La Escuela de emprendedores reta a los jóvenes a ser constantes
Los estudiantes de la Comunidad de Madrid tuvieron la oportunidad de acudir a la undécima edición de Escuela de emprendedores, iniciativa organizada por la Fundación Junior Achievement para fomentar e introducir el carácter emprendedor en los jóvenes de hoy.
Escuela de emprendedores se traduce en una jornada para compartir experiencias con personas que se han ido convirtiendo, con esfuerzo, en grandes emprendedores. De esta manera, más de 350 alumnos, de entre 15 y 25 años, de centros educativos y universitarios de la Comunidad madrileña pudieron acudir a este acto y dialogar con importantes personajes como el presidente de la empresa de formación en inglés Vaughan System, Richard Vaughan, o el creador de las bases del escritorio virtual multiplataforma eyeOS, Pau García-Milà.
Durante las jornadas de las diferentes ediciones de Escuela de emprendedores, que este año contó con la colaboración de la Obra Social La Caixa y con el patrocinio de Ernst & Young, se intenta inculcar un espíritu emprendedor en los jóvenes como vehículo para conseguir sus metas, tanto de carácter profesional como personal. En esta última edición, Pau García-Milà instó a los estudiantes a que perseverasen, ya que “ser empresario se aprende en una escuela de negocios, pero ser emprendedor es una actitud, una manera de reaccionar en todos los aspectos de la vida”. En el mismo sentido se expresó Lucía Zavala, directora de la Fundación Junior Achievement en España, quien recalcó la importancia de impregnarse de ese espíritu desde joven: “Esperamos que esta iniciativa contribuya a promover en ellos actitudes emprendedoras positivas que les serán de utilidad tanto en el mundo de la empresa como en su propia vida”, puntualizó.
A pesar de la situación actual, Escuela de emprendedores reconoce que es un buen momento para fomentar el espíritu emprendedor. Según la socia directora de Casares & Vaughan, Helena López-Casares, “la crisis abre una oportunidad a los emprendedores. Una sociedad que no se preocupa por los jóvenes es una sociedad que no se preocupa por el futuro”. Desde las experiencias personales que compartieron en el acto, intentaron explicar que es necesario no temer a los errores y aprender de ellos a la hora de emprender cualquier iniciativa en la vida y que no se puede dejar todo a la suerte, sino que hay que trabajar duro, ya que “el éxito no viene de la noche a la mañana”, como explicó Richard Vaughan.