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Manuel Portero: “El reto está en generar un marco favorable para desarrollar proyectos de innovación”

El CEO del Grupo Trébol Educación, Manuel Portero, recuerda que existen requisitos legales, de currículum y programas interminables que actúan como camisas de fuerza contra el ingenio y la excelencia de muchos docentes.
Adrián ArcosMartes, 13 de abril de 2021
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Portero es el presidente de la Fundación Trébol Educación, que organiza los Premios de Innovación Educativa.

El próximo 30 de abril es la fecha límite de presentación de candidaturas para la tercera edición de los Premios de Innovación Educativa, unos galardones que nacieron “porque veíamos que era importante identificar y reconocer las buenas prácticas que se están poniendo en marcha desde cualquier rincón de nuestro país”. Así lo expresa Manuel Portero, CEO del Grupo Trébol Educación y presidente de la Fundación que organiza estos premios. Más de 1.000 centros han participado ya en las dos ediciones anteriores, lo que ha convertido este galardón en una referencia dentro del sector educativo.

¿Cree que el trabajo innovador de muchos profesores y de muchos centros educativos no se visibiliza a nivel nacional?
—Rotundamente sí. En Educación hay mucho héroe sin capa. Hay gente que con muy pocos medios, con una sobrecarga importante de trabajo y con limitación de recursos, hace un trabajo verdaderamente ingenioso y excelente. Y todo ello en un sector hiperregulado, donde existe una vigilancia extrema y un marco legal impuesto por la administración educativa que es tremendamente férreo. Hay muchísimos requisitos legales, de currículum, de programas interminables que se tienen que cubrir y que actúan como camisas de fuerza que hacen que los docentes tengan que realizar verdaderos ejercicios de ingenio para poder salir de esos troqueles prefabricados y presentar una propuesta educativa que realmente inspire e ilusione a sus alumnos.

Y mucho más durante todo este año y pico de pandemia.
—Los docentes han estado en primera línea de batalla y han sido fundamentales para que el país funcione. Por eso hemos creado este año la categoría extraordinaria Gestión de la pandemia en los Premios de Innovación Educativa, porque creemos que es importante reconocer y premiar esas circunstancias de trabajo.

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Hay un elemento muy importante a la hora de hablar de innovación, que es el proyecto educativo de un centro y qué rol ocupa la innovación dentro de este

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¿Habría más profesores innovadores si hubiera menos dificultades para visibilizarse?
—Yo creo que el reto a la hora de extender la innovación en un sistema educativo, no son esos profesores que van a ser innovadores en cualquier contexto y frente a cualquier dificultad. El reto es ese otro grupo de profesores que, si les empujamos un poco y si les generamos un marco medianamente favorable para desarrollar proyectos de innovación, se apuntarían. Y como hoy día, ese marco no lo favorece o no lo promueve suficientemente, entonces se quedan como están.

¿Ha podido el Covid despertar la inspiración innovadora de muchos docentes que han tenido que acelerar su proceso de digitalización por obligación?
—Yo he visto dos cosas. La primera es que la gente se ha buscado la vida, porque el refranero dice que la necesidad obliga. Ha habido una gran cantidad de personas que no estaban movilizadas y que ahora han tenido que hacerlo porque era una necesidad, y eso evidentemente acelera los procesos. Y la segunda es que la gente ha tomado conciencia. Muchos docentes han sido conscientes de sus déficits en el manejo de determinadas herramientas o estrategias didácticas, y ello ha generado un movimiento que ha sido positivo para favorecer estos procesos de innovación.

¿Se nota diferencia entre los colegios públicos, concertados y privados en cuanto a la posibilidad innovadora?
—Aquí hay un elemento muy importante a la hora de hablar de innovación que es el proyecto educativo de un centro y qué rol ocupa la innovación dentro de este. Es verdad que en instituciones privadas o concertadas, por su propia organización jurídica y sus estructuras de liderazgo, se impulsan ciertos proyectos de forma más exigente que en la escuela pública, donde muchas veces dependen más del voluntarismo y de la iniciativa propia del profesorado. Pero en la escuela pública hay excelentes ejemplos de innovación y excelentes profesionales que están realizando un trabajo espectacular.

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Me gustaría que la escuela del futuro fuera un reflejo lo más real posible de la sociedad en la que vivimos

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¿Qué tendencias se identifican ahora mismo dentro de la innovación educativa?
—La pandemia ha puesto de manifiesto que la Educación no es una sola, sino híbrida y tenemos que impulsar en las escuelas modelos que permitan esa hibridación de los aprendizajes. Y luego, precisamente por las posibilidades que la tecnología nos ofrece y por todos los experimentos y avances en Inteligencia Artificial, el otro gran tema a nivel de innovación es la personalización de los aprendizajes. Y, por último, están la interculturalidad y el plurilingüismo que, más que tendencias en Educación, son una necesidad provocada por el tipo de sociedad en que vivimos.

¿Por dónde debe orientarse la evaluación?
—Para mí, la evaluación es el gran motor de la innovación. Si una institución educativa no cambia su forma de evaluar, realmente no va a adoptar un verdadero proceso de innovación. Y el principal cambio que tenemos que hacer es que la evaluación deje de verse como una sanción. Tenemos que entrar en una dinámica mucho más formativa en la que quizá haya que cambiar la palabra evaluación por feedback e ir dando a cada alumno la cantidad de información que necesita en cada momento para entrar en una dinámica de mejora continua de sus capacidades y de sus competencias.

¿Cómo ve la escuela del futuro?
—Yo la veo híbrida, muy enfocada a la atención y a la personalización. También deslocalizada: no la veo como un espacio físico, sino como un espacio interdisciplinar, intersocial e intercultural. A mí me gustaría que la escuela del futuro fuera un reflejo lo más real posible de la sociedad en la que vivimos, que es una sociedad interconectada, abierta, con muy pocos límites físicos y, sobre todo, donde alumnos y docentes disfruten.

III Premios de Innovación Educativa

  • Convocante: Fundación Trébol Educación –y organizados por EIM Consultores–.
  • Objetivo: reconocer el trabajo de los centros públicos, concertados y privados que han introducido y sistematizado prácticas innovadoras en sus aulas o fuera de ellas, y que demuestran que están en la vanguardia educativa.
  • Plazo de presentación de candidaturas: hasta el 30 de abril.
  • Fecha de anuncio de los finalistas: 14 de mayo.
  • Fecha de anuncio de los ganadores: 21 de mayo, durante la gala virtual de entrega de los premios.
  • 12 Categorías: Transformación metodológica, Blended Learning, Diseño de espacios de aprendizaje, Impulso de la enseñanza multilingüe, Personalización del aprendizaje, Formación e implicación del profesorado, Proyecto STEAM, Estrategia de Marketing Educativo, Participación e Implicación de las Familias, Proyecto Internacional, Gamificación y Gestión de la Pandemia.
  • Web de inscripción: premiosinnovacioneducativa.com/presenta-tu-candidatura
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