“Aquí se paga 10.000 euros por niño al año, mientras que en otros países se llega a 30.000”

Fijarse en los modelos de éxito de otros países y otorgar más autonomía a los centros para poder implantar metodologías innovadoras. Son dos puntos que Luisa Tristán pide a los políticos para que los incluyan en el pacto por la Educación. Desde hace unos meses es directora del Grupo Cognita en España, que cuenta con cinco centros considerados entre los mejores colegios internacionales del país.

¿Cómo ha ido evolucionando el Grupo Cognita en España desde su entrada en 2004?
Cognita ha ido comprando colegios que ya están funcionando en España, no los ha creado. Eso ha permitido mantener su idiosincrasia pero añadiendo el valor de la excelencia académica. Nos centramos en mejorar el modelo educativo y las infraestructuras para atraer a más alumnos. Pero no es McDonald’s, ya que aquí cada colegio conserva su propia filosofía.

Aunque cada colegio sea autónomo, ¿qué es lo que exige Cognita para conseguir buenos resultados?
Pautas muy exigentes. Todos nuestros colegios en España siguen el modelo británico y tienen que estar acreditados por el organismo competente, pero eso no es suficiente para Cognita. Tienen que estar por arriba en los estándares de calidad educativa y de satisfacción de alumnos y padres –a través de encuestas–. También hay características educativas que no solo se basan en la nota, ya que el mundo ha evolucionado más en los últimos 10 años que en todo el siglo anterior. Ahora somos muy exigentes en valores: en comunicación, trabajo en equipo, liderazgo, respeto…

¿En todos los colegios se sigue el currículum británico?
Sí. El último es “The English Montessori School” y tiene currículum español en Bachillerato. Para las demás etapas se sigue el británico.

Me ha hablado también de la encuesta a los padres. ¿Cómo es la relación con ellos desde la Privada?
Son muy exigentes porque pagan mucho dinero por un servicio que podrían tener gratis en un colegio público. Además, no solo miden la calidad en la enseñanza, sino también en el comedor, las rutas escolares, el profesorado… En Cognita hablamos familia a familia para mejorar la calidad real y la percibida, que a veces no son la misma. El padre de la Privada ha decidido invertir dinero en el futuro de su hijo y quiere que su hijo vaya a un colegio único. Es muy difícil llegar a ese nivel de exigencia.

¿Cree que la Administración pública debería compensar de alguna forma a esos padres que eligen los colegios privados?
La filosofía es: si todos los españoles pagamos impuestos, todos nuestros hijos tendrían derecho a una cantidad de nuestros impuestos para su Educación. El que va al público la recibe, el del concertado también, pero en el privado no. Habría dos formas de hacerlo: a través del bono escolar o con la deducción en la renta. Piensa que si todos los alumnos que van a un colegio privado, de repente fueran a la Pública, colapsaría.

¿Cómo se comporta la Administración con la Privada?
Bien, no hay tensión. Es importante entender que los privados debemos cumplir con la regulación exactamente igual que los públicos y los concertados. Nosotros cumplimos religiosamente con todo. Donde puede haber cierta tensión es en el tema de la Concertada, porque hay casos que no están siendo muy éticos.

¿Por qué esa tensión?
Porque hay algunos casos aislados de empresas concertadas que se lucran usando recursos públicos. Los privados pensamos que los concertados deben actuar sin ánimo de lucro. Hay que respetar las reglas de juego.

¿Cómo han afectado las distintas legislaciones a la Privada?
Pues igual que a la Pública. Lo de cambiar de ley educativa cada vez que cambia el gobierno es un desastre para el país. Un país necesita un plan de Educación a largo plazo, que no puede cambiar según cambian los partidos políticos. El problema es que la Educación se ha convertido en un instrumento político en vez de en una estrategia de país, y eso nos afecta a todos porque produce mucha incertidumbre. Incertidumbre y Educación no deberían ir juntas, pero la realidad es que sí que van.

¿Qué le pediría Cognita a los políticos en ese pacto que sea interés para la Privada?
Para toda la Educa-ción –ya sea privada, pública o concertada– pediría un plan a largo plazo que se fije en los modelos de más éxito en el mundo, donde normalmente ves que el profesor está muy bien formado, que hay una inversión enorme en formación docente, en los recursos que necesite y en impulsar su respeto. Desde el punto de vista solo de la Privada, necesitamos algo más de autonomía. Un ejemplo es el tema del inglés. Para que los alumnos puedan ser bilingües está muy bien que no solo estudien Inglés, sino que estudien en inglés. Homologar a un profesor de Ciencias en inglés en España es muy difícil. A veces es más fácil que un profesor español que más o menos sabe inglés imparta la clase que traerte a un profesor desde Londres. También en temas de horarios nos gustaría implantar tendencias innovadoras, pero nos resulta muy complicado.

¿Qué opina de los colegios bilingües en la Pública y Concertada, por ejemplo en la Comunidad de Madrid?
No voy a criticar otros modelos, lo que sí digo es que tendría que ser real. Si colgamos un letrero grande en el que se lea “colegio bilingüe”, por lo menos que la mitad de la docencia sea en inglés, y en un inglés correcto. Yo no sé si esto es cierto. Tengo mis dudas porque hay una realidad, y es que el profesor en la enseñanza pública es un funcionario que tiene un puesto para siempre y que es muy difícil reciclar y convertir en un profesor bilingüe de repente.

Con respecto al profesorado, ¿cómo se le selecciona en Cognita?
Somos superexigentes. Tienen que estar acreditados por los organismos que nos acreditan a nosotros. Y luego tienen que tener las capacidades de adaptarse a un país distinto. Es muy difícil atraer profesores a España porque el salario medio es más bajo que en otros países europeos. Si tú comparas lo que aquí pagamos las familias por la Educación privada con otros países, hay mucha diferencia. Depende del colegio y del tramo educativo, pero de media podemos estar pagando entre 10.000 y 12.000 euros por niño cuando en países como Reino Unido o Francia se paga 20.000 o 30.000 al año. Nosotros intentamos dar la misma calidad desde un sistema que parte de un ingreso diferente. Es muy complicado.

¿Cómo se encuentra la demanda actual en la Privada?
Entre 2009 y 2013 se perdieron muchísimos clientes en la Privada porque también se abrieron muchos concertados. Sin embargo, sí que hay familias que tienen clarísimo que lo mejor que pueden hacer por sus hijos es darles la mejor Educación. Hay gente que no se va de vacaciones o no se compra un coche para llevar a su hijo a un colegio privado.

OTRA FORMA DE ENSEÑANZA

• El máximo potencial

“Ya no basta con sacar muy buena nota y tener conocimientos. El mundo cambia tan rápido que si no enseñamos al alumno a aprender, a ser flexible, crítico… va a fracasar como persona. El objetivo de Cognita es que cada alumno llegue a su máximo potencial”.

• Docencia más dinámica

“En nuestros colegios, los espacios son más abiertos, la organización de la docencia es más dinámica. Ya no hay niños en fila cogiendo apuntes, sino que se intenta que aprendan a base de proyectos, colaborando unos con otros, enseñando unos a otros… Los profesores tienen que trabajar juntos, y de hecho cada quincena tienen que presentar un proyecto”.

• Deberes personalizados

“Si vamos a un modelo en el que el niño es el protagonista de su propio aprendizaje, la cantidad de deberes dependerá de cada niño. Hay niños que no necesitan hacer tareas y otros que sí que lo necesitan porque no somos iguales. Por ejemplo, en la flipped classroom, hay niños que necesitan ver los vídeos solo una vez, y otros tres veces. Por eso creo que los deberes deben ser personalizados. El problema es que venimos de un sistema en el que está todo dirigido (el libro, el horario, el profesor…) y el mundo ya no es así”.