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Defensor del Profesor: aumentan las agresiones al profesorado y el 78% sufre ansiedad

Los casos de ansiedad y depresión aumentan entre los docentes, especialmente entre los profesores de Secundaria y Bachillerato, donde también se ha detectado un aumento de las agresiones al profesorado, según el último informe del Defensor del Profesor, que eleva al 78% los casos atendidos por ansiedad.
EfeMiércoles, 23 de noviembre de 2022
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Este estado de tensión constante que afecta a la salud mental del docente se refleja en más bajas laborales que ascienden ya al 15%, según ha constatado en rueda de prensa la coordinadora estatal del servicio del Defensor del Profesor, Teresa Hernández, que ha cifrado en un 6% el aumento de agresiones a docentes (empujones, insultos y tirones de pelo, principalmente), «un dato pequeño pero relevante».

En la presentación del informe del servicio del Defensor del Profesor del sindicato ANPE del profesorado de la enseñanza pública correspondiente al curso 2021-22, Herrera ha relacionado este aumento de agresiones al profesorado en un contexto de crispación tras la pandemia en el que están instalados los alumnos y sus familias, si bien también se encuentran con padres «violentos de por sí, en el ámbito social, familiar y educativo».

Un 12% de falsas acusaciones

Este año el informe del Defensor del Profesor ha incorporado un nuevo apartado sobre las «falsas acusaciones» de alumnos que no tienen fundamento pero que obligan al docente a demostrar su falsedad. Estas acusaciones las denuncian a nivel estatal un 12% de los profesores, y un 18% en el caso de la Comunidad de Madrid. Una de las que más se reitera es aquella en la que los alumnos afirman que el profesor le «mira mal», observación que tensan la relación con el docente que llega incluso a tener miedo a entrar en clase, señala Hernández.

En el curso 2021-22, el servicio de ANPE atendió 1.994 actuaciones, 34 más que en curso anterior. Aunque no se trata de un aumento significativo, señala Hernández, sí lo es la complejidad de los casos en los que confluye estado anímico, ‘burnout’ o síndrome del profesor quemado, carga burocrática y lectiva, ratios elevadas y atención a alumnado con necesidades especiales. Es llamativo el aumento de actuaciones en el caso de los profesores de Secundaria que suman un 42% y crecen un 4% respecto al curso anterior. Por contra, descienden las actuaciones atendidas en Primaria que pasan del 44 al 39% y en Infantil se mantiene en un 6%.

Exceso de burocracia

Según recoge el informe, otra tipología de casos atendidos son aquellos referidos a problemas con la Administración que suben del 25 al 30%. Se trata, según consta en el informe, del estado de tensión que provocan las actuaciones de las administraciones educativas entre el profesorado debido a la publicación de protocolos de actuación ante la covid «tardíos y cambiantes, recortes en personal de apoyo para atender a los alumnos y cambios normativos con el curso empezado». A ello se une la labor de seguir atendiendo al alumno presencial y al que se encuentra confinado, la puesta en marcha de estos protocolos junto con otros relativos al acoso escolar, la ideación suicida, acoso Lgtbi y transfóbico, abusos sexuales y violencia de género.

Todas estas tareas, reconoce el informe, supone una mayor carga burocrática y hace que la relación con la administración se resienta. Por ello el informe insiste en que los docentes «se sienten solos y con una responsabilidad que excede sus funciones».

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