Carmen Pomar anuncia que las oposiciones docentes en Galicia se trasladan también a 2021

Galicia se ha caído del grupo minoritario de comunidades que apostaban por mantener la convocatoria de oposiciones docentes en 2020. Con esta baja, tan solo dos, Cataluña y el País Vasco, perseveran en su intención de celebrarlas este año pero ya no este curso, sino a partir de septiembre.

En su comparecencia en la Diputación Permanente del Parlamento gallego, Carmen Pomar acabó con la incertidumbre de miles de opositores y aseguró, al tiempo, que las plazas ofertadas se blindarán y la inscripción se reactivará en cuanto se levante la suspensión de los plazos administrativos por el estado de alarma. «Blindamos la celebración de la OPE docente de Galicia del año 2020 ante eventuales cambios de criterio de un Gobierno central condicionado por una situación económica adversa y que ya está anunciando posibles recortes», aseveró Pomar, que convocará esta semana una mesa sectorial para abordar el aplazamiento de la OPE.

En su intervención, la conselleira insistió en la «lealtad institucional» de Galicia con el Gobierno central, aunque se mostró crítica con el Ministerio de Educación y Formación Profesional por eludir su «responsabilidad» y dejar sobre el tejado de las comunidades autónomas sus competencias para fijar unos requisitos claros para titular. De hecho, el viernes, al publicarse la orden al respecto en el BOE, Galicia envió una carta al Ministerio criticando este marco, en virtud del cual la Consellería elaboró las instrucciones que remitió a los centros el lunes 27.

La semana pasada, en su reunión con los sindicatos y las organizaciones de padres y madres, Pomar reiteró que consideraría positivo que el alumnado pudiera volver a las aulas este curso, sobre todo desde el punto de vista socioafectivo.

Desde el sindicato docente más representativo de Galicia, CIG-Ensino, se criticó que el encuentro con la conselleira llegara tarde, seis semanas después del cierre de centros educativos, y que se tratara de un acto meramente formal, «que solo habría tenido sentido al inicio del confinamiento».

En cuanto a las oposiciones, se cuestionó que se «reactive» una inscripción que en realidad no se llegó a abrir por el estado de alarma. El sindicato se mostró más partidario de un único plazo de matrícula en 2021 y una única orden de convocatoria, también en 2021, con las plazas de 2020 y 2021.