Esperanza Moreno: “Los planes del Gobierno sobre la Concertada no son ninguna broma”

Esta consejera de Educación tiene a gala ser maestra y de la Pública. No desaprovecha la ocasión para recordarlo como argumento de autoridad a cada pregunta. Y se nota por la defensa sin cuartel –hasta pecar casi de corporativismo– que hace de los que hasta hace bien poco eran sus compañeros. «Estamos muy orgullosos de nuestros docentes y tenemos absoluta confianza en ellos». Pero, ojo, con la misma pasión defiende la libertad de las familias como primeras responsables de la Educación de sus hijos y alerta contra las tentativas estatalistas del actual Gobierno en funciones.

¿Cuáles son sus objetivos para esta legislatura?
—Nuestros objetivos son tres. Alcanzar la equidad en Educación, que cada alumno reciba la atención que necesita. Por otra parte, estar al lado de las familias, darles lo que necesitan. Y finalmente, mejorar las infraestructuras.

Sin embargo, en Murcia tienen acuerdos con Ciudadanos y con Vox. ¿Esto condicionará la acción de Gobierno?
—Nosotros tenemos un acuerdo de gobernabilidad y es cierto que en el Consejo de Gobierno están representados dos partidos, pero hay un único Gobierno. Yo no me siento en absoluto condicionada, al contrario, creo que las directrices del Gobierno recogen las ideas que teníamos desde un principio.

¿También respecto al programa de gratuidad universal de libros de textos? Esto era una bandera de Ciudadanos; en el PP siempre han preferido las becas por renta.
—Sí, pero una vez que se ha llevado a cabo hemos visto que este modelo tiene más bondades que desventajas. Al final, en cualquier caso, lo que estás haciendo es ayudar a las familias que lo necesitan.

Otra cuestión que pudo condicionar la acción de gobierno fue la propuesta de Vox del famoso PIN parental…
—En primer lugar quiero recordar que el acuerdo de gobernabilidad contempla maximizar siempre la libertad de la familia. A partir de ahí, lo que hemos planteando es que todos los centros, en su autonomía, aseguren que las familias autorizan las actividades que no son impartidas por el Claustro. Y esto lo quiero resaltar: personas ajenas al Claustro. Porque nosotros estamos muy orgullosos de nuestros docentes y tenemos absoluta confianza en ellos.

¿Por qué modificaron la propuesta de Vox y la extendieron a todo tipo de talleres, no solo a los de igualdad de género?
—Nosotros aprovechamos lo que otros han visto como un escollo para convertirlo en una oportunidad para la familia de poder participar más y de forma más activa en el día a día de los centros.

¿Un modo de corresponsabilizar a las familias con la labor del centro?
—Exactamente, López Mirás [presidente de la Región] dice que este es el Gobierno de la libertad y yo creo que es importantísimo extenderla también al ámbito educativo. Pero para que exista esa libertad tiene que haber elección: si no les dejo a los padres elegir, no hay libertad. De momento, no tenemos quejas, las familias están encantadas de participar.

¿Y los profesores tampoco se han quejado?
—No, porque les hemos dado la posibilidad de que se organicen. Creemos mucho en la autonomía de los centros. De hecho, la Región de Murcia es una de las comunidades que concede mayor nivel de autonomía a los centros.

¿No le preocupa como profesora que las familias se puedan meter en su terreno?
—No, soy una firme defensora de los maestros y profesores de mi comunidad. Soy maestra, es de donde he salido y a donde voy a volver. Como compañera que he sido, estoy muy satisfecha de lo que el profesorado de esta comunidad hace cada día en clase.

Otro de los temas controvertidos es todo lo relacionado con la zonificación a la hora de elegir centro…
—Nosotros ya tenemos distrito único, de modo que el 95% de las familias obtiene plaza en el colegio que eligieron en primera opción. Esto supone un alto grado de satisfacción para las familias porque pueden llevar a sus hijos al colegio que quieren. Además, está comprobado científicamente que cuando un alumno va al colegio que sus padres quieren, el rendimiento es mejor.

¿Están abiertos a crear nuevos centros concertados donde haya necesidades de escolarización, la llamada «nueva concertada»?
—Si existen necesidades de escolarización sí, pero en este momento la verdad es que la región está bien cubierta en ese sentido, no hay grandes necesidades. Pero cuando hubiera necesidad de escolarización nosotros no tenemos ningún problema en que se puedan abrir centros públicos y concertados.

Por cierto, ¿le sorprendieron las declaraciones de la ministra sobre la elección de centro?
—No hay nada de lo que sorprenderse. Yo creo que la hoja de ruta del Partido Socialista está muy clara. No me sorprendí pero sí me hizo pensar que debemos ponernos en guardia, dejar clara cuál es nuestra posición y alertar a los colegios concertados, porque los planes de este Gobierno en funciones no son ninguna broma. Me temo que la Ley Celaá no saldrá como la dejaron. Sus socios de Gobierno le exigirán endurecerla.

¿Hay alguna otra medida fruto de ese acuerdo con Ciudadanos y Vox que se vaya a implementar en los próximos meses?
—Existe el compromiso de seguir impulsando la Formación Profesional. Se está produciendo un hecho histórico y es que nunca habíamos tenido tantos alumnos en FP. En los últimos tres años hemos aumentado en 3.000, hasta alcanzar los 26.000.

¿Y a qué ritmo crece la FP Dual? ¿Termina de despegar?
—En la Dual queremos ser punta de lanza y para ello vamos a ofertar cuantas más plazas, mejor. Ya son 2.000 y 500 convenios firmados con empresas. También incorporando el modelo Dual en la FP Básica.

Pues en la FP Básica es todo un reto porque el nivel de cualificación de ese alumnado es bajo…
—Sí, pero estamos convencidos de que es el futuro. Tenemos que aprovechar esa oportunidad y lo vamos a lograr seguro.

Acuñaron el eslogan de «Formación pasional». ¿Han desaparecido las viejas suspicacias entre el mundo empresarial y los centros?
—Tanto que los empresarios de nuestra región ya solicitan más técnicos de FP que graduados universitarios. Eso nos está diciendo que la formación que han recibido nuestros alumnos es muy buena.

Pasemos al bilingüismo. Me sorprende que lo hayan extendido al cien por cien de los centros. ¿No les podrían aplicar aquello de que «quien mucho abarca…»?
—No porque para ello hemos diseñado modalidades de menos a más exigentes, pero todos tienen alguna. Lo importante es que el bilingüismo ya ha dejado de ser elitista y genera la equidad de la que hablábamos antes.

Lamentablemente no podemos terminar sin hablar de la lacra del abandono educativo [Murcia tiene una de las tasas más altas, con un 23,9%]…
—Sin embargo, estamos esperanzados porque los últimos datos nos arrojaban información positiva y hemos conseguido llegar al 16,4 en el abandono femenino.