Jóvenes voluntarios de emergencias por un día
Autor: Marta SAHELICES
A principio de mes un gran huracán devastó una pequeña comunidad centroamericana. Su paso por la zona dejó cientos de muertos, heridos, damnificados y decenas de voluntarios manos a la obra para ayudar a los más desfavorecidos.
Éste sería el titular de una noticia publicada en cualquier medio de comunicación del mundo. En él se haría referencia a una información cada vez más común en nuestro planeta: los desastres naturales y sus consecuencias en la población. Afortunadamente, en esta ocasión simplemente se trataba de un simulacro, una escenificación que los chicos del centro educativo “Padre Piquer” realizaron para aprender cómo reaccionar ante una catástrofe natural de tal calibre.
La iniciativa, creada con el objetivo de sensibilizar sobre la vulnerabilidad de las comunidades más pobres por Obra Social Caja Madrid, junto a Acción contra el Hambre, Bomberos Unidos sin Fronteras y Médicos del Mundo, sirvió además para poner de manifiesto el Plan de Emergencia de Obra Social Caja Madrid que permite la rápida actuación de las tres ONG en situaciones de emergencia.
Durante la jornada de sensibilización, los muchachos del “Padre Piquer” representaron los efectos del huracán metiéndose en los papeles de los diferentes implicados en la alerta: fueron aldeanos, bomberos, médicos, nutricionistas e incluso dieron forma al propio huracán y aprendieron de un modo original cómo los desastres naturales que tienen lugar en todo el planeta afectan más a aquellos que menos tienen.
Los escolares fueron guiados en todo momento por cooperantes y profesionales de las tres ONG: miembros de la unidad canina de BUSF, voluntarios de Médicos del Mundo y nutricionistas de Acción contra el Hambre.
El simulacro estuvo precedido de talleres en clase con los mismos alumnos que participaron en la actividad. La sensibilización ha abordado las diferencias entre el Norte y el Sur y las causas y consecuencias de la pobreza en los países en desarrollo.
