Arranca el curso escolar en medio de las protestas de Secundaria
El pasado 12 de septiembre comenzaron las clases los alumnos de Infantil y Primaria y Educación Especial de la Comunidad de Madrid –hoy, día 14, harán lo propio los de Secundaria–. Un curso que arranca con un cifra récord de alumnos matriculados, 1.127.342, de los cuales 610.125 están en la escuela pública –2,9% más que en 2010-11–, donde se ha experimentado un nuevo descenso de estudiantes en ESO (120.500); 327.821 en la Concertada, y 189.396 en la Privada. Y que está marcado por las movilizaciones de Secundaria, en protesta por las instrucciones de principio de curso donde se establece, entre otras cosas, un aumento de la jornada lectiva de 18 a 20 horas. Según los sindicatos de la escuela pública –CCOO, ANPE, CSI-F, UGT y STEM– este incremento horario repercute negativamente en la calidad de la enseñanza al disminuir el tiempo que el profesorado podrá emplear en la preparación de las clases, desdobles, guardias etc., reduciendo, además, el número de profesores interinos contratados –los sindicatos estiman en 3.000 el dato, mientras que Educación lo niega–. “Esta ausencia de docentes está haciendo que los directores tengan que cuadrar el horario a martillazos”, aseguraba Paco García, secretario regional de FREM-CCOO.
Por su parte, la Consejería de Educación y Empleo defendía esta medida, argumentando que no afectará a la calidad de la enseñanza y, además, les permitirá ahorrar cerca de 80 millones de euros que se podrán destinar a financiar otras partidas como Centros Bilingües o las ayudas para el comedor escolar. “Sólo hemos pedido que cumplan un horario. No cambiarán ni sueldos, ni períodos de vacaciones, ni ningún otro aspecto “, afirmaba la consejera del ramo, Lucía Figar, en una entrevista en Onda Cero. “Lo único que hemos dicho es que, ya que el Ministerio fija entre 18 y 21 las horas lectivas, hagan 20, lo cual nos permite reducir el gasto de una manera, a mi juicio razonada”, finalizaba.
Pese a las explicaciones dadas por el departamento de Educación, y a la convocatoria de la Mesa Sectorial para negociar una serie de complementos retributivos por el aumento lectivo –a la que los representantes de los trabajadores no acudieron–, los sindicatos no han dado marcha atrás en sus reivindicaciones, convocando una serie de acciones de protesta que vivieron uno de sus puntos álgidos el pasado 7 de septiembre.
Concentración en Alcalá
El primer miércoles de septiembre fue la fecha elegida por los trabajadores de la enseñanza pública, interinos y representantes sindicales para iniciar un rosario de actuaciones en señal de protesta hasta lograr “la retirada de las instrucciones de inicio de curso”, recordaba Paco Melcón, presidente de ANPE. De esta manera, cerca de 10.000 personas, según los sindicatos –6.000 para la agencia EFE– se dieron cita ante la Consejería de Educación solicitando el fin de la normativa bajo el lema La Educación no es gasto, es inversión. La protesta, que vino precedida de un encierro en la sede de la Dirección de Área Territorial Madrid Capital, fue considerada como un “éxito” por parte de los organizadores, mientras que desde el Gobierno regional se le restaba importancia. “Yo no he visto profesores”, aseguraba la presidenta de la Comunidad de Madrid en rueda de prensa. “Eran liberados sindicales e interinos”, afirmaba.
Por el momento, la jornada de huelga prevista para hoy se ha cambiado a una manifestación que arrancará de Neptuno a las 18’30 horas.