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“No todo el gasto se traduce en una mejora en términos de equidad”

Según la profesora y doctora en Economía Gabriela Sicilia, de la Universidad Autónoma de Madrid, a pesar de que las comunidades tengan los mismos recursos, los resultados académicos vienen determinados por las distintas intervenciones que los gobiernos realizan sobre sus sistemas educativos.
Cristina ArenasMartes, 10 de abril de 2018
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Gabriela Sicilia.

Gabriela Sicilia es doctora en Economía y profesora en la Universidad Autónoma de Madrid. Junto a Rosa Simancas ha presentado un informe sobre la equidad educativa, donde han realizado una comparación regional a partir de los datos PISA del 2015. En los resultados se puede ver cómo comunidades autónomas como Galicia y Castilla y León tienen los sistemas educativos más equitativos de España, mientras que los peores son los de Andalucía, Extremadura y Murcia: “Al final hay 17 sistemas educativos distintos porque las comunidades tienen autonomía para diseñar diferentes políticas”.

¿Cuál es la diferencia entre igualdad y equidad?
La igualdad solo mira la dispersión que hay y las diferencias sin tener en cuenta el nivel socioeconómico o las características del contexto de los alumnos. En cambio, la equidad sí que tiene en cuenta esas diferencias.

¿Cuándo hablamos entonces de inequidad?
Cuando las diferencias en los resultados se deben a diferencias en el contexto o en el nivel socioeconómico del alumno hablamos de inequidad. Si las diferencias que existen son por otros motivos, solamente hablamos de desigualdad.

Si dos alumnos parten con las mismas condiciones y el mismo contexto, ¿lo normal es que lleguen a alcanzar el mismo nivel?
Llegarían al mismo nivel si recibieran la misma Educación, si realizaran el mismo esfuerzo y tuvieran la misma capacidad, pero todos los alumnos tienen capacidades distintas y hay factores culturales y familiares no asociados a características socioeconómicas que hacen que tengan habilidades no cognitivas diferentes. En principio, dos alumnos en un mismo sistema educativo con igualdad de condiciones socioeconómicas y a igualdad de esfuerzo y de capacidad, deberían obtener el mismo resultado.

¿Cómo se puede mejorar la pobreza educativa en términos de equidad?
Reduciendo la brecha que hay entre los estratos de alumnos más pobres y más ricos económicamente.

¿Es posible conseguir un sistema educativo equitativo e igualitario? ¿Cómo?
Sí. Algunas comunidades autónomas como Castilla y León y Galicia, que logran tener sistemas igualitarios y equitativos. Se está observando que hay una inercia positiva entre igualdad y equidad. Para ello se tienen que dar políticas focalizadas a los colectivos de los alumnos más desaventajados para dar más igualdad de oportunidades, mejorar la equidad del sistema y reducir la desigualdad que hay.

¿Por qué Galicia, sin ser una de las comunidades autónomas más ricas, ha conseguido tener el sistema educativo más equitativo?
La causa no se sabe exactamente, pero puede ser que esté llevando a cabo las políticas adecuadas para mitigar los efectos del nivel socioeconómico del alumno en el posterior resultado académico. También puede ser porque, inicialmente, el nivel de dispersión de la población es menor.

Casos como el de la Comunidad de Madrid llaman la atención. En ella existe un bajo porcentaje de alumnos pobres educativamente hablando, pero la brecha es bastante relevante teniendo en cuenta el nivel socioeconómico del alumnado. En estos casos, ¿debería intervenir el Gobierno regional de manera urgente?
Siempre que exista un problema en materia de Educación, el Gobierno debe intervenir para asegurar que todos sus ciudadanos, independientemente de su origen socioeconómico, tengan un acceso de calidad a la Educación. Madrid, por ejemplo, es una comunidad que en términos de igualdad tiene buenos resultados, pero no así en términos de equidad. Por estas razones es esperable que las ciudades grandes tiendan a tener mayor inequidad porque hay una mayor dispersión inicial de la población que luego se ve reflejada en los resultados.

Si la Educación en España dependiera del Gobierno y no de cada comunidad autónoma, ¿los alumnos tendrían las mismas posibilidades de llegar al mismo nivel?
Al final, en España, hay 17 sistemas educativos distintos porque las comunidades tienen autonomía para diseñar diferentes políticas y los alumnos no están recibiendo la misma Educación. Si fuera centralizado, los alumnos deberían recibir la misma Educación y obtener el mismo resultado.

Si cada comunidad autónoma pusiera los mismos recursos, ¿habría equidad?
Tendrían que poner los mismos recursos, las mismas políticas, los mismos profesores, mismos colegios,… Aquí surge la importancia del gasto educativo, que está relacionado con los éxitos educativos y las políticas. Pero no todo gasto se traduce en una mejora en términos de equidad. Uno puede tener los mismos recursos invertidos, pero si tiene intervenciones de diferente tipo con los mismos recursos va a tener unos resultados distintos.

¿Deberían implantarse más pruebas como las de PISA para ver el nivel del sistema educativo?
Sí. La comunidad académica reclama más pruebas estandarizadas a nivel nacional
que permitan comparar a todas las comunidades con un mismo instrumento.

¿Es importante para el currículum laboral de los alumnos tener excelencia en el sistema educativo?
Lo que al final nos diferencia en el mercado de trabajo son las habilidades que adquirimos. Es cierto que a mayor titulación, mejor condición de acceso; pero a igualdad de titulación, la diferencia está en la calidad.

En una clase, ¿es mejor luchar por conseguir la equidad o la excelencia?
Lo ideal es mejorar la excelencia a través de la equidad o viceversa. La excelencia en España es un desafío y una materia pendiente, aunque es un país bastante equitativo.

¿Qué se puede hacer para no rebajar el nivel de los alumnos con mejores notas?
Lograr la igualdad no implica mayor equidad. Hay que mantener las políticas enfocadas a la excelencia educativa pero focalizando más en los alumnos con contextos más desfavorables.

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