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“Durante las etapas de crecimiento los adolescentes son influenciables”

Evitar prejuzgarles, practicar la escucha activa o evitar comparaciones son algunos de los consejos que se ofrecen en el listado que, esta profesora de la Udima, ha llevado a cabo para una correcta y positiva comunicación con los chavales.

María HernándezMartes, 12 de febrero de 2013
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La Universidad a Distancia de Madrid (Udima) presentó un listado de consejos, dirigido a padres y educadores, con el objetivo de que puedan entablar y desarrollar una comunicación positiva con los niños y adolescentes. Alba García Barrera es profesora de Psicología en esta universidad y responsable de la elaboración de este listado de consejos. Según ella es adecuado y útil para cualquier persona que trabaje o esté en contacto directo con niños o adolescentes. La lista de consejos la puedes encontrar en www.udima.es.

¿Cómo surge la idea de elaborar un listado de consejos para facilitar la comunicación con niños y adolescentes?
Surge porque en un momento dado empiezo a considerar que es una necesidad que tienen los padres y educadores para saber cómo comunicarse con los chavales en unas etapas evolutivas tan complicadas como pueden ser la niñez y la adolescencia. Durante las etapas de crecimiento, los jóvenes están en pleno desarrollo físico, psicológico y afectivo, por lo que son altamente vulnerables a la influencia que puede llegar a ejercerse sobre ellos por medio de la comunicación. El listado está basado en una serie de investigaciones que tienen varias décadas, realizadas en aulas directamente. A raíz de una conferencia sobre éstas, me di cuenta de que los padres, sobre todo, tenían muchas dudas en cuanto a la comunicación con sus hijos.Creí que les serían útiles una serie de pautas, a ellos y a los educadores, para una correcta comunicación.

¿En qué se fundamentan estos consejos?
Se pueden resumir en que hay que aprender a escuchar a los niños y comprenderles. Intentar escuchar lo que piensan, lo que han hecho, lo que han vivido, qué experiencias han tenido durante el día. Intentar, sobre todo, corresponderles en la conversación, y si no surge ésta, intentar provocarla a través de la comunicación, precisamente. Es muy importante devolverles siempre una respuesta que les muestre que hemos estado escuchando. Así, hay que hacer eco de lo que está diciendo y utilizar las mismas palabras que ellos han usado en la conversación.

¿Es muy importante mostrarles empatía?
Por supuesto. Hay que buscar la comprensión basándonos en la empatía. Por ello debemos intentar ponernos en su piel e intentar averiguar qué es lo que están sintiendo realmente. Tenemos que ponernos un poco a su nivel y buscar lo que está pasando por su cabeza. Conseguir que quieran compartir sus vivencias y, por último, darles todo nuestro apoyo.

¿Estamos buscando la autonomía de los niños si les ayudamos a desarrollar su imaginación o les incentivamos la curiosidad por las cosas?
Claro. En la búsqueda de la autonomía del niño que hacemos diariamente hay que intetar motivarle, porque hay aspectos que no le van a llamar la atención y no va a querer hacerlo; cosas como que haga la cama o que recoja la mesa, por ejemplo. Tenemos que buscar siempre la imaginación y a través de ella les motivamos también. Convertir todo este tipo de acciones en un juego.

¿Cuáles son los errores comunes que pueden cometer los padres al frustrarse en la comunicación con sus hijos?
El primero puede ser darle una respuesta sin pensarla o meditarla. Esto nos conduce a una serie de errores que pueden basarse en transmitirle una serie de expectativas negativas sobre él. También es muy común que idealicemos el comportamiento de otro hijo o un niño que se comporta mejor que él, y esto puede afectar a su autoconcepto y autoestima.

¿Se hace más difícil tener una buena comunicación con los chicos ahora que tienen tantas herramientas relacionadas con las nuevas tecnologías para hacerlo?
Puede ser que la comunicación que tenemos con ellos se vea afectada. Aunque las nuevas tecnologías aplicadas a la Educación tienen sus aspectos positivos, éstas producen un efecto de enganche en los niños, y esto puede dificultar la comunicación en muchos ámbitos, no sólo en casa. Se hace difícil, por ejemplo, jugar con ellos directamente porque ya juegan de forma autónoma con herramientas que les son nuevas. Pero cuando todavía son pequeños y jóvenes, hay que encontrar los momentos adecuados para que usen las nuevas tecnologías a su alcance. Quiero decir con ello que hay que ponerles límites, por supuesto. Por ejemplo, que únicamente las usen una hora al día o los fines de semana. A diario, cuanto menos, mejor. Que no se convierta en algo asociado al único ocio que puedan disfrutar. Y está claro que cuando las usan hay que saber cómo lo están haciendo.

Consejos
-Cuidado con lo que dices
Las palabras tienen mucho poder en las personas, hay que usarlas de forma adecuada.
-Evita prejuzgarles
Hay que darles la oportunidad de hablar o de actuar. Si no, condicionaremos su comportamiento.
-No limites su capacidad
Si lo hacemos desde que son pequeños, acabará pensando que no lo puede hacer.
-No compararles con nadie
Puede afectar a su autoestima y rendimiento.
-Motívales
Debemos animarles hacia el aprendizaje. Elogiar sus capacidades.
-Ayuda a que desarrollen su imaginación
Debemos enseñarles a enfrentarse a sus obligaciones como si fuera un juego o algo divertido.
-Incentívales la curiosidad por las cosas
Si favorecemos el aprendizaje a través de un ambiente estimulante, que nos resulte atractivo e interesante, es más probable que el niño quiera aprender. Debemos implicarnos siempre en la actividad.
-Muéstrales empatía
Dedicar un cierto tiempo a comprenderles y entenderles es imprescindible para solucionar posibles conflictos.
-Practica la escucha activa
En estas etapas tienen una necesidad inmensa de ser y sentirse escuchados.

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