se haya hecho por ley, además, de alguna manera, supone un apoyo a las iniciativas y medidas puestas en marcha por ANPE en estos últimos años. Pero, sobre todo, es un refuerzo a la figura y función del profesor, un elemento que creemos que, a medio y largo plazo, va a contribuir a mejorar de la Educación en la Comunidad de Madrid. Nosotros queremos que este reconocimiento se haga extensivo al resto del Estado porque desde ANPE consideramos que es una cuestión básica y prioritaria para poder dar clase, desarrollando con dignidad nuestra labor.

Hemos hablado de lo que se ha conseguido, ¿y para los próximos cuatro años qué?
ANPE Madrid ha trabajado en un programa muy elaborado donde se recogen más de 200 medidas y revindicaciones. A nivel general, ANPE propone un cambio del modelo educativo actual ya que se ha mostrado ineficiente, como lo demuestran distintos informes de ámbito internacional. Tiene que haber un cambio hacia un modelo de calidad basado en el esfuerzo, el mérito y el trabajo que nos parecen unos valores que están un poco devaluados.

¿Por qué es ANPE un sindicato necesario?
ANPE es realmente el sindicato de los profesores de la enseñanza madrileña, formado por docentes de la escuela pública y que se debe a ellos. Tenemos unas líneas de actuación muy claras y definidas: somos una organización profesional, independiente  cuyo único objetivo es prestigiar y dignificar la profesión docente. Es necesario porque es cercano, reivindicativo, que negocia y consigue cosas paso a paso. Somos un sindicato que mira hacia el futuro.