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Simular una empresa obliga a la toma de una serie de decisiones muy difíciles

El pasado marzo el equipo formado por tres alumnos de la Escola “Elisabeth” de Salou (Tarragona), Laura Gámez, Juli Molas y Pablo Acosta – apoyados por su profesora Marta Moya– vieron recompensado su esfuerzo tras ganar el primer premio del concurso de simulación empresarial Young Business Talents entre más de 2000 alumnos de toda España.
Martes, 11 de septiembre de 2012
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Los estudiantes se iniciaron como futuros emprendedores el 7 de noviembre de 2011 con la gestión de una empresa de productos lácteos –leche y yogures– en la que debían tomar simultáneamente varias decisiones en los ámbitos de la producción, los recursos humanos, el marketing y las finanzas, entre otros, manteniendo siempre un equilibrio entre los precios y los márgenes de beneficio.

Con esta herramienta de simulación de tercera generación, como la que emplean las universidades y escuelas de negocios más prestigiosas del mundo, los alumnos aplicaron los conceptos económicos estudiados en clase de una forma natural, motivadora e intuitiva, llegando ellos mismos a deducir los conceptos más complejos del funcionamiento del mercado, la competencia y las interacciones entre empresas.

El concurso se enmarcaba en Economía de Empresa y “la verdad es que hemos aprendido y nos hemos divertido aplicando con el simulador lo que hemos aprendido en clase», asegura Laura Gámez. “Esta experiencia ha sido una gran oportunidad de aprendizaje para entender el mundo empresarial», afirma Pablo Acosta. Los tres alumnos coinciden en la dificultad de la toma de decisiones ante la fuerte competencia y la multitud de opciones a tener en cuenta. “Se deben tomar decisiones muy complicadas y si no son acertadas, la empresa se puede venir abajo fácilmente”, dice Juli Molas. Eso sí, no descartan ser emprendedores en el futuro: “Es una posibilidad”, afirman todos.

La competición, organizada por la empresa Praxis MMT, que se dedica al desarrollo de simuladores y metodologías avanzadas de entrenamiento, contó con el patrocinio de Nivea y celebró su gran final en el Colegio “San Agustín” de Madrid, donde acogieron a los 75 equipos finalistas procedentes de toda España. Sin embargo, a la cita de la final accedieron sólo los que se habían clasificado entre los cinco mejores equipos de todo el territorio nacional.

Marta Moya Arévalo
Escola “Elisabeth” de Salou (Tarragona)

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