fbpx

Pactos de última hora PSOE-CiU pueden cambiar la LOE

Menos mal que la LOE había nacido bajo la égida del consenso y el diálogo. No se entiende entonces por qué sigue pactándose una y otra vez en su trámite parlamentario. El establecido con CiU es el último... de momento
Miércoles, 21 de diciembre de 2005
0

Autor: José M. LACASA

Tras la trayectoria que lleva en su trámite parlamentario, a nadie le puede extrañar que la Ley de Educación tenga aún abierta la veda de los pactos. De hecho, tras la abstención de Izquierda Unida del pasado jueves –lo que consiguió que sólo partidos nacionalistas acompañaran al PSOE en su voto afirmativo a la LOE–, se han facilitado las cosas.

Por ejemplo, entre otras cosas, CiU está intentando cambiar dos enmiendas pactadas entre PSOE e IU, y por ello sigue negociando con el PSOE de cara al próximo trámite en el Senado. Estas dos enmiendas se refieren a la existencia de un representante del ayuntamiento en los consejos escolares de los centros –también de los concertados– y a que el titular del centro proponga el proyecto educativo, pero que sea el consejo escolar el que lo apruebe.

Pactos con CiU

Ninguna de estas dos medidas les gusta a los responsables de CiU, y por ello continúan negociando, incluso dentro de una negociación más amplia y de mayor calado político en que están inmersos el PSOE y los nacionalistas catalanas, de espaldas incluso a los incómodos socios del tripartito de Maragall, que tantos votos está restando al Partido Socialista en el resto de España.

De hecho, al menos ya han llegado a un acuerdo ambos partidos, y el PSOE se ha comprometido a eliminar durante el trámite en el Senado la enmienda que colocaba a un responsable municipal de los consejos escolares de los centros escolares (figura calificada por los opositores a esta Ley como un auténtico “comisario político”) .
Sin embargo, aún no han llegado a un acuerdo para que el titular de un centro educativo no sólo proponga, sino que disponga el proyecto educativo que su centro ofrece a la sociedad, y que este no esté condicionado a los vaivenes de un consejo escolar cambiante.

Algunas fuentes consultadas por MAGISTERIO dicen que, aunque aún no se ha conseguido, el pacto está cerca en ese punto. Hay también algunos otros temas en el tintero que pueden fructificar en breve. Aún puede haber sorpresas.

El PP y Rubalcaba

El Partido Popular realizó, dos días antes de la aprobación de la LOE por el Congreso, una tímida jugada, pero que le salió mejor de lo que podían prever. La jugada consistió en el anuncio de una serie de medidas, entre las que destacaba el compromiso de los consejeros de Educación de las comunidades gobernadas por el PP de impartir “una formación común, que favorezca un patrimonio cultural y de conocimientos común”, exámenes de septiembre, evaluaciones externas, eliminación del Bachillerato a la carta, PIP con pasarelas, compromiso presupuestario con la escuela pública y desarrollo de una carrera docente.

Nada nuevo, y con muchos puntos flacos: queda mucho por definir, y algunas de las propuestas son de una complejidad técnica de difícil cumplimiento cuando no existen órganos de coordinación y gobierno que las lleven a cabo. Sin embargo, Alfredo Pérez Rubalcaba, contra su costumbre, les regaló el campo al PP al decir que estructurar una Educación común iba en contra de la LOE, y llamándolos “insumisos”. 

0