UGT-Madrid reclama mejoras en el mantenimiento de los centros

La vuelta presencial a las aulas madrileñas tras el temporal Filomena no estuvo exenta de polémica. Si bien desde la Comunidad de Madrid aseveraron que la mayoría de los problemas registrados en los centros educativos estuvieron relacionados con complicaciones en el sistema de calefacción y del agua corriente, así como por el riesgo de desprendimiento de nieve, desde el sindicato UGT-Madrid manifestaron, a través de un comunicado, que la borrasca destapó las deficiencias estructurales de los edificios de la región.

De igual modo, criticaron que el consejero de Educación de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio, intentara minimizar las consecuencias que la nieve y la ola de frío causaron en los colegios e institutos madrileños. “Desde hace, al menos, cinco años, el presupuesto para infraestructuras y mantenimiento de los centros educativos se ha ido reduciendo y, aún así, no se ha utilizado la totalidad de la partida destinada a este fin”, expresaron desde UGT-Madrid.

En una conversación mantenida con Ricardo Marchand, el responsable de Enseñanza Pública del sindicato declaró que, como hasta el momento no había habido ninguna catástrofe meteorológica como Filomena, “no se había evidenciado todo lo que venimos reclamando durante todos estos años con respecto al mantenimiento de los edificios escolares, ya que, o bien no se ha hecho correctamente, o bien no se ha invertido lo que se tenía que invertir”.

Así, en el comunicado, señalaron que, en el Pleno del Consejo Escolar de Madrid del día 15 de diciembre, UGT presentó una propuesta de mejora que fue aprobada y que pedía aumentar, significativamente, el presupuesto destinado a gastos para obras, “dado que muchos centros públicos tienen una urgente necesidad de obras de conservación y equipamientos”. 

En esta línea, Marchand explicó que se refieren, sobre todo, a reparaciones estructurales como, por ejemplo, la renovación de los tejados de los centros más antiguos, “pero, sobre todo, al tema de la climatización, de la calefacción, que es una de las cuestiones claves, dada la situación actual de pandemia y de bajas temperaturas”. 

Por su parte, desde la Consejería de Educación de la Comunidad defendieron que el 98,4% de los centros de la región pudo abrir sus puertas, el pasado miércoles 20 de enero, para retomar las clases presenciales. “La Comunidad realiza todas las actuaciones necesarias para garantizar un buen mantenimiento de los edificios educativos. Tan solo en este curso, la región ha dedicado más de 20 millones de euros para mejoras y mantenimiento de los centros de su competencia».

Y finalizaron: “La nevada fue una situación sobrevenida que superó todas las expectativas y, aún así, solo un 1,4% no pudo abrir el primer día de clases presenciales. De igual modo, se ha asegurado una correcta climatización de los edificios, ya que se mandó una circular a todos los centros de la región antes de que empezara el temporal para que pusieran en funcionamiento las calefacciones ese fin de semana, aunque no hubiera niños en las aulas».

Por otro lado, el sindicato STEM ha defendido, a través de una nota de prensa, el adelanto de la vacunación del personal de los centros educativos. “Llamamos a las autoridades sanitarias a anticipar la vacunación de los docentes y no docentes, y a incluir al alumnado mayor de 15 años”. Para la organización, esta acción es “una medida imprescindible para garantizar la enseñanza presencial durante el resto del curso”, ante la situación epidemiológica actual. 

“Por citar un ejemplo reciente, el 14 de enero, los sindicatos de enseñanza franceses, en declaración conjunta, pidieron aclaraciones acerca de la política de vacunación para el personal docente, señalando que no puede improvisarse en el último momento”. De igual modo, desde STEM han detallado que, en esta dirección, están apuntando también organizaciones de reconocido prestigio.

Y añadieron: “Si no adelantamos la vacunación del profesorado, en la situación sanitaria actual, podemos ver un incremento significativo de las bajas y las cuarentenas, tanto entre los docentes, como entre el alumnado. O lo que sería peor: la suspensión de las clases presenciales. Este es un escenario que debemos evitar a toda costa, por ello, debemos tomar la delantera”.

Asimismo, desde FSIE-Madrid también han lanzado una campaña a favor de la vacunación para los trabajadores de los centros educativos y de la atención a la discapacidad, puesto que entienden que “se les debe reconocer como grupo prioritario y esencial”.