El 58% de jóvenes ingresados por problemas de salud mental se autolesiona

Un estudio realizado por la Universidad de Vic de Barcelona revela que el 58% de los jóvenes de entre 12 y 18 años ingresados por problemas de salud mental se autolesionan. El estudio «Autolesión no suicida en adolescentes y adultos jóvenes en Cataluña», liderado por la investigadora en Psicología Laia Briones, indica que los motivos más frecuentes para autolesionarse son la dificultad para gestionar emociones negativas y padecer trastorno límite de la personalidad.

Según ha indicado esta mañana la universidad en un comunicado, el objetivo de la investigación era «estudiar los factores de riesgo que llevan a la autolesión y abordar la autolesión como un factor de riesgo en psicopatologías y suicidios».

Para ello, la científica han analizado a 240 pacientes adolescentes y jóvenes con alguna psicopatología y que se encuentran en una unidad de hospitalización.

Briones ha explicado que los jóvenes que se autolesionan lo hacen «por una desregularización emocional», porque «tienen problemas para afrontar dificultades y gestionar emociones desagradables».

«Notan que cuando se autolesionan es como si se produjese una relajación de sus emociones», ha afirmado la investigadora, que ha dicho que otra razón para autolesionarse es «sentir una sensación fuerte a modo de estímulo».

Las formas más comunes de autolesionarse son cortes en lugares poco visibles, especialmente los brazos, y que normalmente esconden con la ropa «para no sentirse estigmatizados o rechazados», ha explicado.

«Cuando los jóvenes se autolesionan -ha asegurado Briones-, no necesariamente tienen una finalidad suicida, pero el hecho de repetirlo es un factor de riesgo muy importante para el suicidio«. Por ello, ha afirmado que «es muy importante detectar las autolesiones a tiempo, antes de que se conviertan en una conducta persistente, tanto en el ámbito familiar como escolar».

El estudio se publica un día después de que se diera luz verde al Plan de Atención de Salud Mental 2022-24, que tiene como pilares la atención en las conductas suicidas y prevención de adicciones y reforzar la incorporación de especialistas.

Uno de los compromisos de este nuevo plan es el aumento de las plazas en psiquiatría infantil y adolescente, ya que debido a la pandemia los problemas de salud mental y emocional de los menores ha aumentado considerablemente.