La Federación de padres dice que los recortes merman calidad de la enseñanza
La Federación de Madres y Padres de Alumnos (Fampa) de Burgos considera que los recortes económicos que según han señalado efectúa la Consejería de Educación merman la calidad de la enseñanza en Castilla y León. El presidente de la Fampa de Burgos, Enrique García, ha señalado que, aunque desde la Junta de Castilla y León se asegura que los recortes sólo afectan a cuestiones superfluas y pese a la incertidumbre sobre el alcance que tendrán los recortes de fondos a los centros ya se pueden apreciar "perjuicios directos a la calidad de la enseñanza". Ha puesto el ejemplo del programa "Red XXI" para el uso generalizado de ordenadores en las aulas.
Ha recordado en declaraciones a Efe que en la mayoría de los centros todavía no está implantado y, sin embargo, ya se ha anunciado desde el Gobierno regional que, por el momento, no habrá más miniportátiles para los alumnos ni se adaptarán los centros que aún no disponen de la tecnología necesaria. El presidente de Fampa asegura que también han detectado que las bajas de profesores tardan mucho en cubrirse o no se cubren, incluso en los casos de bajas que se pueden programar con antelación. Otra consecuencia de los recortes en la Educación que reduce la calidad de la enseñanza, según García, es la supresión de las aulas de diversificación en algunos centros, lo que hace difícil que alumnos con especiales dificultades para seguir el ritmo normal de las clases puedan terminar sus estudios.
El delegado territorial de la Junta, Baudilio Fernández, ha explicado a Efe que la normativa indica que los grupos de diversificación sólo se pueden poner en marcha donde haya al menos ocho alumnos que lo requieran. En este sentido, ha precisado que la Junta de Castilla y León se ha limitado a aplicar la normativa en los centros concertados y que en los públicos incluso ha rebajado esta exigencia y los mantiene donde haya al menos seis alumnos. La vicepresidenta de la Fampa de Burgos, Marisa Beunza, ha asegurado que los recortes están afectando también al funcionamiento ordinario de los centros, con reducción de las horas de calefacción, del funcionamiento de ascensores, luces o del uso de teléfono y fotocopias.