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Falta de perfiles TIC: 10.500 puestos sin cubrir en 2022

La contratación en el sector podría aumentar un 15% si las empresas dieran con los perfiles que buscan, según el V Estudio Empleabilidad y Talento Digital de la Fundación VASS junto con la Fundación Autónoma de Madrid.
RedacciónMiércoles, 28 de junio de 2023
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Antonio Rueda, director de la Fundación VASS y profesor en la Universidad Autónoma de Madrid; Sonia Pacheco, Global Chief Marketing Officer (CMO) de VASS; Carme Artigas, secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, y Javier Latasa, CEO y presidente de VASS, en la presentación del estudio.

Inmersos como estamos en la transición digital, los especialistas TIC en España no hacen más que aumentar. Lo hicieron en 72.000 en el último año hasta alcanzar los 601.233, lo que nos convierte en el país más dinámico entre las grandes economías europeas. Sin embargo, todavía hay margen.

Así se desprende del V Estudio Empleabilidad y Talento Digital de la Fundación VASS y la Fundación de la Universidad Autónoma de Madrid sobre el gap de talento digital, referido al año 2022.

Ese año, al 61% de las empresas que buscaban especialistas TIC les costó dar con candidatos adecuados para cubrir sus vacantes, lo que se tradujo en hasta 10.500 puestos técnicos sin cubrir.

Según el mismo estudio, las empresas podrían crear un 15% más de empleo si dieran con los perfiles adecuados.

61%
de las empresas

que buscaban especialistas TIC tuvieron dificultades para dar con la persona adecuada

Al tiempo, los salarios en el sector se incrementaron de tal forma que los jóvenes tuvieron en 2022 unas expectativas salariales un 8,3% superiores al año anterior.

Formación, brecha de género y competencias

En el curso 2021-22, había 352 titulaciones de Informática, un 23% más de las que existían en el curso 2015-16, con 68.635 matriculados, un 41,5% más, y pese a que las mujeres estaban infrarrepresentadas (16,2%), su número ha crecido un 80% en este periodo.

España cuenta con la mayor tasa de especialistas TIC con estudios superiores de la UE, 82%, pero, de nuevo, en la proporción de especialistas TIC en relación al empleo total se aprecia margen de mejora.

A ello se añade el gap competencial. Si situáramos en un nivel 100 el talento que buscan las empresas en estos perfiles, los universitarios que entran cada año en el mercado laboral lo hacen con apenas 55,9 puntos, lo que supone una pérdida de oportunidades y actividad económica que se puede cifrar en 2.300 millones de euros al año y ha llevado a las empresas a tener que incrementar el número de horas que dedican a reforzar la formación, que han crecido un 34,6% desde 2019 (o 3.300 euros por persona más, en total más de 235 millones de euros invertidos en los perfiles junior).

Estas competencias que se tienen que terminar de perfilar ya en el puesto de trabajo son tanto hard skills (58,3% del talento técnico IT) como soft skills (41,7%).

Crecimiento sostenido y sostenible

Desde 2020, el sector de las tecnologías de la información y comunicación ha experimentado un crecimiento del 19,8%, de forma que en 2023 emplea a 653.500 profesionales. Esta tendencia al alza se mantendrá en los próximos años, con una previsión de un incremento de la inversión en tecnologías y servicios relacionados con la transformación digital de un 57% entre 2023 y 2026.

En 2022, el 13,4% de las empresas españolas de 10 empleados o más reclutaron o intentaron reclutar estos perfiles, por encima del 9,5% de promedio de la UE y solo por detrás de Dinamarca, Bélgica, Malta y Países Bajos.

En palabras de la secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial Carme Artigas, presente en la presentación del estudio junto a José Ramón Seoane, director de la Fundación de la Universidad Autónoma de Madrid; Francisco Javier Latasa, presidente de VASS y Fundación VASS; María de Miguel, subdirectora general de Talento y Emprendimiento Digital y Antonio Rueda, director de la Fundación Vass, «el éxito de la digitalización en nuestro país depende en gran medida de lograr cubrir la brecha que deja un modelo productivo y laboral que va a estar en constante transformación. La clave para alcanzar este equilibrio es ser capaces de anticipar los cambios, tendencias y nuevos escenarios que están por venir».

Contexto de incertidumbre

El estudio alude también al «contexto de incertidumbre global» y los desafíos que plantea para el sector tecnológico. En este sentido, matiza el hecho de que se haya producido un pinchazo de la burbuja digital. En 2022 hubo un total de 160.000 despidos registrados entre más de 1.000 empresas del sector en todo el mundo, pero esta cifra, sitúa el estudio, representa un 2,5% del total de su fuerza laboral, 2,2 millones de trabajadores. Al tiempo, explica, estos «ajustes» no recayeron tanto en la esfera técnica como en la comercial y administrativa.

En el contexto europeo, recuerda, una tercera parte de los fondos de recuperación (Next Generation EU) van destinados a la transición digital.

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Al menos hasta la fecha, no se percibe un cambio de rumbo radical: la digitalización sigue siendo uno de los (innegociables) nuevos paradigmas del crecimiento

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