Convertir la fiesta del colegio en una intensa jornada educativa

Pero, ese día es mucho más que una fiesta porque el centro hace de esta celebración toda una experiencia educativa.

El primer principio que se cumple es el de la participación de toda la comunidad educativa. La implicación de padres, profesores y alumnos es total, y así se fomentan los objetivos de colaboración y mejora de la convivencia desde el inicio del curso escolar. Las actividades que se organizan y preparan van dirigidas y están protagonizadas por todos los estudiantes del centro, sin ningún tipo de discriminación. Se elabora cuidadosamente una programación de esta celebración con sus objetivos y actividades, y se invita a participar a todos.

La primera actividad que se celebra es una misa en la iglesia del barrio. Al ser el nuestro un colegio público aconfesional, se trata de una actividad voluntaria dirigida a padres, profesores y alumnos de Religión católica, que son una mayoría en nuestro centro.

La propuesta central del día es la puesta en escena de todo tipo de actuaciones. Se prepara desde el principio de curso y en ella participa el 100% del alumnado y profesorado del colegio. Los padres colaboran en todo lo que se les pide. El equipo directivo organiza la infraestructura necesaria, ya que nuestro centro carece de salón de actos. Se pide al ayuntamiento que nos monte un escenario con un equipo de megafonía en el lugar más adecuado posible. Durante los últimos siete cursos se montó una carpa en el patio del colegio. En el curso actual, ante la falta de presupuesto, se nos cedió el pabellón deportivo del barrio y allí se instalaron el escenario y las sillas para los niños.

Una vez acondicionado el local, el profesorado del centro prepara una enorme y alegre pancarta de tela con el nombre del colegio y motivos festivos, que se cuelga detrás del escenario y sirve como telón de fondo. Además, se ambienta el recinto con globos, sombreros, cometas y otros elementos decorativos. Cuando empiezan las actuaciones es el momento en que se pone a prueba el trabajo realizado durante meses. No hay representaciones individuales, son todas por cursos y participan la totalidad de los alumnos. Todas las clases ac-túan dos veces, una vez en castellano y otra en inglés. A pesar de ser nuestro primer curso como centro bilingüe de inglés, el fomento del uso de una lengua extranjera ha sido siempre una prioridad para nuestro colegio y, desde hace años, se aprovecha el día de la fiesta para representar en inglés pequeñas obras de teatro, rimas y canciones. De este modo, las piezas teatrales, los bailes y las canciones en ambas lenguas llenan el escenario durante casi dos horas
Para finalizar, se canta el himno del colegio, en el que cada curso, desde Infantil hasta 6º de Primaria, tiene su propia estrofa.

Tras la actuación, se vuelve al centro escolar y se visita la biblioteca del mismo, que se ha transformado en una auténtica sala de exposiciones de todo tipo de trabajos elaborados por los alumnos como circuitos eléctricos, que mueven molinos y parques de atracciones, encienden faros o iluminan casas. También se puede observar una exhaustiva reproducción de obras de un gran pintor, que este curso ha sido Picasso. Otra de las actividades expuestas fueron libros de cuentos elaborados por las profes de los más pequeños con trabajos realizados por ellos mismos. Incluso pudieron obsevarse ecosistemas reproducidos en papel, tales como la selva o el desierto. Un sinfín de manualidades de un valor educativo incalculable. Al mismo tiempo, se proyectan en la pantalla digital de la biblioteca imágenes de actuaciones de cursos anteriores o de salidas educativas o actividades realizadas por los alumnos.

Como fin de fiesta, el AMPA y el personal de la cocina del colegio preparan en el comedor una rica comida de pinchos para todos.

Mª Begoña Trancón
CEIP “San Andrés- La Borreca” en Ponferrada (León)