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Universidades públicas catalanas acumulaban una deuda de 264 millones en 2011

MagisnetViernes, 13 de septiembre de 2013
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Las ocho universidades públicas catalanas cerraron el ejercicio de 2011 con una deuda acumulada de 264,72 millones de euros, correspondiente en su mayor parte a adelantos reintegrables del Ministerio de Educación y Ciencia para financiar parques científicos y tecnológicos. En un informe, el Síndico de Cuentas de Cataluña ha alertado de que la situación de déficit de algunas universidades "puede comprometer seriamente su capacidad para generar los recursos necesarios para devolver estos préstamos".

Los derechos liquidados de las universidades presenciales de titularidad pública ascendieron a 1.499,67 millones en 2011, lo que supone un descenso del 9,25% respecto al curso anterior. Asimismo, las obligaciones reconocidas cayeron un 3,22% y quedaron en 1.537,56 millones, mientras que los ingresos por transferencias y subvenciones se desplomaron un 17,12% entre 2010 y 2011, situándose en 1.051,75 millones.

Por su parte, la Universidad Abierta de Cataluña (UOC) –que computa a parte al no ser presencial– recibió 28,99 millones en concepto de subvenciones por actividades durante el ejercicio 2011, así como 6,99 más en concepto de capital, y cerró con un fondo de maniobra de 3,70 millones. Las siete universidades contaron con 154.229 alumnos matriculados durante el curso 2010-11, a los que se suman los 46.854 del que computa a parte por no ser presencial.

El Síndico de Cuentas ha destacado que los datos agregados son orientativos, ya que existen diferencias entre los modelos organizativos, contables y de gestión de las universidades. Por otra parte, este organismo recoge en otro documento que la Fundación de la Universidad Autónoma de Barcelona (FUAB) aún no había percibido, a mayo de 2013, las ayudas que la Generalitat le concedió en 2010 para la construcción de la Vila Universitaria II, por valor de 5,4 millones. Esto ha provocado que el fondo de maniobra de la fundación sea negativo, lo que puede dificultar su agilidad a la hora de afrontar sus compromisos de pago.

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