Derribar muros para construir juntos puentes de paz y cariño

El valor trabajado para dicho evento fue el trabajo en equipo” y para cumplir con nuestro objetivo nos centramos en tres temas que consideramos relevantes para nuestros alumnos: la conmemoración del 25º aniversario de la caída del Muro de Berlín, Malala, la niña que ha recibido el Premio Nobel de la Paz, y Mensajeros de la Paz, que ayuda arduamente a muchas personas en todo el mundo. Entre ellos, a más de 46.000 niños.

Durante el mes de enero fuimos tomando conciencia de los muros emocionales que nos dañan y nos separan de los demás. Estos muros son invisibles y muchas veces no somos conscientes de ellos. Por eso debemos identificarlos y derribarlos, y en su lugar tender puentes de respeto, tolerancia y gratitud que nos ayuden a crear vínculos de fraternidad que repercutan en nuestro bienestar individual y colectivo.

En cuanto a Malala, una niña que, a su corta edad se ha convertido en símbolo de valentía, optimismo y superación, dimos a conocer su historia para que los niños adquieran consciencia de lo afortunados que son por asistir al colegio y tener la oportunidad de alcanzar sus metas sin poner su vida en peligro.

Por último, Mensajeros de la Paz, cuyo fundador es el padre Ángel, es para nosotros uno de los ejemplos de trabajo en equipo más importantes del siglo XXI. Su labor en todo el mundo es de vital importancia para construir un mundo mejor y más compasivo donde futuras generaciones puedan heredar y seguir su ejemplo. Hoy en día debemos admirar a personas que nos enseñen valores que nos humanicen, nos ayuden a alcanzar un bienestar general y, por tanto, nos permitan conseguir la felicidad, ya que es el fin último del ser humano.

Por todo ello hemos querido contribuir a su gran labor con nuestro granito de arena y hemos recogido lápices con el lema Un lápiz por una sonrisa, porque nuestro mayor objetivo es que nuestros discentes aprendan a tender puentes de solidaridad, paz y cariño hacia las personas más necesitadas y así contribuir a su desarrollo integral para una adecuada incorporación a una sociedad más justa y plural.

Nuestro trabajo se ha podido llevar a cabo gracias a toda la comunidad educativa, que ha colaborado y participado con gran ilusión en la preparación de paneles, dibujos, Power Point, banderas de palomas, vídeos sobre el trabajo en equipo y el aprendizaje de una canción: Los niños queremos la paz. Sin embargo, debemos destacar por encima de todo el entusiasmo con el que los niños de nuestro centro han trabajado, colaborado y participado de manera directa en los preparativos para recibir y conocer al padre Ángel.

Todos nos reunimos en el gimnasio del colegio para celebrar el Día de la Paz. Esta actividad permanecerá grabada en nuestros corazones porque se vivió un momento realmente intenso y emocionante donde los niños y maestros cantaron e hicieron entrega de los lápices recaudados al padre Ángel. La emoción de los alumnos se multiplicó al conocer que sus lápices serían entregados a niños que realmente lo necesitan y qué mayor satisfacción para ellos que saber que han aportado una sonrisa a muchos amigos, a quienes, sin conocerlos personalmente, han ayudado.

El CEIP “Cervantes” agradece al padre Ángel su generosidad por asistir a nuestra celebración porque nos sentimos felices de haber colaborado y enseñado a nuestros niños a tender puentes de gratitud, armonía y amor por los demás. Hoy en día debemos tomar conciencia de que hay acciones que nos permitirán ser felices y que la ayuda a los demás es un elemento clave para crear una sociedad donde todos tengamos las mismas oportunidades de alcanzar nuestros sueños.

María Isabel Mendoza
CEIP “Cervantes” de Madrid