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ANPE Cantabria lamenta que haya dinero para el Racing pero no para gasto educativo

Según el sindicato, los compromisos del líder del Ejecutivo regional, Miguel Ángel Revilla, se han quedado “en palabras“ y no se han traducido “a hechos”.
Jesús García-BermejoMartes, 27 de septiembre de 2016
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La Educación, la Sanidad y la Ayuda a la Dependencia fueron las tres cuestiones que el actual presidente del Gobierno de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, calificó como “prioritarias” al inicio de la presente Legislatura.

Sin embargo, para el Sindicato Independiente de Docentes de Cantabria (ANPE Cantabria), los compromisos del líder del Ejecutivo regional se han quedado “en palabras“ y no se han traducido “a hechos”. Más cuando ha dicho “encontrar cuatro millones de euros que ha decidido invertir en otros sectores”, refiriéndose concretamente a la aportación que va a recibir el Racing de Santander. ­
Aunque ANPE Cantabria no quiere cuestionar la legitimidad del Gobierno para invertir el dinero de todos los contribuyentes, sí lamenta que la inversión en Educación no constituya una prioridad.

Por este motivo, exige a la Consejería de Presidencia, a la Dirección General de Función Pública y a la Consejería de Educación, Cultura y Deporte “que cumplan con sus compromisos y apuesten de verdad y de una vez por todas por la Educación Pública”.

El sindicato pide concretamente que se invierta en la mejora de las condiciones de trabajo del Profesorado y de la calidad educativa que recibe el Alumnado. “Acaban de demostrar que dinero hay de sobra, todo es cuestión de prioridades”, esgrimen.

Aunque reconocen que la Consejería de Educación que lidera Ramón Ruiz tuvo unos “importantes gestos iniciales de ruptura con las nefastas políticas de recortes de la pasada legislatura”, lamentan que últimamente para conseguir algunas mejoras han sido necesarias “duras y largas conversaciones”, en las que las autoridades han aceptado “modificaciones con pocas ganas y a regañadientes”.

De hecho, ANPE Cantabria pone como ejemplo que para lograr las mejoras para el Profesorado y la Educación Pública que se recogían en los programas electorales de la coalición gobernante han mantenido “largas negociaciones” porque siempre ponían como excusa “la falta de dinero”.

Entre las reclamaciones recurrentes de este colectivo está el aumento del presupuesto destinado a la Educación Pública para contratar Profesorado “cuando sea necesario y desde el primer minuto, así como para cubrir sustituciones de docentes enfermos, para mejorar las condiciones laborales y salariales de todo el Profesorado, para dotar a los centros públicos de recursos y materiales, y para reparar todos los desperfectos existentes en los mismos”.

Además, manifiestan su preocupación por la “escasez” de medios humanos existente en la Dirección General de Personal Docente, donde apenas una docena de funcionarios gestiona a cerca de 7.000 personas.

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