Premios Aprendizaje-Servicio, Educación más compromiso

Gijón ha acogido el IX Encuentro Estatal de Aprendizaje-Servicio donde se han entregado los Premios Aprendizaje-Servicio 2016 a seis proyectos educativos. El concepto de aprendizaje-servicio implica aprender haciendo un servicio a la comunidad. Estos galardones son fruto de la iniciativa de la Red Española de Aprendizaje-Servicio, la editorial Edebé y la Fundación Educo.

A la convocatoria se presentaron 171 proyectos divididos en tres categorías: Infantil-Primaria, ESO-Bachillerato y Formación Profesional. Los ganadores han sido:

• Infantil-Primaria: primer premio para Cuídate, cuídalo del CP “San Pascual Bailón” de Pinos Puente (Granada). Los alumnos acondicionaron un parque de actividad física y un huerto ecológico dentro del recinto escolar y trazaron un circuito cultural-saludable dirigido a toda la población ofreciendo información relacionada con la salud y la cultura en siete lugares emblemáticos a través de códigos QR.

El segundo premio fue para el Aula de interpretación de la natura del CP “San Juan de Jerusalén” de Cabanillas (Navarra). El alumnado de 5º de Primaria creó un aula de interpretación de la naturaleza, construyeron un refugio para animales autóctonos y ofrecieron el aula como recurso lúdico y didáctico para la población.

• Secundaria-Bachillerato: el primer premio fue para Generación inter del IES “Miguel Catalán” de Coslada (Madrid). Estudiantes de 3º y 4º de ESO y 1º de Bachillerato ofrecieron y dinamizaron un programa de actividades lúdicas y formativas –como visitas a museos– para personas mayores de Coslada y San Fernando de Henares.

El segundo premio se lo llevó Ciudades amigables para todas las personas del Colegio “Santa María” de Portugalete (Bilbao). Los alumnos de 4º de ESO y personas con diversidad funcional mapearon su entorno compartiéndolo en OpenStreetMap y planteando propuestas de mejora.

• Formación Profesional: La integración natural de la Asociación para la Integración de la Personas con Discapacidad Intelectual de El Palmar (Murcia) se llevó el primer premio. Jóvenes con discapacidad intelectual pusieron en marcha y dinamizaron un aula natural para escolares de Primaria destinada a la sensibilización medioambiental.

El segundo premio fue para APS Ecoauditoría del Instituto “Narcís Monturiol” de Barcelona. El alumnado de Ciclo Formativo de Grado Superior de Educación y Control Ambiental, del Módulo de Actividades Humanas e Impacto Ambiental, llevaron a cabo una ecoauditoría de la Escola “Mestre Gibert i Camins”. La auditoría ambiental cubre la necesidad de la escuela de conocer su estado ambiental y les suministra una potente herramienta con la que en el futuro podrán tomar decisiones consecuentes y establecer buenas prácticas para reducir el impacto ambiental.

Razones para decir sí al aprendizaje-servicio
• Como dice Roser Batlle, presidenta de la Red de Aprendizaje-Servicio, no se trata de una “moda, en nuestro país muchos centros educativos ya lo desarrollaban sin bautizarlo o sin sistematizarlo del todo”. Batlle prosigue, “frecuentemente aparece una intuición del docente cuando percibe hasta qué punto se motivan los chicos y chicas cuando hacen algo útil por los demás, aplicando su talento y sus aprendizajes”, y añade: “Una vez hemos pasado de la intuición a la sistematización, esto ya no hay quien lo pare”.

• En opinión de la presidenta, “el valor principal del aprendizaje-servicio es “el impacto en el entorno. Los proyectos no solo son trabajos de campo donde los alumnos aprenden de manera activa, observando y analizando la realidad, sino que también son acciones solidarias y comprometidas, de utilidad directa para mejorar algún aspecto concreto de esa realidad”.

• Batlle destaca tres aspectos del aprendizaje-servicio:

• “Los chicos y chicas desarrollan su talento buscando y aplicando soluciones concretas a retos y necesidades que perciben”, no se trata de que los alumnos tengan que elegir “entre ser brillante y académicamente preparado, y ser solidario y comprometido con la sociedad”. Esta propuesta apuesta por la combinación de ambos.

• La escuela tiene que trabajar en red con las entidades sociales e instituciones del entorno. “La escuela se abre y encuentra aliados poderosos en su labor educativa”.

• Esta propuesta educativa “refuerza la inclusión del alumnado con dificultades de aprendizaje, que encuentra su lugar en este tipo de proyectos”. Batlle defiende que alumnos que no destacan en la vida académica definida como convencional, pueden desplegar sus habilidades y motivación en estos proyectos.

• Como dijo Jaume Funes, psicólogo y periodista, durante el encuentro, “el profesorado ha de ayudar al alumnado a entender que necesitamos a los otros para aprender”, además, este aprendizaje tiene que ver con “una escuela que descubre a la comunidad y una comunidad interesada por la escuela”.