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Alumnos con discapacidad intelectual se diploman

En el curso 2013-14 se diploma la primera promoción de alumnos de los programas Demos con discapacidad intelectual en la Universidad Pontificia de Comillas en Madrid, organizados por la Cátedra Telefónica-Fundación Repsol de Familia y Discapacidad de la universidad.
Laura de FrutosMiércoles, 18 de junio de 2014
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Demos se trata de un proyecto de formación para el empleo ordinario y la integración en el campus universitario de personas con discapacidad intelectual.

Los programas Demos, en los que han colaborado Telefónica, la Fundación Repsol y la Fundación Síndrome de Down de Madrid, ofrecen una formación en dos perfiles profesionales: técnico auxiliar en entornos tecnológicos, conocido como Tecnodemos, y técnico auxiliar en entornos educativos, llamado Educademos. Estos programas se realizan en el entorno de la universidad para que exista una cooperación con el resto de alumnos de la Universidad de Comillas, ya que parte de las actividades culturales y deportivas las realizan de manera integrada con el resto de los alumnos que estudian en Comillas. Ana Berástegui, directora de la Cátedra Telefónica-Fundación Repsol de Familia y Discapacidad en el Instituto Universitario de la Familia de la Universidad Pontificia de Comillas, aclara que “este programa se hace en la universidad pero no es un título universitario, sino que es un diploma propio del rango de la formación postobligatoria”.

Tanto Educademos como Tecnodemos constan de dos cursos académicos y llevan dos años en funcionamiento. Berástegui puntualiza que se centraron en estos dos perfiles profesionales porque “analizando los programas formativos que les ofrecen en otros lugares a jóvenes con discapacidad, veíamos que estos perfiles eran dos lagunas en su capacidad de elección puesto que en lo que más se les forman son en cosas manipulativas, como hostelería o turismo, o en gestión administrativa. Por ello, noso-tros hemos querido ampliar ese abanico ofreciendo la capacidad de ser personal de apoyo en empresas tecnológicas o bien en el mundo de la Educación Infantil o Primaria”.

La Universidad Autónoma de Madrid fue quien inició este movimiento integrador y va por su sexta promoción, mientras que la Universidad Católica de Murcia empezó al mismo tiempo que la de Comillas. Son estos tres centros los únicos que ofrecen este tipo de formación dentro de la universidad, pero Berástegui destaca que “en Comillas somos pioneros en cuanto al tipo de planteamiento que hacemos de los aspectos más vocacionales porque estamos abriendo perfiles profesionales específicos. Y, de hecho, les preguntamos a los chicos dónde les gustaría trabajar en el futuro y las dos respuestas que nos dieron fueron que con ordenadores o con niños y así es como decidimos desarrollar estos dos programas”.

Uno de los principales objetivos del programa Demos es la integración de estos alumnos con el resto de los universitarios. Berástegui resalta la importancia de que “la integración laboral en el futuro tiene que ver con que la gente que te va a contratar sepa de la discapacidad, se acostumbre a trabajar con ella y entienda la riqueza que hay en esa diversidad y, por ello, nosotros tenemos a los chicos que estudian para ser técnico auxiliar en entornos educativos al lado de los alumnos de Magisterio y a los otros, en el campus en el que están Empresariales e Ingeniería Industrial”.

Los alumnos que se han diplomado este curso son 22. Sus clases han constado de 20 horas semanales, las cuales 15 se las daba un profesor tutor que está especializado en el trabajo docente con personas con discapacidad, tres horas dadas por un especialista, que es un profesor que da clase en la universidad de cuestiones específicas y que se ha formado para dar clase de alguna asignatura especializada a estos alumnos y, por último, dos horas de actividades culturales en el que los profesores de teatro, fotografía o pintura dan clases a todos los alumnos de la Universidad Pontificia de Comillas.

Telefónica, Fundación Repsol y Down Madrid son entidades socias de la Cátedra en general, además del programa. Berástegui aclara que “con ellos decidimos los programas, hacemos la selección del alumnado y del profesorado y, a parte de ser colaboradores y consejeros de todo el programa, especialmente Down Madrid es compañera de camino, desde el punto en que ellos gestionan las prácticas. Y, además, hay hasta 15 entidades que becan a los alumnos”.

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