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“Queremos crear una cultura que no despilfarre esa cantidad de alimentos”

En palabras de Manuel Juristo, director general de la Federación de Bancos de Alimentos de España (Fesbal), “lo que pretendemos, principalmente, es sensibilizar a la población para que se fomente la donación de alimentos para personas que lo necesitan”.

José Mª de MoyaMartes, 4 de febrero de 2014
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Siena, empresa editora de MAGISTERIO, ha firmado con Fesbal un convenio que “tiene mucha importancia porque va a difundir nuestra actuación entre el profesorado y alumnos de colegios de España”, señala Juristo.
Fesbal también ha firmando convenios similares con otras instituciones educativas, como la Universidad Politécnica de Madrid, para crear una cátedra “contra el despilfarro y a favor de un consumo razonable de los alimentos”. “Queremos crear una cultura para que no se despilfarre ese número de alimentos, queremos formarles porque nosotros nos dedicamos a luchar contra la pobreza pero también contra el despilfarro. Nuestro objetivo es reducir el despilfarro en un 50% de cara al año 2020”.

¿Tenéis datos de cuál es el porcentaje de alimentos que se despilfarran?
La mitad de lo que se produce a nivel europeo se despilfarra. Eso supone que el 42% se despilfarra en los hogares, un 33% en el proceso de producción y una cantidad menor en el sector de la restauración y en el transporte. Esto quiere decir que todo lo que vaya en la línea de crear una mayor conciencia entre las nuevas generaciones de aprovechar bien los alimentos va en beneficio de la lucha contra la pobreza.

¿Cómo se puede evitar el despilfarro en los hogares?
Muchas veces es porque se compra mal. Porque no te planteas lo que realmente necesitas. Un segundo capítulo puede ser que cocinas en exceso y te sobra.

¿Crees que existen los bancos de alimentos porque el Estado de Bienestar no funciona, como opina mucha gente?
Yo creo que no es real. Siempre va a haber personas necesitadas por diversas razones: paro, inadaptación, enfermedades, etc. Es decir, que los bancos de alimentos son necesarios, aunque ojalá no tuviesen que existir. Es importante que la iniciativa privada tenga estos proyectos para cubrir lo que no se pude cubrir por parte del Estado.

¿Cómo está valorada la acción de los bancos de alimentos?
A nosotros nos parece que gracias a la labor que estamos haciendo, que damos alimentos a un millón y medio de personas, no hay tanta protesta. Si no diésemos estos alimentos a ese millón y medio de personas saldrían a la calle. Nos parece que estas protestas que se están dando podrían ir a más.

¿Qué cantidad de alimentos repartís?
Nosotros hemos llegado a repartir 104.000 toneladas el año pasado a un millón y medio de personas. Nosotros no repartimos los alimentos a particulares sino a entidades benéficas que tienen unos requisitos. En números globales estamos atendiendo a unas 7.000 entidades benéficas en España y eso supone un millón y medio de personas. Además, tenemos problemas de solicitudes de entidades que quieren recibir ayudas del banco de alimentos. Por ejemplo, en Madrid hay unas 50 entidades en lista de espera.

¿Cuál es el procedimiento de captación de alimentos?
Los recibimos por diversas fuentes. En general, son excedentes de fabricación o de otro tipo. También las empresas fabrican algunas cantidades para donar. Son acuerdos con productores. También recibimos excedentes de la UE, que oscilan entre un 30 y un 40% según los bancos. Se trata de alimentos no perecederos, que el Ministerio de Cultura solicita y reparte entre Cruz Roja y nosotros. Ahora se acaba este plan y empieza uno nuevo en 2014, que se reduce un poco, pero que intentaremos suplir con otras ayudas. También recibimos ayudas de varios distribuidores. Nunca damos alimentos pasados de fecha. Luego hay muchas iniciativas de empresas y colegios, como son las operaciones kilo. En porcentajes, sería un 30-40% de Europa y, del 60% restante, un 30% sería de operaciones kilo.

¿Qué tiene que hacer un centro para donar a los bancos de alimentos?
Primero, difundirlo entre padres, profesores y alumnos. Además, recoger los alimentos y llevarlos al banco más próximo. Así de sencillo. Luego, estamos necesitando mucho voluntariado en los puntos de recogida. Cada punto requiere seis voluntarios cada día. En Madrid hay unos mil puntos de recogida. Lo que tiene que hacer el colegio simplemente es llevarlo al banco los días de campaña. Y los interesados en ser voluntarios sólo tienen que apuntarse en el banco de alimentos.

¿Cuántos voluntarios tenéis?
Calculamos que unos 60.000.

¿Cómo se puede captar la atención de los alumnos para esta causa?
Sobre todo con imágenes, que desde pequeños vean gráficamente las consecuencias de esto. Hay que enseñarles a comer, a no desaprovechar, y luego fomentar en ellos una cultura de preocupación por los que no tienen. Luego, hay muchos niños que comen en los colegios. Desde ahí también pueden aprender a valorar que la comida no se tira.

¿A qué tipo de entidades suministráis alimentos?
Hay de todo tipo, ONG, asociaciones de madres solteras, comedores sociales, entidades religiosas, etc. Somos una organización aconfesional y apolítica. Aunque las organizaciones que reciben nuestros alimentos sí que tienen que cumplir una serie de requisitos: que estén aprobadas por una institución pública u oficial como un Ministerio o una comunidad autónoma. También es necesario que tengan un almacén y un listado de beneficiarios. Y, por último, que se trate de entidades sin ánimo de lucro. En este sentido, nosotros tenemos unos inspectores que controlan que todo funciona correctamente y ayudan a las entidades beneficiarias por si surge alguna duda o dificultad.

Convenio con MAGISTERIO
Actualmente en España 10,5 millones de personas viven por debajo del umbral de la pobreza y de ellos, tres millones pasan dificultades para disponer de una dieta adecuada. Situación que, según la FAO, se ha agravado por el alza de los precios y la crisis económica. Por ello, la Federación Española de Bancos de Alimentos –Fesbal–, que representa 55 Bancos de Alimentos de España y forma parte de la FEBA formada por 21 países, ha firmado más de 300 convenios con empresas contra el despilfarro, y ha crecido más del 20% gracias a esas ayudas.
Desde hace unos meses, Servicios de Información Educativa y de Noticias (Siena), empresa editora de MAGISTERIO, pasará a formar parte de ese grupo de empresas con las que Fesbal mantendrá un convenio de colaboración. El convenio tiene por objetivo establecer un marco de colaboración que impulse a través del sector educativo las actuaciones que realiza Fesbal. Entre ellas, la promoción de campañas destinadas a recoger alimentos, denominadas operaciones kilo, en los centros educativos españoles a los que Siena tiene acceso.

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