“Hemos cambiado el lenguaje en el que se forman nuestros docentes”

Jesús Fernández-Cid es director del Centro Regional de Formación del Profesorado de Castilla-La Mancha, un centro que gracias a las nuevas tecnologías pretende revolucionar el modo de formar a los docentes. Licenciado en Ciencias Empresariales por la UCLM, donde en la actualidad es profesor asociado en la asignatura de Organización y Dirección de Empresas. Casado y padre de un maravilloso bebé de un mes, que le llena de vida. Su permanente sonrisa le delata. Era su proyecto soñado y el que ahora pone banda sonora a su vida, relegando a Antony and the Johnsons a un retiro coyuntural. Corredor de maratones hasta que el cuerpo aguante. Amante de la montaña. Apasionado de la lectura, lector de imprescindibles. El Valle de Toledo es el sitio de su recreo, un sitio con ese Toledo impresionante a sus pies. Loco de la tecnología. Un hombre cercano y ocupado, muy cercano y muy ocupado. Un hombre preocupado. Y mucho. Por la formación de nuestros docentes: “porque los docentes son las personas en las que ponemos lo más importante que las familias tenemos, que son nuestros hijos; y ellos son el futuro”. Mientras tomo asiento le escucho decir a alguien por teléfono una frase que me hace sonreír y que después de charlar adquiere más valor si cabe: “Por nuestros niños, cualquier cosa”.

Cuénteme… ¿Qué se esconde tras las siglas CRFP?
Un nuevo concepto y modelo de formación del profesorado comprometido con la calidad de la enseñanza que dé respuesta a las nuevas demandas y competencias de la sociedad actual. El CRFP surge como respuesta a una pregunta que nos hicimos: ¿cómo simplificar la estructura de la formación del profesorado y a la vez dar respuesta a las necesidades de nuestros profesores y alumnos? La respuesta vino dada por una gran red profesional de aprendizaje donde los profesores pudieran intercambiar experiencias formativas entre iguales bajo la filosofía p2p y, a la vez, dotar al sistema educativo de proyectos y metodologías que dinamizaran y actualizaran la realidad de las aulas de nuestra región.

¿Cree que este centro está revolucionando el concepto de educar y formar al profesorado de la región?
Sin duda, lo que ha hecho la Consejería de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha ha sido cambiar un modelo de formación. El objetivo de este nuevo modelo ha sido la inmersión digital del profesorado en sus actividades formativas. Pero no nos hemos quedado tan cortos. Sobre todo intentamos crear una gran red social docente en torno a la plataforma de formación del profesorado. En este tiempo de vida que llevamos, hemos encontrado profesores increíbles. En pueblos que a veces no nos esperábamos hemos encontrado docentes que tenían tanto que aportar… Buscamos talento y proyectos que ofrecer de una escuela, de un instituto a otro. Hemos encontrado gente de verdad increíble y cuando nos han entendido, han querido compartir sus proyectos. Esa es la formación en la que creemos.

¿Contribuye al desarrollo de una enseñanza de calidad? ¿Enriquece la Educación de Castilla-La Mancha?
Sin duda, el sistema de formación e innovación que de-sarrolla el CRFP supera las excepciones de excelencia en la práctica educativa que encontramos hacia un compromiso con el desarrollo personal del alumnado. Esto implica la eliminación de una cultura educativa basada en el aislamiento del profesor al tiempo que fomenta la colaboración y la mejora continua de la práctica educativa, de tal manera que profesores en diferentes centros pueden compartir sus formas de enseñanza y las actividades que la conforman. Así, trasladamos prácticas excelentes aisladas a un contexto basado en una comunidad de prácticas excelentes formadas por docentes. Sería un modelo de creación de proyectos educativos y de extensión de los mismos.

¿Era necesario un centro formativo de estas características en esta Sociedad de la Información?
La sociedad en la que hoy en día nos movemos se vuelve cada día más compleja, con unas señas de identidad muy diferentes a las que tenía cuando se creó el modelo educativo actual. La constante e imparable evolución tecnológica ha producido un fuerte cambio en la vida diaria y profesional de todas las personas. Existen innumerables nuevas profesiones en el sistema productivo que exigen nuevas competencias que deben reunirse por parte de nuestros jóvenes para conducirse con éxito en la época que les ha tocado vivir. El colegio no puede ser ajeno a esta realidad y, en lugar de sentirnos atropellados por ella, necesitamos encontrar las claves para educar a las nuevas generaciones, gestionando un cambio en el día a día del centro con nuevos planteamientos pedagógicos y metodológicos.

¿Y esto qué implica?
Se trata de formar a ciudadanos, no solo a profesionales eficientes, en un sistema educativo abierto a la comunidad y basado en aprendizajes colaborativos que implican a toda la sociedad. La labor de este sistema no es formar a ciudadanos únicamente para ser útiles a un mercado, sino formar a ciudadanos capaces de desenvolverse en todos los niveles intelectuales, científicos, emocionales y sociales.

¿La formación a distancia funciona?
Puedo darle múltiples razones por la que la formación a distancia funciona: porque tiende a la personalización; permite una mayor conciliación con la vida personal y laboral; disponibilidad geográfica absoluta; abarca más participantes a los que ofrecer más y mejores propuestas formativas; se pueden crear comunidades de interés e interacción entre los docentes a través de chats, foros, aulas virtuales, etc.

Y todo ello gracias a las nuevas tecnologías…
Es la mejor manera para llevar la mejor formación posible al último rincón de una comunidad como Castilla-La Mancha. Estamos ante una oportunidad única de ofrecer igualdad de oportunidades a todos nuestros ciudadanos. Internet es una realidad entre nosotros, sería miope no aprovechar sus ventajas dentro del ámbito educativo y de formación del profesorado.

¿Y un proyecto en el que sueña?
Sueño con la digitalización de la experiencia educativa, que es una de mis obsesiones. Considero que por diversos motivos utilizamos la tecnología de una manera muy rudimentaria en los centros educativos aunque tengamos proyectos tan importantes como el de la mochila digital. Creo que nos queda mucho camino que recorrer en la tecnología educativa.

Desde el primer momento, el cierre de los centros de formación del profesorado y la creación de un único centro regional despertó críticas de los sindicatos. ¿Qué opina de los datos revelados por la encuesta –a 645 docentes– elaborada por el sindicato STE, puntuando el centro con un 3,28 sobre 10?
Cada taller que realizamos termina con una encuesta donde se realizan diferentes preguntas sobre el mismo y el grado de satisfacción del profesorado que lo ha cursado o sobre la calidad. Hasta la fecha han respondido 11.424 docentes a la pregunta de cómo valoran el taller. La respuesta media es un 8,18 sobre 10. Si les preguntamos sobre su aplicación profesional al aula o la metodología, las respuestas de media son un 8,2, con casi 15.000 respuestas. Son docentes que han participado de nuestra formación, que nos conocen. No voy a opinar sobre la encuesta de STE porque cada día trabajo para cada uno de los docentes que hay en Castilla-La Mancha. Es mi compromiso con esta región, que me ha dado todo lo que soy.

¿Cree que es pronto para evaluar los resultados del centro que, como quien dice, acaba de empezar?
El centro tiene un año y medio de vida. En 18 meses casi 26.000 docentes han querido participar de nuestra formación. Les estamos enormemente agradecidos por haber confiado en nosotros. Hemos cambiado muchas formas de entender la formación, hemos abierto nuevas modalidades y seguiremos abriendo nuevos caminos. Mucha gente se muestra sorprendida de lo que hemos conseguido. Lo mismo que recibimos críticas, hay gente que nos felicita, que nos anima, que nos da ideas, que cree en no-sotros… Hemos cambiado el lenguaje en que se forman nuestros profesores para hablar la lengua y el idioma que la sociedad demanda de nuestros alumnos: somos digitales y plurilingües.

Ponga un titular al pensamiento que le viene a la cabeza cada día cuando entra por la puerta del centro.
Cada día que entro al centro hay dos palabras que vienen continuamente a mi mente, que son compromiso y responsabilidad. Compromiso con la comunidad educativa y responsabilidad por las decisiones que tomamos. Creo en una sociedad digital y plurilingüe y en ese camino es en el que nos encontramos en las aulas de Castilla-La Mancha.

Por último, defina el Centro Regional de Formación del Profesorado con tres palabras.
Somos digitales, abiertos y colaborativos. Es lo que puede definir una institución del siglo XXI y en ella nos encontramos.