La Educación artística y musical favorece a los niños con dificultades

En la actualidad se desarrolla con todos los estudiantes de 1º, 2º y 3º de Primaria y nuestro objetivo es que esta iniciativa llegue a todos los niveles de la Educación obligatoria

Educación Musical
El proyecto es una respuesta a la visión educativa del centro. Creemos que la gran finalidad de la Educación obligatoria es que cada alumno desarrolle sus capacidades, construya su persona y aprenda a vivir en sociedad.

Nuestro objetivo no es formar estudiantes que sean excelentes músicos, sino que pretendemos contribuir a su de-
sarrollo de la siguiente forma:

• A los alumnos que sobresalen en las las artes queremos ofrecerles la posibilidad de favorecer su inteligencia musical, espacial y la agilidad corporal.
• El cerebro de los niños a los 5 o 6 años tiene una gran plasticidad y las experiencias y el aprendizaje precoz activan las conexiones neurológicas.
• Formando a todos nuestros chicos en la sensibilidad para captar, producir y entender la música, cada uno a su ritmo y a su nivel, sabiendo que las habilidades que se requieren tocando un instrumento favorecerán procesos cognitivos. A través del violín fomentaremos la psicomotricidad, la coordinación visomotora, el sentido del ritmo y la orientación, aumentando las aptitudes de razonamiento espacio-temporal.
• Este instrumento armoniza la producción individual y de conjunto. Tocar convierte a quien lo hace en una persona metódica que cuida los detalles, planifica bien las tareas, ejercita la atención, aporta seguridad y confianza, ayuda a resolver miedos y enseña a asumir riesgos. Además, aporta autoconfianza, lo que impulsa de manera determinante la autoestima. Si se forma parte de una orquesta o grupo, la práctica mejora el trabajo en equipo y la disciplina. Todas estas habilidades y capacidades se aprenden de manera natural y repercuten positivamente en el crecimiento de la capacidad de aprender de todos los estudiantes.
• La música es un medio de expresión. A través de la artes en general y de ésta en particular, se transmiten emociones, sentimientos, percepciones que difícilmente se pueden comunicar verbalmente.

Música y dislexia
Muchos alumnos disléxicos tienen facilidad para las producciones artísticas pues son más creativos y dominan en las tareas que requieren percepción y discriminación, tanto visual como auditiva, aunque ésta se vea afectada en los procesos de codificación fonológica.

Se dice que las habilidades artísticas son consecuencia de una mejor definición del hemisferio derecho. El hemisferio izquierdo se ocupa de los procesos del lenguaje, mientras que el derecho se especializa en la información visual y espacial. El izquierdo procesa la información secuencialmente, mientras que el derecho lo hace simultáneamente, o sea, muchos datos a la vez. Al leer, se combinan los dos tipos de estrategias en el manejo de la información. Con este aprendizaje entrarán en juego habilidades que son su fortaleza y otras que son su debilidad. Nuestro deseo es que estos alumnos progresen en su lectoescritura.

El violín y la hiperactividad
El alumno hiperactivo no es inicialmente el idóneo para el aprendizaje de este instrumento. Su impulsividad y sus problemas de atención no le van a ayudar, pero son capaces de centrarse durante un tiempo en sus ‘maquinitas’. Tocar el violín será un reto educativo, por tanto. Así que necesitamos un profesional paciente que los entienda y les transmita que son capaces. La evolución de un hiperactivo es increíble cuando siente que el aprendizaje va a su favor.

Cómo entendemos la Educación
Las personas no somos listas o torpes. Las nuevas teorías sobre cómo concebir la inteligencia nos hablan de inteligencias múltiples y nos llevan a pensar que el alumno puede estar más capacitado para un tipo de inteligencia que para otro.

El doctor Howard Gardner diferencia ocho tipos de inteligencia: persona hábil con las palabras –inteligencia lingüística–, ducha con los números –lógico-matemática–, bueno para las imágenes –espacial–, ágil con el cuerpo –corporal-cinética–, habilidoso para la música –musical–, diestro para relacionarse –interpersonal–, capacitado para conocerse a sí mismo y pensar –intrapersonal– y los amantes de la naturaleza –naturalista–.

Alguno de los tipos de inteligencia no ha sido contemplado seriamente en el quehacer diario de las aulas y, frecuentemente, las áreas curriculares que han pretendido ponerlas en práctia se han convertido en ‘marías’.

La Educación artística es mucho más que realizar producciones más o menos afortunadas. En “Areteia”, conscientes de su valor, queremos que este proyecto de Educación Musical sea un vehículo para el progreso de cada alumno.

Carmen Castelló
Colegio “Areteia” de Alcobendas (Madrid)