Los inspectores reclaman encargarse de las evaluaciones al final de etapa

“La nueva ley debe potenciar la atribución de la Inspección como evaluador externo, imprescindible para la mejora de la calidad educativa”. Esta es la principal reclamación que realiza el sindicato profesional de inspectores USIE –antes Usite– con respecto al anteproyecto de la Lomce. USIE, que celebró el pasado mes de octubre en Toledo el XIII Encuentro Nacional de Inspectores de Educación, llegó a la conclusión de que “la Inspección debe dirigir y posicionarse en la primera línea del proceso de realización de las evaluaciones externas, tengan o no efectos académicos y que contribuyan a la mejora de los resultados académicos”.
También la Asociación de Inspectores de Educación, Adide, celebró el pasado mes su XII Congreso Estatal en Alcalá de Henares (Madrid) y, de la misma forma que USIE, planteó que “la Inspección puede desempeñar un papel importante colaborando con las Administraciones educativas en el diseño y la realización de las evaluaciones externas, así como asesorando a las direcciones de los centros y a los equipos docentes en la interpretación contextualizada de los resultados y en la elaboración de planes y proyectos educativos de mejora”.
Sin embargo, Adide no considera conveniente condicionar la obtención de los títulos correspondientes al final de la ESO o el Bachillerato a la superación de esa prueba general externa, ya que podría suponer un freno en la continuidad de los estudios de una parte de los estudiantes, sin mayor incidencia en la mejora general del nivel de las competencias”. Para Adide, “el sistema actual, con una evaluación continua y global durante la Educación Primaria y continua y diferenciada por materias a lo largo de la Secundaria y el Bachillerato, parece más adecuado que lo que se propone en el anteproyecto”.
USIE, por su parte, cree necesario “establecer una señalización clara de los objetivos que han de cumplirse al final de cada etapa, ya que establecer  métricas homogéneas permite priorizar de forma objetiva las acciones a tomar”. Los profesionales de este sindicato consideran, además, que “la mejora de los resultados educativos no debe limitarse a la evaluación de los alumnos, sino que debe tener en cuenta la evaluación de centros, profesores y servicios educativos”.
En el congreso, USIE ha reivindicado su rol como auditor-técnico de los centros y programas que contribuya a mejorar el sistema, en colaboración con los demás agentes sociales. El sindicato propone que la Lomce incluya competencias profesionales nuevas para la Inspección educativa que contribuyan a garantizar los derechos ciudadanos y un acceso diferenciado de los inspectores accidentales o interinos que suponen un elevado número en toda España.
Adide, de hecho, lamenta que el anteproyecto no mencione en ningún momento a la Inspección, cuando cree que es “una ocasión idónea para abordar un aspecto que se cerró precipitadamente en su momento, y que es la introducción de una doble vía de acceso al Cuerpo de Inspectores”.  
Adide recuerda que “cuando se publicó la LOE, el número de inspectores accidentales era elevado, y en algunas Administraciones superaban el 50 o el 60% de los efectivos”. La asociación afirma que “hoy seguimos en una situación parecida” y el acceso de muchos de  los actuales inspectores accidentales se ha producido desde las direcciones o los equipos directivos de los centros, en bastantes casos sin completar mandatos”. Para Adide “es una injusticia palmaria, y a la vez un error, que no se incluyera en su momento a los inspectores accidentales al lado de los directores”.

 

 

PROPUESTAS DE LA INSPECCIÓN PARA LA LOMCE

­­­- Estabilidad del sistema
Función de asesoramiento a los organismos político-administrativos que tienen que tomar las decisiones sobre la reforma del sistema.
­­­- Evaluación del sistema
Participación en las evaluaciones externas, dado que es el órgano de supervisión del sistema educativo. Inspección-Supervisión-Evaluación-Calidad deberían ir unidos y tener un papel preponderante de la Inspección educativa, ya que en algunas comunidades
no hay ninguna participación.
­­­- Resultados evaluaciones
Se debería contemplar el gran potencial que tiene la Inspección a la hora de favorecer la transparencia y publicidad de los datos, siendo el
órgano de comunicación con los centros educativos e iniciador del debate de mejora dentro del centro.
­­­- Formación docente
Colaboración en la formación inicial universitaria de los futuros docentes. Participación en la formación continua del profesorado, de la que últimamente se encuentra relegada.
­­­- Carrera docente
Es muy importante el establecimiento de una carrera profesional del profesorado, donde el punto más alto sería formar parte de la Inspección educativa. Los inspectores tendrían funciones de evaluación de la práctica docente para poder ir promocionando en los diferentes estadios de la carrera profesional.
­­­- Figura del director
Sería conveniente la profesionalización de la dirección, estableciendo medidas de permanencia en el cargo, siempre y cuando superen las evaluaciones realizadas por la Administración educativa, donde el papel del inspector de Educación sería relevante.
­­­- Autonomía de centros
Es trascendental para que se pueda ejercer la autonomía organizativa y pedagógica en la dirección de la mejora de la calidad, el que haya una supervisión de los procesos y resultados del centro educativo. Función que únicamente puede realizar el inspector de Educación por su formación y reconocimiento dentro del sistema educativo.