El Gobierno de Cantabria "cree y apuesta por la Educación", afirma Revilla en el Día del Docente

El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha asegurado, en su intervención en el acto institucional conmemorativo del Día del Docente, que el Gobierno regional «cree y apuesta por la educación» y está realizando «un esfuerzo extraordinario para responder con la práctica a la teoría». Concretamente, ha destacado que los presupuestos de la comunidad para 2023 recogen la partida más alta de toda la historia de la educación en Cantabria, 623 millones de euros, lo que supone un incremento del 26% en esta legislatura (130 millones de euros más).

Otro ejemplo de que la Educación es una prioridad para el Gobierno es, ha apuntado, la decisión de destinar 35 de los 96 millones de euros consignados para Cantabria del fondo europeo React, así como el conjunto de medidas puestas en marcha en los últimos años para mejorar la calidad del sistema. Entre ellas, se ha referido a la apuesta por las aulas de 1 año, el apoyo a la escuela rural, la bajada de las ratios en el segundo ciclo de Infantil y, a partir del próximo curso, en 1º de Primaria, o el impulso a la Formación Profesional, con 21 titulaciones nuevas este curso.

Todo ello, ha añadido, ha contribuido a que Cantabria tenga hoy un sistema educativo «a la cabeza de España», según el último informe del Ministerio de Educación, correspondiente al año 2021. A la espera de que se conozca el balance de 2022, «que va a ser bastante mejor», dicho informe revela que la región tiene una ratio alumnos/profesor por debajo de la media (9,8 frente a 11,4), el porcentaje más alto de estudiantes que terminan la ESO (93,1% frente al 85%) y la segunda tasa más baja de abandono escolar (6,4% frente al 13,3%), tan solo por detrás del País Vasco, entre otros parámetros.

Finalmente, ha reconocido la labor de los docentes cántabros y ha mostrado su admiración hacia una «profesión maravillosa» que ha tenido un «comportamiento ejemplar» durante la pandemia, cuando la educación se convirtió en un «refugio» de seguridad para el alumnado.