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Patronales no descartan recurrir la supresión de conciertos en la FP superior

Las Escuelas Católicas de Madrid, que agrupan al 67% de los centros de Formación Profesional de Grado Superior, denuncian que 7.000 alumnos pasarán de pagar 36 euros a 360 mensuales si la Consejería de Educación retira los conciertos, y no descartan medidas judiciales y de presión.
MagisnetMartes, 26 de febrero de 2013
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En declaraciones a Efe, el secretario general de la Federación de Religiosos de la Enseñanza (FERE) de Madrid, Emilio Díaz, se ha mostrado "profundamente sorprendido y descorazonado" ante la decisión de la Consejería, que ha dejado a todo el sector "perplejo y con un grado alto de indignación". La supresión de conciertos, publicada en el BOCM el pasado martes, supone "desmantelar un sector básico y fundamental para el empleo" juvenil de la región, que está "saneado, consolidado, es sólido, eficaz y sale muy barato al erario público", y que permite a más del 80% de alumnos, en su mayoría de familias desfavorecidas, "encontrar un empleo cualificado tras pasar por las aulas".

"No descartamos ninguna medida, ya sea judicial, de información pública a través de medios de comunicación e incluso alguna medida de presión; tenemos a 7.000 alumnos afectados que tienen algo que decir y 500 profesores que pueden ir a la calle", advierte. "Todo ha ocurrido de forma insospechada, no teníamos noticia previa de que el gobierno de la Comunidad tuviera previsto retirar los conciertos y dejar a estos centros sin ningún tipo de financiación pública y, por lo tanto, a expensas de que los alumnos tengan que pagar íntegramente sus costes lo cual es inviable", señala Díaz.

La intención de la Consejería les llegó "de forma indirecta, fue comunicada directamente a algunos colegios en conversaciones, no siempre de la misma manera, sino con mensajes divergentes", añade, y "sin una negociación previa ni un debate mínimo", lo que merece el "más frontal rechazo", tanto por razones de fondo como de forma. Al día siguiente de publicarse, las patronales de la Concertada mantuvieron una reunión con la Consejería, "que fue solicitada hace más de un mes para tratar otros temas", donde manifestaron su "profunda preocupación y disgusto, por lo que suponía para los 7.000 alumnos, para el tejido productivo y empresarial de Madrid", y para el sector que "muy dificultosamente puede subsistir a la retirada de los conciertos".

La Consejería "nos habló de un problema económico y no nos aportó ninguna solución, nos dijo más bien que fuéramos nosotros los que pudiéramos elaborar algún tipo de alternativa para que la estudiara la Comunidad, pero que había tomado ya la decisión" por motivos económicos y que "no había debate al respecto", explica. Aunque "se sabe" que la Consejería está elaborando una norma reguladora de la FP dual, con participación de empresas, "hasta ahora a los centros a los que retira el concierto no les está proponiendo entrar en la FP dual ni ninguna financiación para ello", asegura.

Díaz apunta que la FP dual que ha comenzado este curso como "una experiencia piloto", con unos 750 alumnos de media docena de institutos, tiene "una complejidad enorme, exige tiempo, calendario, contactos con empresas, reorganización de los centros, muchísima envergadura para afrontar de manera irreflexiva, de la noche a la mañana". "Puede ser interesante, no estamos en contra, pero queremos conocer bien cuáles son los esquemas, las responsabilidades de las empresas y las de los centros, hacer planificación detallada y reflexiva", continúa.

"En un sector tan solvente y eficaz, no hagamos experimentos que al final nos quedemos sin lo uno y sin lo otro", según el secretario de FERE para quien "hasta ahora hay una iniciativa que desmantela la FP, 7.000 alumnos no podrían pagar lo que cuesta; estamos ante un tema de enorme gravedad". Dejar de tener conciertos supone tener que pagar "entre 250 y 450 euros al mes", según la especialidad, un coste que no puede soportar el perfil común de estos alumnos: "escolarizamos a una población con dificultades económicas, nuestra escuela profesional concertada es muy social", ha recalcado.

Las familias se verían obligadas a ir a la Pública, que sigue siendo gratuita pero no tiene plazas suficientes para una demanda de miles de alumnos afectados, lo cual "plantearía un colapso", explica antes de añadir incluso que, en los propios centros concertados, "la demanda ya está por encima de la oferta de plazas". Para Díaz, "difícilmente habría tiempo" para poner en marcha la FP dual el próximo curso, aunque "siempre se puede intentar deprisa y corriendo, pero hay centros que difícilmente estarían en condiciones de implantarla".

Es una cuestión "de envergadura, exige tranquilidad, ir viendo qué empresas tienen más solvencia para formar a los alumnos", porque es una "gran responsabilidad social" para el tejido empresarial madrileño, integrado por pymes, "sería bueno que hablara la escuela y que hablara la empresa, la CEIM", agrega. "Somos un sector pacífico, queremos seguir trabajando y estamos dispuestos a seguir negociando una situación que no hemos buscado, no hemos sido causantes de esta situación dramática, pero queremos buscar una solución, para evitar el daño", recalca. Por ello, pide que la Consejería "recapacite, reflexione, hable de calendarios", y juntos busquen "fórmulas educativas pero que mantenga los conciertos".

"No desmantelemos un sector que funciona maravillosamente bien, saneado, potente, solvente, sólido y eficaz como la FP superior, todavía no, al menos, y entretanto estudiemos posibilidades", sin necesidad de haber esquilmado previamente el sector, concluye.

Integran la FERE los Salesianos de Atocha, centro pionero en el mundo de la FP, el Colegio "Padre Piquer" (jesuítas), "Lasalle" de Carbanchel, los de las religiosas de María Inmaculada, y hasta cerca de 30 centros con experiencia y veteranía en Formación Profesional.

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