“Tras el 22-M, los padres no van a pagar por llevar a sus hijos al colegio”

El Gobierno de Murcia despide la legislatura siendo la única comunidad autónoma que ha apostado por la unión entre Educación y Empleo, además de haber logrado un acuerdo educativo que no fue posible a nivel nacional. La parte negativa, los recortes que han afectado a los funcionarios han terminado con la paz social que ha imperado estos últimos años.

A punto de cerrarse esta legislatura, ¿cuál es su balance?
Es verdad que hemos tenido que enfrentarnos a muchos problemas, sobre todo en un área tan compleja como es la Educación, y además, con unas dificultades presupuestarias evidentes a consecuencia de la crisis, pero a pesar de eso el balance es positivo porque hemos avanzado en líneas estratégicas, las que definen el Pacto Social por la Educación 2009-12, que estoy convencido que van a mejorar la calidad de nuestro sistema educativo. Fíjese, en época de crisis, hemos mejorado las infraestructuras construyendo 25 centros nuevos y ampliado más de 70. También hemos consolidado un buen sistema de FP y hemos avanzado en materia de bilingüismo, con lo que hoy el 50% de los IES de la Región tiene secciones bilingües y desde hace dos años funciona la red de colegios bilingües. Además, en materia de atención a la diversidad seguimos siendo pioneros.

Le tocó a usted materializar la apuesta personal de Valcárcel de unir Educación y Empleo. ¿Cómo lo asumió?
Como se asumen los retos, con ilusión y responsabilidad. Creo que esa fue una apuesta valiente del presidente que, además, trataba de dar respuesta a uno de los retos que estaba planteando la actual situación económica. Y es que si la crisis nos deja una lección aprendida es que sin formación no hay desarrollo, por eso creo que la unión de estas competencias bajo un mismo departamento nos ha permitido avanzar, y mucho, por ejemplo, en un sistema integrado de FP, que es una herramienta estratégica para salir fortalecidos de la crisis.

¿Cree que se ha entendido lo suficiente esa unión?
Estoy convencido, porque esa unión nunca ha restado sino que siempre ha sumado: ha sumado en eficacia, coordinación y en tener una visión de conjunto que era necesaria para desarrollar ciertos temas como el de FP. Gracias a ella hemos podido en poco tiempo desarrollar toda una red de centros integrados y hemos sido pioneros en poner en marcha el reconocimiento de las competencias adquiridas por la experiencia laboral. El tiempo nos está dando la razón y lo que espero es que se reconozca el modelo en Murcia, como se está reconociendo en otras autonomías.

¿Mantendrá este modelo el presidente Valcárcel si gana las elecciones?
Eso no me corresponde decirlo a mí. Será el presidente el que tome la decisión en su momento. Lo que está claro es que sea cual sea el modelo que elija Valcárcel, estos dos años y medio han servido para establecer las bases de un sólido sistema educativo que apuesta por la formación a lo largo de toda la vida.

Decía que no ha sido el mejor contexto debido a la crisis. De hecho, Murcia fue de las primeras autonomías en acometer recortes a pesar del coste político que podrían tener, ¿cree que otras harán lo mismo tras el 22-M?
Iniciamos recortes porque se hacían absolutamente necesarios si queríamos que se aprobara el plan de reequilibrio, como al final se ha aprobado. Ahora vemos cómo otras autonomías con mayor déficit que la nuestra empiezan a tomar medidas, como es el caso de Cataluña, así que no me cabe la menor duda de que así será en otras muchas.

¿Es posible que después del 22 de mayo todos estemos hablando del ya polémico copago educativo?
En absoluto. Creo que Valcárcel ya ha explicado suficientemente después de su discurso que en ningún caso había aludido a fórmulas de copago en Sanidad ni en Educación. Lo que hizo el presidente fue un llamamiento a la responsabilidad colectiva para salir de la crisis. Porque, ¿cómo se puede formular el copago educativo? La Educación es un derecho constitucional plenamente reconocido y gratuito, así que hablemos claro, después del 22-M los padres no van a pagar por llevar a sus hijos al colegio. Lo que probablemente habrá que hacer es seguir tomando medidas, y cuando digo “tomar medidas” interpretémoslo bien, no me refiero a los funcionarios, no vayamos otra vez a levantar los ánimos.

Sin duda se refiere a las protestas por la Ley de recortes de los últimos meses que han llevado a algunos sindicatos a bajarse del Pacto Social por la Educación.
Siempre he respetado el derecho que se tiene a discrepar sobre las decisiones que toma el gobierno regional, lo que ya no comparto es que esas discrepancias políticas y la escenificación de las mismas pasen por abandonar un Pacto, sobre todo porque ellos fueron parte activa de la elaboración de sus líneas estratégicas para seguir avanzando en materia educativa. Espero que con el tiempo haya un cambio de posturas.

Es llamativo que los sindicatos corporativos sí hayan negociado con ustedes pero los sociopolíticos no, ¿cree que se está politizando?
No voy a juzgar cuáles fueron las intenciones de los tres sindicatos que no firmaron el acuerdo porque creo que el documento final que se consensuó en esas largas jornadas de negociación de la Ley de Medidas Extraordinarias era perfectamente asumible por todas las partes. Lo que sí quiero poner de manifiesto es el sentido de la responsabilidad de las otras seis organizaciones sindicales que sí lo hicieron, porque fueron a reivindicar pero también a hacer cesiones, como corresponde en cualquier tipo de negociación.

¿Y qué le parece que también se hayan utilizado las oposiciones para atacar a su departamento?
Mire, en el momento en el que tuvimos conocimiento de que la Ley de Presupuestos Generales del Estado fijaba la tasa de reposición en el 30% me reuní con todos los sindicatos, sacamos cuentas y vimos que nos correspondía convocar unas 50 plazas. Ante esa situación convinimos todos, absolutamente todos, que así no podíamos convocar. Así que no entiendo cómo ahora lo utilizan como arma arrojadiza cuando en privado dijeron una cosa y en público dicen otra.