Compromiso y tesón para una Jornada Mundial de la Juventud insuperable
La cuenta atrás ha comenzado. Quedan solo dos meses y muchos colegios madrileños ya están dando los últimos retoques para que todo salga perfecto el día que el papa Benedicto XVI llegue a Madrid. ¿El motivo? La Jornada Mundial de la Juventud, un encuentro organizado por la Iglesia católica para unir a los jóvenes de todo el mundo, que este año se celebrará en la capital española.
Los colegios “San José” y “San Agustín” –ambos en la ciudad de Madrid– y “Retamar” –de Pozuelo de Alarcón– son tres de los centros educativos que colaborarán voluntariamente en este encuentro que comenzará el 16 de agosto y durará seis días. La contribución consistirá en prestar diferentes zonas de las escuelas como áreas de acogida para los peregrinos procedentes de otras comunidades autónomas o del extranjero que vengan a participar en este encuentro que inició en su día el papa Juan Pablo II.
“Los jóvenes podrán dormir, desayunar y asearse en nuestras instalaciones. El Cheque del Peregrino, por el que ellos han pagado, les permitirá comer y cenar en distintos puntos de Madrid habilitados por la JMJ. Del mismo modo, los centros educativos también les garantizarán asistencia médica y toda la información necesaria para moverse por la ciudad”, explica Teresa Espinosa, salesiana responsable de pastoral en el Colegio “San José”.
Por lo general, los centros han escogido los gimnasios, el patio y las aulas para cobijar a los asistentes. En el caso del “San Agustín”, se albergarán cerca de 1.000 personas en el campo de fútbol y 700 en el polideportivo.
Grupos de organización
Desde que surgió la iniciativa, los colegios de acogida formaron grupos de voluntarios para dirigir todo el trabajo que se requiere por parte de la organización de la JMJ. Los equipos están formados por alumnos, profesores, religiosos y padres de estudiantes, como en el Colegio “Retamar”, que tiene un grupo compuesto por una decena de escolares, tres adultos, y está coordinado por el padre Eugenio Gracia.
Uno de los aspectos que se administra desde estos equipos de trabajo es el de la financiación de los gastos que conllevará la labor de acogida. Una parte de éstos –los desayunos– quedará cubierta gracias a la suscripción pagada por el peregrino. Por otro lado, los costes de luz y agua correrán a cargo de los propios centros, por lo que muchos han apostado por realizar actividades para recaudar fondos. “Durante el festejo de fin de curso del colegio colectamos dinero para la JMJ a través de diversos talleres”, apunta Javier Barrientos, voluntario del “Retamar”. Por su parte, la hermana Mª Pilar Berzal, directora del “San José”, explica que en las fiestas de la patrona del centro, María Auxiliadora, realizaron una rifa para obtener financiación, así como un musical protagonizado por varios alumnos, de tal modo que los asistentes podían aportar una pequeña colaboración económica si así lo deseaban.
Nacionalidades e idiomas
Más de 300 jóvenes procedentes de Italia, Hong Kong, India y Uruguay se instalarán en el Colegio “San José”. Grupos de República Checa, Brasil o Argentina lo harán en el “San Agustín”, sin embargo, el padre Isaac, responsable de pastoral de este centro, apunta que el idioma no será problema para las escuelas de acogida. “Apostaremos principalmente por el inglés y el castellano, pero también contaremos con voluntarios que dominan perfectamente el francés y el alemán”, explica.
A menos de dos meses para la celebración, los colegios madrileños de acogida consideran que la etapa más laboriosa ya ha pasado y se centran en dar los últimos retoques para que el encuentro con el papa salga perfecto. Este último trimestre se centrarán en la formación de los voluntarios y en preparar con ilusión el acto de bienvenida para los jóvenes peregrinos cristianos.
La JMJ, celebración presente en el día a día de los colegios de acogida
Con motivo de las fiestas del Colegio “San Agustín” se organizó un stand para vender distintos productos relacionados con la Jornada Mundial de la Juventud, tales como pulseras, gorras o camisetas para obtener así financiación para cubrir los gastos de agua y luz. Una vez superada esta etapa de obtención de recursos económicos, el centro está implicado en la actualidad, tal y como explica el padre Isaac, en organizar una salida “para ir a recibir al papa cuando llegue al aeropuerto de Barajas”.
”Pensando en el encuentro con los peregrinos, buscaremos algún momento de cada día que estén en el colegio para reunirnos todos juntos y rezar una oración”, explica la responsable de pastoral del “San José”, Teresa Espinosa. “También queremos organizar un acto de bienvenida para los jóvenes en el que intentaremos hacer una pequeña representación de su país como símbolo de acogida”, añade la directora, Mª Pilar Berzal.
El evento de la Jornada Mundial de la Juventud se ha trasladado a las aulas en el día a día, teniendo cabida y formando parte del currículo académico en muchos centros madrileños. “En el Colegio ‘San Agustín’ hemos tratado este tema sobre todo en la asignatura de Religión. Allí se ha presentado a los alumnos qué es esto de la JMJ y han hecho trabajos sobre su historia y finalidad”, comenta el padre Isaac . En el caso del “Retamar”, el voluntario José Joaquín Montero explica que “el tema de la JMJ siempre ha estado presente en las aulas, hasta lo hemos utilizado para hacer problemas de Física y Matemáticas. Además, en nuestras sesiones de plática con el sacerdote de nuestro centro hemos tratado también este aspecto”, concluye.