Una aventura quijotesca al mundo de la digitalización
El pasado día 26 de octubre en la Biblioteca Nacional de España (BNE) se presentó El Quijote interactivo, como un producto único y pionero, en palabras de la directora de la BNE.
Se trata de llevar a manos de todos una de las mayores joyas de la literatura española, aprovechando las herramientas que la informática pone a disposición de la sociedad.Un proyecto, que ha transformado la organización de la BNE para adaptarse al desarrollo tecnológico y a las demandas de los usuarios virtuales.
Así, con la colaboración de un amplio equipo humano interdisciplinar, se ha tratado de eliminar barreras geográficas acercando la primera edición de la obra cumbre de Cervantes a cualquier ordenador, intentando que la experiencia de leer en pantalla se parezca lo más posible a la de poseer tal reliquia.
Para ello, además de incorporar una reproducción de los impresos originales de máxima calidad, El Quijote interactivo dispone de otros recursos, como por ejemplo el sonido del pasar de las páginas o la posibilidad de compartir los fragmentos a través de Facebook.
La digitalización del libro como objeto no ha sido la única prioridad, también se ha querido hacer accesible la transcripción del texto. El profesor José Manuel Lucía, al mando de este reto, ha hecho posible que dispongamos de una adaptación de la obra al castellano moderno, palabra por palabra, a tan sólo un clik.
Prestar una mayor atención al contexto era otro logro que quería conquistarse. El Quijote interactivo cuenta con un amplio abanico de imágenes digitalizadas de otras ediciones; numerosos mapas e ilustraciones de la época que nos sitúan en la aventura quijotesca –todos ellos sacados de los fondos de la BNE–, y facilita un recorrido por otros libros de caballería y todas las ediciones completas de la obra, disponibles a través de la Biblioteca Digital Hispánica.
Este proyecto, que se inscribe en el campo de las humanidades digitales, nos ofrece un portal interactivo con recursos multimedia sobre gastronomía, danza, juegos, indumentaria, música y danza para que el lector entienda la obra a raíz de conocer la vida en la época.
De esta manera, en http://quijote.bne.es, tal y como dijo en el acto la Ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, observamos como “la novela de Cervantes está más viva que nunca y resiste a todos los desafíos tecnológicos”.